Capítulo 62: Camareros

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No fue hasta la tarde que Eda regresó al Caldero Chorreante, que estaba lleno de gente charlando y bebiendo. Los viajeros de todas partes que venían a Londres solían pasar por este lugar.


Unas cuantas brujas viejas se apiñaban juntas en un rincón, susurrando sobre algo, mientras sus jarras de hidromiel permanecían intactas. Los magos que sostenían whisky de fuego bebían con ganas, su alegría provenía de alguna razón desconocida.


Un mago bajito vestido de una manera peculiar y un mago barbudo desaliñado estaban debatiendo ferozmente el contenido de Transfiguración Hoy. Si no fuera por alguien que los retenía, podrían haber terminado peleándose.


Magos de todo tipo iban y venían en el pequeño bar, lo que lo convertía en un lugar animado.


Los camareros del bar iban de un lado a otro, tratando de atender a los clientes. Llevaban bandejas mientras se abrían paso entre la multitud, mientras que algunos clientes impacientes ocasionalmente gritaban fuertes quejas.


Incluso el dueño del bar, Tom, no podía quedarse detrás del mostrador limpiando vasos como de costumbre. Él también estaba ocupado, su boca desdentada sonreía de una manera que pretendía complacer a los clientes.


A pesar del ruido y el caos, Eda no encontró el bar desagradable. En cambio, encontró divertidos a estos magos ruidosos, por lo que no se dirigió directamente a su habitación en el piso de arriba.


Aunque había estado en el Caldero Chorreante el pasado agosto, solo había estado de paso y no se había quedado, por lo que no había visto esta escena animada y realista.


Con su situación laboral resuelta, Eda se sintió lo suficientemente relajada como para observar a los clientes del bar. Algunos vestían ropa elegante, mientras que otros llevaban atuendos sencillos; algunos estaban llenos de energía, mientras que otros parecían apresurados. Estas personas podrían reflejar cómo podría ser el futuro de Eda.


Eda se apoyó en la barra, sosteniendo una pequeña taza de té. Aunque Tom le permitió quedarse, no le ofreció alcohol, por lo que Eda tuvo que conformarse con té y agua sola.


De vez en cuando, algunos clientes abrían la puerta y entraban. Algunos se dirigían al Callejón Diagon para hacer compras, mientras que otros simplemente venían al bar a tomar una copa o a reunirse con viejos amigos y charlar.


Después de entrar, muchos de ellos miraban a Eda.


Naturalmente, una cara bonita tiende a atraer la atención, y Eda, apoyada contra la barra, era realmente difícil de pasar por alto.


Con su llamativo cabello largo y rubio y su túnica oscura de mago, Eda destacaba aún más. Si no fuera por su corta edad, probablemente alguien se habría acercado a ella para charlar.


Sin embargo, si las frases para ligar de un mago serían cliché u originales seguía siendo un misterio.


Si Eda estuviera vestida con una túnica más elegante y se parara afuera de Madam Malkin's Robes for All Occasions o Twilfitt and Tatting's, sin duda serviría como un anuncio viviente, una anfitriona perfecta para atraer clientes.

Esmeralda de HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora