Capitulo 2

31 7 14
                                    

Al salir del aula, Tyler se puso a mi lado, y la conversación fluyó con facilidad. ¿Te gusta el café? Hay una cafetería genial cerca, me preguntó.

Me encanta el café, respondí, sonriendo. Especialmente si es un viernes por la tarde.

Daylen caminaba detrás de nosotros, lanzando miradas que parecían estar llenas de diversión. ¿Vas a llevar a Mia a una cita de café, Tyler? ¿Es eso lo que estás haciendo?

—Tyler se rió nerviosamente. No es una cita, solo un… umm, estudio social.

-Claro,le respondí. Porque nada grita ‘estudio social’ como un café en pareja.

Daylen se metió en la conversación con su tono que me irrita. –Sí, ¿por qué no invitas a toda la clase? ¡Así sería un verdadero estudio social!.

—Quizás debería, le respondí, girándome hacia él. —Así podrías quedarte fuera y no arruinarlo todo con tus comentarios.

-¿Arruinarlo? Por favor, soy el alma de la fiesta, replicó Daylen, con una sonrisa que me sacaba de quicio.

Tyler interrumpió antes de que pudiera contestar. —Vamos a la cafetería antes de que esto se convierta en una batalla campal.

—Cuando llegamos al lugar, nos sentamos en una mesa al aire libre. El ambiente era relajado y el aroma del café flotaba en el aire. Tyler pidió dos cafés y un pastelito para compartir. Mientras tanto, Daylen seguía lanzando miradas divertidas.

—¿Cómo es que siempre terminas con el chico más Popular y aburrido de la clase?,— preguntó Daylen mientras jugueteaba con su taza.

—"No es aburrido", lo defendí rápidamente. Es simplemente normal. Y además tiene buenas intenciones.

—¿Buenas intenciones? Vamos, Mía. Esto suena como una película romántica mala,— dijo Daylen mientras hacía gestos exagerados.

—Al menos no estoy atrapada en un cliché romántico contigo, le respondí con una sonrisa desafiante.

Daylen arqueó una ceja. ¿Cliché? Yo soy todo menos eso. Soy… único.

—Único como un perro que se cree gato, le lancé.

Tyler se rió entre dientes mientras Daylen fruncía el ceño. “Oye, eso no fue justo.”

Justo o no, al menos tengo razón, dije mientras disfrutaba mi café.

El ambiente se tornó más ligero cuando compartimos risas sobre anécdotas pasadas y chistes internos que solo nosotros entendíamos. Sin embargo, cada vez que Daylen intentaba hacerme reír, había algo en su mirada que me descolocaba.

Después de unos minutos de charla divertida, Daylen decidió cambiar de estrategia.

“Mia”, dijo con tono serio pero juguetón, —tienes que admitir que te divierte pelear conmigo.

—No lo admito, respondí rápidamente. Solo me irrita tu arrogancia.

—Arrogancia o confianza, dijo Daylen encogiéndose de hombros. Tú decides.

Tyler miró entre nosotros dos y se rió suavemente. —Ustedes dos deberían tener un programa de televisión o algo así.

—Solo si tú eres el productor-le dije a Tyler mientras le lanzaba una mirada burlona.

—Perfecto, dijo Tyler sonriendo mientras tomaba un sorbo de su café. Podríamos llamarlo ‘El Café del Drama.’

–Daylen hizo una mueca dramática y dijo: ¡Eso suena horrible! Pero aún así sería mejor que ver cómo Mía intenta ignorarme.

Amor Y ContrasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora