CRISTIAN:
A media noche escuché un llanto y algunos gritos, me levanté sobresaltado de mi cama, me dirigí hacia la fuente de esos gritos: la habitación de mi hermana, abrí la puerta.
Lorena estaba retorciendose en el saco de dormir, tenía la cara roja y algunos mechones de pelo en ella, se veía destrozada. Solamente pude sacarla del saco de dormir, mis dedos entraron en contacto con su piel, estaba helada. Le saqué los cabellos rebeldes de su rostro y las lágrimas, a pesar de tener los ojos cerrados estaba llorando.
Observé a su lado, mi hermana estaba durmiendo en la cama, no es sorpresa para nadie que si le cae una bomba al lado tiene la capacidad de no enterarse, yo por mi lado cualquier ruido nocturno, por muy pequeño que sea me despierto.
Tomé a la pequeña pitufina en mis manos, en cuanto su cuerpo entró en contacto con mi piel su cuerpo se relajó, su ceño ya no estaba fruncido y tanto el llanto como los gritos cesaron. Se veía en paz, como debe estar, la llevé a mi habitación, la acosté en mi cama y encendí la lámpara de noche porque sé que le teme a la oscuridad.
Me acosté a su lado, ninguna chica que no fuese mi mama o mi hermana han estado en mi habitación, nunca he dormido con nadie, por lo general voy a algún hotel, reservo dos habitaciones me follo a alguna chica en una y me voy a dormir a la otra, ninguna chica me ha hecho sentir como ella, ella tiene la capacidad de poner en duda todo lo que sé, toda mi experiencia con las chicas, todos mis encantos, nada funciona con ella.
Recordé lo de anoche, cómo con tan poco logró hacerme una erección por tanto tiempo, ninguna chica ha logrado eso en mi, solo ella.
Solo con ella voy a dormir una noche casi entera sin tocarla de una forma que no deba, pero eso es típico de ella, es de esperar, de todas las chicas ella fue mi primer beso, la única persona a la que le he confesado que le quiero y la única que ha logrado herirme tantas veces.
Me pregunto que estaría soñando, solo la he visto así dos veces en mi vida, esta noche y el día que perdió a sus padres.
Le di un beso en la frente y le susurre:- Buenas noches, pitufina.
La abraze y dormí mejor que nunca.
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Mil veces más
RomanceAntes he tenido esa clase de sueños... esos en los que me despierto llorando porque desearía que fuese realidad pero esta vez fue diferente.