~•Capitulo 2•~

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Después de mil pasos que se sintieron eternos, por fin estaba frente a su auto, se subió en el y partió a casa inmediatamente. Luego de unos 20 minutos aproximadamente llego a casa

-¡Amor, estoy en casa!

Toda su casa estaba diseñada con paneles que cambiaban según sus deseos, las paredes parecían normales pero en realidad eran como enormes pantallas computarizadas que mostraban lo que se les indicara, muchas de esas veces, ellos estaban en medio de la nada disfrutando de las estrellas o podían estar sobre una balsa en el mar o en la selva más densa, era como vivir en una realidad virtual sin tener los molestos lentes en la cara y la experiencia era aún más real, igualmente el suelo era del mismo material y estaba configurado para simular siempre el mar y algunas especies de peces, como si la casa estuviese construida sobre el agua. Y si a todo esto le sumamos el controlador de clima, que podía simular cualquier tipo de ambiente con precisión, teníamos una casa perfecta, una perfecta y costosa casa que sólo personas con un cargo como jefe militar de un equipo de fuerzas especiales, podrían costearse.

-¡Tae! ¿Dónde estás?!- No recibió respuesta y sólo se escuchaba un silencio ensordecedor en la vivienda, roto únicamente por el sonido de sus pasos.

Por la hora, seguramente Jungkook se cansó de esperarlo y se acostó a dormir. Miró su reloj que marcaba las 12:19 a.m. suspiró con resignación, últimamente a raíz del caso del asesino "Golden", llegaba cada vez mas tarde a casa y no le quedaba mucho tiempo para su pareja, incluso algunos días, ni siquiera se dirigían la palabra por no cruzarse a las horas adecuadas.

Dirigió sus pasos hasta la habitación de ambos y tal como había pensado, encontró a Tae envuelto en sabanas, profundamente dormido sobre la cama, estaba desnudo o eso aparentaba porque no tenía ropa en las partes donde la sabana no cubría.

Se acercó hasta sentarse a un lado de su esposo y acarició sus cabellos, su mirada reflejaba lo mucho que amaba a la persona sobre la cama, lo mucho que estaba perdido en él, Tae se removió un poco debido a los suaves toques y abrió pesadamente sus ojos.

-¿Jungkook? ¿Qué hora es? -Murmuró con la voz somnolienta.

-Es medianoche, no quise despertarte, lo siento

Tae tomó asiento en la cama con parsimonia y aun medio adormilado.

-Está bien, quería verte. ¿Ya comiste? Puedo cocinar algo para ti

Jungkook sonrió apenas un poco mientras acariciaba la mejilla del contrario

-No te preocupes, vuelve a dormir, me daré una ducha y yo mismo me preparo un sándwich cuando salga

Tae asintió para posteriormente tomar la palma que acariciaba su rostro y besarla con ternura.

Regresó a su cómodo nido mientras Jungkook se levantaba para dirigirse hasta la puerta del closet, busco algo de ropa y se desvistió

De inmediato se metió a bañar intentando despejar su mente y dejar de pensar en el psicópata que anda suelto en las calles de Corea, pero era imposible y su mente divagó por quien sabe cuánto tiempo, aunque no parecía ser mucho por el rubio.

Envuelto en una toalla, regresó a la habitación, aparte de los boxers no planeaba vestirse para dormir. Dejó la toalla en el closet, se puso un bóxer y sin prestar mucha atención a su entorno, caminaba dispuesto a ir por su comida fuera de la habitación pero sus planes se vieron interrumpidos cuando antes de salir, dio una última mirada a Tae y justo sobre el velador reposaba un plato con un sándwich de jamón, justo como el que quería comer en ese momento

Su corazón revoloteó acelerado dentro de su pecho y por un momento se sintió morir de amor, Tae se había levantado a prepararle un sándwich mientras se duchaba, sin importar cuanto sueño pudiera tener lo hizo.

Agradeció al universo por haberle dado la dicha de casarse con este compañero de vida. Caminó con los ojos brillantes y llenos de amor hasta la mesa, tomó el plato y se metió en la cama, sintiendo el calor que sólo Tae podía darle, depositó un amoroso beso sobre la frente del chico antes de susurrarle algo al oído.

-Gracias. Te amo...

El día siguiente...

Jungkook salió temprano como acostumbraba y por supuesto, Tae seguía dormido para cuando eso sucedió, en momentos como estos es que odiaba su trabajo, ya casi no veía a su esposo y se sentía terriblemente mal por ello, sentía algo parecido a un vacío, imaginaba que, de esa misma manera, se sentía su chico y saberlo no le agradaba en lo más mínimo.

-Señor, buenos días, tenemos noticias- Fue lo primero que escuchó cuando atravesó la puerta

Miró el rostro de quien le hablaba, era no de los mejores que tenía a su cargo, Bang Yong Guk.

-¿Que encontraron, Yong Guk? -Preguntó sin dejar de caminar hacia su oficina con el chico siguiéndole de cerca.

-Una dirección

Jungkook se mostró confundido y detuvo su paso para verle a la cara al contrario

-¿Una dirección? ¿De dónde vive el asesino? ¿No te parece que es muy fácil?

-Sí, pero parece que, en uno de sus primeros asesinatos, pasamos por alto la pista que nos llevó hasta esa dirección, al parecer también tuvo su novatada cuando comenzó, no podía ser tan perfecto, lamentablemente para él esperemos que sí sea su dirección real

-¿Y si es una trampa?

-Pienso que es más probable que sea un error que una trampa, o de lo contrario, hubiese dejado la evidencia en uno de sus últimos asesinatos y no fue así

Jungkook siguió con su camino a su oficina

-¿Cuál es la dirección? -entro a su oficina e inmediatamente Alexa se encendió

-Buenos días -Resonó por la habitación la voz electrónica, cortando la línea de lo que pretendía decir Yong Guk.

-continua Yong Guk

-Es a las afueras de Gangnam, según nuestros drones, es una pequeña casa nada llamativa, analizaron superficialmente su interior y no había rastros de algún arma que pudiera perjudicarnos, pero no estaremos realmente seguros hasta entrar, ya sabes que existen protectores para que los drones no detecten armas

-Entonces diles a todos que se preparen para entrar en esa casa, si existe alguna posibilidad de atrapar al asesino, la tomaremos

-Enseguida, señor, con su permiso -sale de la oficina

GoldenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora