El omega azabache guarda los libros necesarios para sus estudios en su mochila. Cuando va saliendo de la biblioteca, se despide de la encargada. Una de sus manos sostiene un hotteok, uno que Anton tuvo la decencia de hacerle después de dejarlo sin cenar la noche anterior. No sabe de donde el alfa saca dinero o comida, pero mientras tenga que comer, está bien.
Quita el papel en el que está envuelto el hotteok. Está a punto de darle la primera mordida cuando un olor fuerte a alfa lo rodea desconcertandolo un poco, es a tierra húmeda pero agradable para su nariz.
—¡Wonbin, espera! —Sungchan se acerca a él, por sus espaldas. Es un primo de Anton y un año menor a ellos —Tengo que darte esto.
—Hola, Sungchan. —le habla con una sonrisa correspondiendo la corta reverencia que hizo el contrario.
Por lo que él sabe y ha escuchado hablar, Sungchan era un alfa amable y bueno, como Eunseok. Así que por eso Wonbin se siente tranquilo de tenerlo cerca. Sus ojos son negros oscuros y su cabello es rubio, haciendo contraste en su piel blanca. Sus facciones varoniles están bien marcadas, pero eso no evita que el aura de 'niño pequeño’ que transmite se pierda.
—Mira, la señorita Choi te envía esto —le entrega un papel bien doblado. —Si aceptas, debes firmar ahí, en la línea de abajo.
Wonbin lo abre y es una nota, donde la maestra le pide de favor al omega darle asesorías a Sungchan en álgebra. Wonbin tuerce sus labios, mirando el rostro esperanzado del más alto.
—¿Qué tanto lo necesitas? —muerde su hotteok y habla con la boca llena.
—Bastante. Éste no ha sido mi mejor semestre, Hyung.
—¿Cuál es la calificación de tu último examen? —se apoya en una pierna, mirándole fijamente.
—Un... 25 de 100.
—Estás jodido.
—Lo sé, gracias —se ríe. —¿Entonces, Hyung?
—Está bien, lo haré. Mmh... —se mueve, buscando donde dejar su comida. —Sostenme esto un momento.
—Claro —el chico la toma, sonriendo.
—¿Tienes un lapicero?
Sungchan asiente, buscando en el bolsillo de su mochila. Saca uno de tinta negra y se lo pasa a Wonbin. Mira como el omega firma con dificultad, apoyando el papel en la palma de su otra mano.
—¿Es todo? —Toma de vuelta su comida y pone una mano en su estómago. Sólo quiere llegar a casa y dormir.
—Ajá —mueve su cabeza de arriba a abajo, luego sonríe viendo el marcado vientre de Wonbin. —¡Wow! Está creciendo, Hyung. Jamás pensé que Anton llegaría a tener cachorros. La tía Lee está furiosa.
Wonbin tuerce los labios. Lo sabía, porque el día que Anton le dijo a su madre él estuvo ahí. Y lo trató como la peor basura del mundo. Dijo que era un omega fácil y aprovechado.
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❛❛Ven aquí, y Ámame❞ WONTON
Romance❛❛A sus 19 años, Wonbin debería estar apoyando a su banda favorita, yendo a centros comerciales a mirar la ropa de temporada que ha llegado, o estar juntando dinero para su graduación de preparatoria. Pero no, a sus cortos -o largos- 19 inviernos, P...