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El lunes Wonbin estaba feliz, entra, orgulloso a la escuela, luciendo su abultado vientre de ya, 6 meses

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El lunes Wonbin estaba feliz, entra, orgulloso a la escuela, luciendo su abultado vientre de ya, 6 meses. Olfatea, buscando el olor de Anton pero parece no estar cerca. Camina por los pasillos, saludando a las personas que conoce. Llega a su casillero, lo abre y saca los libros que necesitará en el día, después los mete a su mochila.

Alguien golpea la puerta de metal a su lado, haciendo que pegue un salto.

—¿Cómo hiciste que Anton pase tu celo contigo? —es Sheon, de primer año, Wonbin la conoce porque es parte del Consejo estudiantil.

—Yo no he pasado ningún celo mío con él.

—¿Y eso? —apunta la panza de Wonbin, con una mueca.

—Oh, ese fue su celo —recalca—. Él me lo pidió.

—¡No mientas! —le grita.

—Ay, niña —Wonbin se aleja de ella—. Lávate la boca y luego hablamos. Ten —le pone un chicle en la mano—. Si te sirve de consuelo, son comprados por Anton.

Wonbin se va, riéndose cuando ve a la omega meterse la goma a la boca. Entra a su salón donde es su primera clase. En su silla usual, está Anton, esperando por él.

—Hola —el alfa habla primero, parándose para dejar que el omega se acomodara.

—Hola —sonríe, tomando asiento.

—Te traje esto —de su mochila saca una caja de chocolates con almendras.

Wonbin sonríe, la abre y su sonrisa cae. De los 10 chocolates que debían haber, sólo estaban 7.

—Fue Sohee. Él los compró y dijo que merecía un pago.

—Está bien.

El timbre suena y el castaño sale por la puerta, sin despedirse. A Wonbin ya le parece normal eso. Le alegra que Anton estuviese cambiando, se notaba que se esforzaba en hacerlo.

 Le alegra que Anton estuviese cambiando, se notaba que se esforzaba en hacerlo

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Después de 3 clases seguidas, sigue su receso. Camina para la cafetería, donde supone que todos deben estar, y no se equivoca. A lo lejos, escucha a Anton y SeungHan pelear, como de costumbre. Siempre discuten estupideces y cosas sin importancia.

—Llegué —se sienta a un lado de Anton, y éste rápidamente se pega al omega, oliéndole.

—¡Hooola, chicos! —Sungchan canturrea, parándose a un lado de la mesa.

Todos contestan a su saludo, menos Anton porque, al parecer, está muy ocupado en otra cosa.

—Les traigo esto a todos —les pasa una tarjetita, la invitación para su fiesta—. Es éste sábado, no falten —se va, para ir a otra mesa a entregar más.

—¿Cómo pretende que vaya así? —Wonbin bufa.

—¿Así cómo? —SeungHan pregunta, buscando algo malo en el omega.

—¡Todo embarazado!

—No creo que sea tan malo, Binnie. Podemos buscar un lugar fuera de peligro y pasarlo ahí.

—¿Vas a ir, Anton?, no creo que no, es tu primo —Sohee apunta.

—Tengo que ir o mi papá se enojará.

—¿Por qué haces todo por obligación? —Wonbin voltea a verlo.

—No es por obligación, sólo que la gente me ayuda a hacer las cosas bien.

—Ohh —los demás dicen en coro, entendiendo.

—Tenemos que ir al chequeo hoy —Anton recuerda.

—Lo sé —comienza a desayunar.

—Es bueno verlos otra vez, chicos —el doctor les abre la puerta—

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—Es bueno verlos otra vez, chicos —el doctor les abre la puerta—. Te ves mejor Wonbin, se nota que has estado comiendo, ¿cómo vas con las vitaminas que te receté?

—Las tomo siempre.

El hombre pesa a Wonbin y mide su estómago, él dice que todo está perfecto.

—Si tenemos suerte, veremos que es el bebé —dice, poniendo el gel sobre la piel del omega.

Anton permanece callado, escuchando las explicaciones que el señor Kyung-soo da. Le dice al omega todos los cambios que vienen éste mes y recomendaciones.

—Aquí está —oprime botones raros y sonríe—. Esa es su carita —y ninguno de los dos entiende la imagen pero aún así, sonríen—. 28 centímetros, me parece perfecto.

Sigue hablando con palabras científicas y aburridas —para Anton—. Dice que pesa 300 gramos y que eso era bueno.

—¡Es un niño! —el hombre dice con emoción—. Espero que les guste la idea.

Anton puede ver a Wonbin asentir, emocionado y con lágrimas bañando sus sonrosadas mejillas. La consulta termina, Anton paga y salen. Wonbin no ha dejado de sollozar y eso preocupa al alfa.

—¿Estás bien, Wonbin? —le toma los brazos.

Wonbin asiente, hundiendo su rostro en el pecho del más alto, mojando su camiseta.

—¿Y por qué lloras? —le habla en voz baja, rozando su nariz en su coronilla.

—Es que... estoy muy feliz —solloza y al mismo tiempo se ríe—. ¡Vamos a tener un bebé niño!

Anton asiente, alzando el rostro del omega. No lo aguanta más, lo necesita y desde que conoce a Wonbin lo está deseando. Así que sin perder más tiempo, une sus labios con los húmedos del más bajo. El azabache hace un ruido de sorpresa pero no se aleja, se mantiene pegado al alfa.

Su alfa.

UN APLAUSO PARA ESTA PAREJA QUE ESTÁ ENAMORADA

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UN APLAUSO PARA ESTA PAREJA QUE ESTÁ ENAMORADA



❛❛Ven aquí, y Ámame❞ WONTON Donde viven las historias. Descúbrelo ahora