En algún lugar muy lejano, a cientos de miles de años atrás, un hombre de extrañas apariencias hablaba ante otras criaturas de diferentes especies.
Hablaban sobre un tema qué traía bastante controversia y polémica _¡La raza humana es la mayor amenaza que puede existir!_
Mencionaba él con furia, su raza había enfrentado a los humanos y habían perdido, ahora él, siendo el único sobreviviente de su especie le exigía a las civilizaciones más poderosas del cosmos exterminar a los humanos.
_¡Aún hay tiempo! ¡La humanidad aún es débil! Si todos colaboran y unen sus fuerzas, será erradicada y el universo habrá sido salvado._
Desgraciadamente era tomado como un loco debido a que sufrió la brutalidad de una guerra que acabó con todo lo que conocía.
_Hemos estado estudiando a la humanidad desde sus inicios y sí es cierto, son violentos e inconscientes de sus actos destructivos pero también son mucha más que eso._
Mencionó Metatron líder de todos los ángeles del primer mundo central.
_Lamentamos mucho tú perdida pero la raza humana está a milenios de tener una tecnología relevante y amenazante para nosotros y cualquier otra civilización de nuestro nivel._
_¡No los subestimen! Son monstruos, asesinos, son bestias que disfrutan del matar y hacer sufrir, incluso su política es usada como arma de guerra._
_No atacaremos a los humanos, ya sufrieron un castigo cuando destruyeron marte, los obligamos a vivir confinados en la tierra sin ningún tipo de tecnología._
_¡Se arrepentirán de su decisión! Los humanos nos destruirán a todos…_
Luna abre los ojos y se sienta en su cama, desde hace años ha tenido sueños tan extraños como ese y en todos estaban involucrados los seres humanos.
_Delta debe saber algo de esto… ella vivió la guerra salvaje y la extinción de la raza humana…_
Esa misma mañana Kion despierta con un bostezo muy tranquilo y relajante, lo primero que ve es el hermoso cabello liso de Jasiri.
Dos tonos de morado qué combinaban con su brillante color de piel y sus ojos azul oscuro.
Él la tenía en sus brazos completamente desnuda, era hermosa, suave, con un aroma de perfume que aun no lograba descifrar pero lo amaba.
Él besó su cuello y oreja mientras apretaba más su abrazo sin despertarla, había estado con muchas chicas antes pero ella era diferente, se sintió muy diferente.
_Creo qué pasé demasiado tiempo entre hienas…_
Dijo dándose cuenta de su clara preferencia por las hienas claro no era la única que estaba en la cama con ellos y tampoco la única por la que él se sentía atraído.
Makini, Fuli, Rani y Anga estaban también con ellos, se veían realmente hermosas y adorables pero por alguna razón él reprimió todo sentimiento.
No podía permitirse sentir algo por ninguna de ellas, especialmente de la que estaba saliendo con Janja, su hermano.
Pero no tuvo tiempo para pensar en eso porque un pequeño rayo de sol lo deslumbro.
vio la hora en su cinta táctil y salto de la cama al descubrir que eran las diez y media de la mañana.
_Mierda ya es tarde._
Las chicas se despertaron y vieron a Kion vestirse a toda prisa.
Se veía nervioso pero a la vez tal serio y calmado que Makini, Rani y Jasiri quedaron embelesadas con solo verlo.
_¿Adónde vas?_ le preguntó Makini, ella quería que él se quedara otra noche con ellas y repetir lo de hace unas horas.
_En media hora tengo que tomar un avión y voy a llegar tarde._
Luego de haberse vestido miro a las chicas que aun estaban sentadas en la cama en su total desnudes.
Él se sonrojó un poco y sacó su celular, y se tomo un par de fotos con ellas.
_Muchas gracias por la noche de ayer, fue especial._
Su tono de voz y su postura causó mariposas en el estómago de las tres chicas que veían como él se iba.
Jasiri saliendo del shock se levanto y caminó hacia su ropa pero fue sorprendida por Kion, qué la sujetó la cargó en sus brazos y pegándola a la pared le dio un largo y apasionado beso antes de susurrarle al oído.
_Quiero qué seas mía_ le toma una fotografía individual, luego y se despidió de todas con besos en los labios antes de irse.
_Eres la debilidad de todos los leones Jasiri_ se burlo Fuli entre risas.
_Claro que no, yo amo a Janja_ "¿o a él?" Pensó ella muy confundida por lo que estaba sintiendo.
Mientras se vestían todas buscaron sus bragas por todos lados hasta que recordaron que Kion hizo un raro movimiento en el momento que se las quito.
_ ¡Ay no!_ gritó Jasiri quedándose pálida, porque traía puesto minifalda.
_Ese maldito…_ mencionó Fuli ya con toda su ropa superior puesta.
_él se llevo mis bragas..._ la peor parte fue que no traía unas de repuesto, las chicas por más que lo intentaron, no pudieron resistir las carcajadas pero Fuli estaba furiosa.
45 minutos más tarde, Kion llego al aeropuerto internacional, dos miembros de los desterrados lo esperaban vestidos de civil, uno de ellos era Karin que lo fulminaba con la mirada.
_ ¿Dónde estabas! Llevamos toda la mañana esperándote._
Dijo ella bastante molesta pero Kion suspiró fastidiado y solo quiso ignorarla.
_Lo siento, me quede dormido._ Karin y su compañero guiaron a Kion a través del aeropuerto y la puerta de aterrizaje hasta llegar a un avión militar que lo llevaría hasta el continente oscuro.
Antes era conocido como Sur américa pero después de la guerra nuclear, se hizo inevitable y las criaturas que sobrevivieron, mutaron hasta convertirse en monstruos sedientos de sangre.
_Este uniforme te protegerá de la radiación y te avisará de posibles amenazas, también de zonas radiactivas que no podrá resistir, ten mucho cuidado quieres._
Cuando subieron al avión, Luna y Delta estabas usando el mismo uniforme.
_¿Te divertiste en tú fuiste nocturna Kion?_
Dijo Luna con una sonrisa mientras él la miraba sorprendido, más no respondió y solo se concentró en Karin y Jessica.
_Estas armas de alto calibre te ayudaran a protegerte de los monstruos que habitan ahí, dispara a la cabeza y raciona bien las balas, no podemos darte tantas._
Por último les dio a cada uno siete pequeños tanques de oxigeno, eran círculos, medían diez centímetros de largo y ancho, y cuatro de altura.
Eran bastante bonitos para Luna y Delta los miró con extrañeza.
_Cada uno les dará 48 horas de oxigeno, no las pierdan ¿Ok? Sus vidas dependen de estos pequeños._
Kion y Delta asintieron, él se puso el traje y estaba listo para el viaje.
_Nos vemos en un par de semanas chicas, prometo volver de allá._
Karin lo abrazo con fuerza, sin querer soltarlo, él también la abrazó, fue un abrazo largo y necesario para ella.
Siempre tenía miedo de que Kion no pudiera regresar de sus misiones y está tal vez era la más peligrosa qué haya hecho alguna vez.
_Vuelve en una pieza... No te mueras ok._
_No te preocupes Karin, yo siempre regreso._
Cuando él avión militar despegó rumbo hacia el continente oscuro, Karin no dejó de mirar el cielo hasta que él avión se perdió de vista entre las nubes.
_Ven, regresemos al cuartel, no traemos nuestros collares y hay policías en la zona._
De vuelta a las praderas, todos volvían a sus hogares, todo estaba muy tranquilo pero Jasiri estaba muy incómoda de caminar en la calle.
Jalaba hacía abajo constantemente su falda, estaba roja y tan solo pensar que Kion estaba por ahí con sus bragas, la ponía aún más roja.
Caminar por las calles sin bragas era lo más vergonzoso que había hecho, especialmente porque en un par de ocasiones Bunga y Kopa preguntaron que era lo que le pasaba y ella no sabía cómo responder.
Fue un total alivio llegar a casa, saludo a sus hermanos y corrió a su habitación, para poder tomar un baño relajante y vestirse adecuadamente.
_Por fin… espero que nadie se haya dado cuenta de qué andaba sin ropa interior._
Ahora estaba más cómoda, se acostó en su cama y se quedó dormida.
Esa noche la dejó más exhausta de lo que pensaba, toda la noche teniendo sexo con un león tan fuerte y sexy como Kion.
_¿Se habrá sentido cansado de tenernos a todas deseándolo en algún momento…? ¡¿Pero qué estoy pensando?! No puedo pensar en estás cosas, tengo novio y… Kion no sale de mi cabeza._
Cuando se quedó dormida, soñó con aquel león que había conocido ayer y con el cual había tenido una de las mejores noches de sus vidas.
En el sueño él la tenía amarrada a su cama y con los ojos vendados mientras Kion lamía cada centímetro de su cuerpo, hasta que la tomó y la hizo suya de nuevo.
Jasiri decía su nombre entre susurros y gemía entre sueños, sin darse cuenta volvió a mojarse y la comezón se volvió tan fuerte que frunció el ceño sin poder huir de su sueño.
Lejos de ahí, había dos seres humanos caminando entre los callejones para evitar a las personas, sus miradas eran serias y bastante sombrías.
Habían escapado de industrias Star cuando Luna casi destruye todas las instalaciones y ahora vagaban por la cuidad estudiando a esta nueva civilización.
Todo les parecía muy similar a sus ciudades pero no olvidan que estas criaturas son los descendientes de aquellos que atacaron sin piedad a su gente hasta quedar menos del 0,001% de la población humana e todo el planeta.
_Tres millones cien mil años ya han pasado y sus ciudades son iguales a las nuestras._
dijo John con seriedad y falta de emociones en sus palabras, su cabello era rojo oscuro y ojos del mismo color, piel morena y cuerpo fornido como el de un luchador de peso pesado.
_Estamos muy lejos de Venezuela ¿Cómo es que llegamos acá?_
Preguntó Lily, ojos rojo, cabello del mismo color y piel morena "ex miembro de la resistencia contra los ángeles y animales”.
Lily fue una huérfana que fue parte del proyecto (Dark Angel).
Desde que tenía memoria fue parte de un proyecto militar para proteger a Venezuela y a la nueva unión soviética.
Siete años después de haber comenzado la gran guerra inter especies contra los ángeles y los animales, Lily de madre palestina, tuvo que criarse en Venezuela desde los cuatro años bajo el proyecto Dark angel.
porque Israel había traicionado a los humanos y unidos a los ángeles para poder destruir a palestina de una vez por todas.
Ella peleó en la protección de Inglaterra pero perdieron y tuvieron que retirarse de las islas británicas con él autoestima por los suelos.
(Actualmente las islas británicas son conocidas como reino de los lobos).
Fue uno de los pocos soldad que pudieron ser evacuados a tiempo.
“tenemos que ir a Iran y encontrar a los otros antes de que los Ángeles lo hagan ”.
Lily sale de sus pensamientos y en cuestión de segundos desaparecen se la vista.
Tres horas más tarde avión militar sobrevolaba la costas del caribe, todo se veía normal, no parecía un lugar cubierto de radiación pero era mejor estar precavidos.
_Son muy hermosas esas playas, siento que ya he estado aquí antes._ mencionó Luna con una sonrisa y golpeando a Delta en el hombro.
Delta gruñó molesta, sin apartar la mirada de la montaña a la qué estaban acercándose.
“Ya has estado aquí perra”. Pensó recordando tantos traumas y momentos que tanto quiere ser olvidar.
_Ya casi llegamos, los acercaré lo más que pueda a la costa, ahí atrás hay unos paracaídas._
Lo que no sabían era que una extraña criatura se acercaba a ellos a toda velocidad y para cuando el piloto lo vio ya era demasiado tarde.
_¡Cuidado!_ en lo que Kion abrió la puerta de cargamento con el paracaídas en manos, la criatura se estrelló contra uno de los propulsores.
Kion y Delta cayeron de espaldas soltando el paracaídas el cual cayo fuera del avión.
_¡Por fin esto se pone interesante!_ Luna lanza el paracaídas y ella salta del avión entre risas y gritos.
_¡Luna!_ Él avión comenzó a caer en picada, mientras Kion y Delta corrían hacía sus asientos para abrocharse el cinturón de seguridad sin antes cerrar la puerta de cargamento.
Mientras Luna caía, varias criaturas se acercaron a ella como balas dispuestos a descuartizar.
Pero la loba sonríe de forma sádica y se pone el paracaídas mientras saca dos revólver de calibre cuarenta y cinco.
_¡Es hora de jugar!_ ella disparó esquivando cada embestida, su sonrisa era aterradora y su mirada emanaba adrenalina.
Cada bala no fallaba su objetivo, sus cabezas explotan cuando la bala de plomo impactaba con sus cráneos.
Uno de ellos fue directo a Luna pero ella giró en el momento qué el pico de la criatura rosa su vientre antes de explotar del tiro.
Otros cuatro volaron con movimientos sincronizados, sus ataques lograron herir sus brazos y piernas, eran tan rápidos qué ella apenas podía verlos.
Hasta que cerró los ojos escuchando el viento y sonríe de nuevo.
_Los tengo_ el cañón de las armas brilló en rojo igual que sus ojos y las balas estaban cubiertas de fuego rojo y eran mucho más veloces que antes.
Los monstruos intentaron atacar pero fueron acribillados y derribados.
Él piloto intentó nivelar el avión para un aterrizaje forzoso. Luna se desliza por el viento hasta llegar de nuevo al avión y clavar sus garras en el metal como su fuera mantequilla y adherirse en él.
La turbulencia hacía temblar todo y Kion se sintió algo nervioso _odio cuando esto pasa_ mencionó él muy asustado.
_¿Ya haz experimentado esto antes?_ preguntó Delta igual de asustada.
Él avión logró pasar la montaña qué separaba el mar del interior del país y siguió cayendo hasta estrellarse en medio de la selva y deslizarse por el suelo.
Jasiri despierta de un salto cuando escucha que alguien toca la puerta de su habitación.
_¿Ah? ¿Quién? ¿Qué? ¡pasa!_ dijo adormilada, entonces entra su hermana Madoa.
_Hola hermana, lamento despertarte pero Janja acaba de llegar y está esperándote._
Mencionó ella señalando detrás de la puerta y un poco apenada.
Jasiri quiso decir algo pero enseguida le llegan los recuerdos de anoche y el nombre de Kion.
_¿ah? Mierda… si dile que bajo enseguida._
su hermana sale de la habitación y Jasiri comienza a arreglarse, solo pensaba en lo de ayer y cuando pensaba en él sus mejillas se sonrojaban.
Ella sentía como se humedecía su entrepierna cada vez que pensaba en el, imaginaba su cuerpo, su rostro, sus dedos, su lengua, sus ojos y su mirar.
Especialmente su manera de hacer el amor...
_Muy bien Jasiri contrólate, estas saliendo con un hombre reforzado y que te ama mucho, y le fuiste infiel anoche con el chico más sexi del mundo… Un chico capaz de hacerte sentir cosas maravillas en lugares que no sabías que podían sentir eso..._
Su respiración se hizo pesada y sus ojos se perdían en su pensamiento.
_Necesito sacarlo de mi cabeza pero ya_ Jasiri salió y encontró a Janja esperándola en la sala de estar.
_¿Nos vamos?_ le dice él en cuanto la ve, Janja la besa y la abraza muy fuerte, también le dice lo hermosa que ella se ve y que cada vez que sus ojos la miran, se enamora cada vez más.
_ ¿A dónde vamos?_ le pregunta ella luego de darle un beso corto.
_A casa de mi madre y de Shira, quieren volver a verte, supongo qué te extrañan._
Ella se emociono tanto de saber qué la madre de Janja quería volver a verla.
También quería verla y a Shira, eran una familia realmente hermosa.
_Por supuesto vamos, ya no puedo esperar más._
Jasiri se despidió de sus hermanos y salieron de ahí rumbo al hogar que vio crecer a Janja.
_ ¿Tu hermano vendrá? Me gustaría conocer a toda tu familia._
_No lo creo, no hemos podido comunicarnos con él desde hace horas, lo más seguro es que no venga, no le gustan las reuniones familiares, creo que es por el hecho de que él y su madre son los únicos leones de la familia, se siente excluido._
Jasiri camino a su lado y notó que le molestaba mucho saber que su hermano no quería pasar tiempo con ellos.
_¿Cómo se llama él?_ preguntó abrazándolo y caminando juntos
_Su nombre es Kion, te parecerá raro pero ninguno de mis amigos lo conoce, pasa mucho tiempo fuera del país, muchos incluso creen que lo inventé._
Jasiri estaba en shock, no podía creerlo, quiso creer que solo fue pura coincidencia que se haya acostado con un león llamado Kion.
El hermano de Janja no puede ser el único león llamado así ¿verdad?
Su corazón latía tan rápido qué incluso comenzó a respirar muy rápido.
_Te mostrare una foto de él_ la imagen que vio la hizo palidecer, era el mismo "me acosté con el hermano de mi novio…”
Ya era casi de noche cuando Kion despertó, lo primero que vio fueron los ojos de Luna y Delta.
_hmgh mierda…_ dijo desabrochando el cinturón, luego recordó donde estaba y reviso su traje sin encontrar ninguna fisura.
_Vaya despertaste jejeje, por un momento pensé qué serías la cena._
Dijo Luna entre risas pero Delta la golpea _deja tus bromas por un momento._
Delta lo ayudó a levantarse y él se sentó, le dolía el cuerpo y había una posibilidad de que tuviera algunas fracturas.
Estaban atrapados en un lugar muy peligroso con zonas radiactivas, sus suministros de oxigeno y comida solo alcanzan para dos semanas y aún no sabían en dónde estaban.
Él fue a la cabina del piloto y lo que encontró pero la situación no fue muy alentador.
La cabina estaba destruida, restos de sangre cubrían el suelo y las paredes, algo muy grande destruyó la cabina y se llevó al piloto.
Los tres prepararon sus rifles y salieron del avión, necesitan encontrar un lugar alto para poder orientarse.
Luna se quitó el artefacto de oxígeno pero no se quitó el casco, ella tenía una corazonada y necesitaba seguirla pero primero tenía que convencer a esos dos.
Ya no podían quedarse aquí, lo que atacó al piloto podría volver, por eso caminaron encarando sus arma, los árboles eran grandes,
La selva era muy espesa y había todo tipo de animales acechando en la oscuridad de la vegetación.
_Hace mucho que no veía árboles tantos árboles…_
El ambiente era frío, demasiado, siguió caminando por un kilometro sin encontrar rastros de vida animal, lo cual era raro en un ecosistema como este, él sabía que estaban ahí, podía sentirlos, escucharlos pero no podía verlos.
Él no sabía que la presencia de Luna los intimidaba y se mantenían escondidos pero creía que era mejor así.
Todos tenían miedo de este depredador extinto qué causó el terror absoluto por dónde sea que dejó su huella.
Después de todo, no siquiera ella sabía que era mitad humana.
una de la mañana, necesitaban descansar, al menos Delta y Kion por Luna se compraba como un lobo salvaje, jugando entre la maleza y casando presad que se ocultaban de ella.
_Parece una niña, no puedo creer que la hayas dejado venir._
Dijo Delta caminando, en verdad le desagradaba la presencia de Luna.
_Ella pasó mucho tiempo confinada a una celda y lastimada de formas que no podemos imaginar._
Dijo Kion intentando defenderla _debieron matarla, es un monstruo Kion, no debiste sacarla del lugar en dónde la tenían encarcelada._
Kion gruñó, se sentía culpable por todo lo que le pasó y quería protegerla de volver a sufrir daño.
Sin embargo Luna los estaba observando desde la oscuridad y sonría con sus ojos rojos brillando en la oscuridad.
_Ella se parece tanto a él que mirarla es realmente difícil…_
Dijo temblando de miedo e impotencia, esa mirada, esa sonrisa, esos ojos y su forma de actuar son idénticas al hombre que ella tanto teme.
Los dos subieron a la sima de un árbol por protección aunque no podían dormir.
Todo estaba demasiado silencioso, incluso Luna estaba muy callada.
_Ella da miedo, nunca había visto a alguien tan desquiciado como ella._
Delta se ríe y mira las estrellas _yo sí… y lo peor es que me enamoré de él pero solo fui un experimento más para él._
Ella se acostó dándole la espalda y Kion la miró por un momento _yo también me enamoré de alguien que solo me veía como una experiencia sin importancia, como una mascota._
Dijo él muy molesto pero ella lo miró de pronto sintiéndose reflejada en él.
En el ambiente ni siquiera escuchaba insectos, solo cerró los ojos para descansar pero prácticamente no durmió, a pesar de estar todo tan callado no se quitaba de la cabeza la cabina del piloto.
Luna estaba mirando la luna y luego miró sus manos, de sus manos salía una especie de humo rojo y aquel humo tomó la forma de un hombre.
_Tenía tantas ganas de conocerte…_ ella sonreía mientras él tomaba sus hombros.
_Gracias a ti puedo regresar a este mundo y ejecutar mi venganza._
Ella se ríe y se aleja de él con arrogancia _este mundo es mío, si alguien va a vengarse y cubrirlo de sangre, soy yo…_
_Necesitas un ejército niña y estás sola pero ¿Qué te parece si nos convertimos en uno solo._
_Pensé que ya lo éramos._ él sonríe y le quita el casco de protección.
Él queda embelesado por su belleza _eres mi creación más perfecta, hazlos sufrir, destruye los y diviértete con su sufrimiento._
Él tomó su rostro con ambas manos y volvió a convertirse en humo antes de entrar a su cuerpo de nuevo.
Los primeros rayos de sol golpearon los ojos de Luna y despertó bajo el árbol.
Ella estaba muy relajada y también muy feliz, este era el lugar perfecto para experimentar su poder, pero no podía separarse de esos dos.
Kion y Delta despertaron también y aunque estaban algo cansados por la falta de sueño pero más relajados.
Kion revisó en su cinta un mapa de la zona, estaba lejos del lugar de donde sacaron a los humanos, tenían mucho camino por recorrer y debían empezar ahora.
_¡Buenos días! Vamos a disfrutar las horas de tranquilidad en el ambiente antes de que comience lo bueno._
Dijo Luna abrazando a ambos _No puedo esperar a matar todo lo que haya en este lugar._
Comenzaron su camino a través de este hermoso paisaje, mientras caminaba su traje absorbía la luz solar para recargar las baterías de respaldo.
necesitaría su traje al cien por ciento durante las noches, por si acaso las cosas no son como ayer.
En unas pocas horas ellos llegan a un río lleno de extraños peces de colores, se veía profundo y el agua era turbia pero los peces sobresalían del color del agua.
Estos pequeños eran primera señal de vida en este lugar tan sombrío.
_Son muy hermosos, no pensé volver a ver peces arcoíris de nuevo._
Mencionó Delta antes de escuchar un raro gruñido los paralizó.
Algo le algo bastante grande le respiraba en el cuello a Kion y él saltó hacia un lado y le apunto con el arma a la criatura, era como un tigre primitivo.
Pero este era tan grande que no tenía que levantar la mirada para ver a Kion a los ojos, su piel era roja, un poco más oscura que la melena de Kion.
Sus dientes eran tan grandes como un cuchillo de caza y esas garras rebanarían su carne como mantequilla, la criatura aun le gruñía y Kion aun le apuntaba con el arma pero Delta le dijo que bajara el arma.
_Si puedes entenderme será mejor que no pienses en atacar o te dejare peor que un colador jejeje._
Decía Luna captando la atención del tigre, la criatura ya estaba lista para atacar.
Kion decidió dejarlo a la suerte, el muy tenso bajó el rifle y retrocede unos pasos, el tigre suaviza su expresión y se centra en los peces del río.
Kion suspiró y se sentó en la grama mirando al gran tigre rojo.
_¿Enserio? Yo quería matarlo_
Él tigre desapareció antes de que Kion le dijera algo, la joven humana se sentó en el césped para tranquilizarse.
Cerró los ojos y escucho algo caer a su lado, vio un gran pez de color azul metalizado a al lado de su pierna.
Se quitó el casco y miro al tigre que la observaba con curiosidad, tenía una pila de peses a su lado
Tomo el pez el cual era muy pesado, y era tan grande como su antebrazo.
_Gracias, supongo_ Kion se ríe un poco mientras iba por leña para preparar el pescado.
Todos comieron tranquilamente y el tigre los observó todo el tiempo.
Kion cuando terminó de comer se preparo para irse, su cinta le indicaba que tenía que atravesar el río.
_Tenemos que atravesar el río pero la orilla está un poco lejos y se ve que es muy profundo._
Delta buscó una manera de cruzar y pero prefirió nadar, se acerco al agua y el tigre se atravesó y comenzó a gruñirle al río.
Delta notó una gran estela en la profundidad del agua y los peces desaparecieron.
Todos retrocedieron antes de que una enorme serpiente saliera del agua, los árboles se quedaban pequeños con esa cosa.
Tenía la forma de una cobra solo que mil veces más grande, solo tuvieron segundos para esquivar su ataque que levantó la tierra del suelo.
Se movía tan rápido como un rayo y era difícil seguirle el paso, varios árboles fueron derribados por sus movimientos.
Debían enfrentarla pero ni el arma más potente podría causar un gran daño.
_Solo tengo diez granadas... tienen que distraerla mientras yo intento trepar a su cabeza._
Delta asiente y corrió junto con el tigre hacia la serpiente, él pareció entenderle porque dejó que Delta se montará sobre él.
Kion corrió en dirección contraria para trepar por el cuerpo de la serpiente mientras que esta derribó muchos árboles al intentar atrapar al tigre y a Delta.
Luna solo se sentó a mirar con tanta emoción, como si fuera una película de acción.
Kion casi es golpeado por el tronco de un árbol varias veces pero logró engancharse a las escamas.
Escaló como pudo temiendo caerse por las fuertes y muy constantes sacudidas, pero también se aferró con fuerza.
La serpiente se detuvo un momento, él ya casi llegaba y vio como el tigre y Delta eran acorralados.
_Tengo que darme prisa_ siguió escalando, el tigre siguió rugiendo y huyendo de la serpiente.
Delta disparaba su rifle y saca sus colas para tener mayor defensa sobre la serpiente.
Kion se estaba cansando, se movía cada vez más lento y pesado, él por fin llega a la cabeza de la serpiente.
Él saca una granada, tenía planeado usar dos, una en el ojo y la otra en las fosas nasales pero la serpiente logra verlo.
Su enorme ojo se fija en él con furia, Kion se paraliza al ver la enorme pupila de la bestia centrarse en él.
Él reaccionó quitándole el aniño a la granada pero ya era muy tarde, la serpiente sacudió su cabeza tan fuerte que Kion, soltó la granada y la escama de la cual se sostenía se desprendió un poco causando que Kion se soltara y cayera desde una gran altura.
Kion se estrelló en el suelo con tanta fuerza que él gritó del dolor cuando aterrizó sobre su brazo izquierdo.
La granada cayó en la abertura de la escama, y siguió cuesta abajo, antes de chocar con el agua, una gran explosión cubrió el rostro de la serpiente.
Él gigante monstruo se lanzó sobre Kion con un poderoso rugido que hizo temblar la tierra.
el tigre no perdió tiempo y se lanzo a correr para sacar a Kion del alcance de la serpiente.
Él y Delta lo cubrieron con su cuerpo pero antes de que la serpiente los aplastará, Luna hace explotar la cabeza de la serpiente.
La explosión fue tan poderosa que todos fueron lanzados en diferentes direcciones, siendo Kion arrojado al agua casi inconsciente.
Él l estaba casi desmayado pero pudo ver a la serpiente gigante hundirse dejando un rastro de sangre.
También sintió como algo lo saco del agua, tosió una y otra vez sacando el agua de sus pulmones y respiro pesadamente.
_Gracias Luna me salvaste_ se levanto y vio su entorno, muchos árboles caídos, tierra y rocas desprendidos del suelo, incluso un intenso olor a humo y pólvora.
_No té preocupes, todo fue trabajo en equipo._ dice ella con una sonrisa.
_¿Cuál trabajo en equipo? Si estuviste todo este tiempo viendo como casi nos mata esa cosa._
Delta estaba molesta por la falta de empatía de Luna, por suerte un par de árboles cayeron al otro lado del río formando un puente.
_Creo que es hora de irnos adiós amigo, gracias por tú ayuda._
Kion se despide del tigre y se sube al árbol, los tres comienzan a atravesar el río, pero se detienen al escuchar unos pasos detrás de ellos.
El tigre los estaba siguiendo y con una sonrisa llegaron al otro lado.
_Bueno, supongo que ahora somos compañeros de viaje._
Siguieron caminando unas horas más y se detuvieron al llegar a los escombros de una ciudad la cual en sus tiempos hubiera sido tan avanzada como lo es ahora el reino de los lobos.
Los edificios eran enormes y era sorprendente ver que después de tantos años aún estaban en pie.
Kion se sentía como en una película post apocalíptica, la naturaleza había reclamado toda la ciudad, la mayoría de los edificios estaban derrumbados, las calles cubiertas de tierra y césped.
Habían autos en muy mal estado, pequeños animales corriendo de aquí para allá, todo era muy extraño.
Delta recordaba está ciudad como si hubiera estado en ella apenas ayer.
Luna por otro lado pudo recordar uno de sus sueños, está ciudad se convirtió en zona de guerra tiempo atrás.
_ ¿Exactamente que paso aquí?_ preguntó Kion mirando todo a su alrededor.
_La guerra salvaje… perdí a alguien muy importante ese día_
Delta se puso muy triste y melancólica pero Luna cubre su hombro con un brazo _sé como te sientes._
Ya atardecía y debían buscar refugio _tal vez haya algún lugar donde pasar la noche._
Pronto encontraron un edificio que no estaba tan destruido y caminaron hacía allá.
_Esto me recuerda a esas películas de zombies donde los personajes tenían que dormir en edificios destruidos._
_Le buscas el lado positivo a todo verdad Luna_ Delta le dijo con irritación y sarcasmo pero Luna solo se rió.
Kion por otro lado podía imaginarse este lugar en sus épocas de gloria, hermosas calles, niños caminando junto a sus padres, al igual que millones de personas.
Todo eso se ve como un vago recuerdo, fantasmas en las paredes, luego recordó que todo el continente estaba lleno de zonas radiactivas, justo ahora podrían estar acercándose a una, así que reviso su cinta táctil y nada...
la cinta no mostraba ninguna actividad radiactiva cerca de ahí, le había parecido muy raro se supone que las ciudades eran los lugares con más radiación de todo el continente y su cinta no mostro nada _esto es muy extraño…_
Ellos fueron muy alto, casi hasta el último piso para ver el atardecer, se veía realmente hermoso, la ciudad estaba desolada y muerta.
Pero aún así se veía hermosa _¿Qué causó esta guerra entre humanos, animales y ángeles?_
Delta suspiró, eran tantos recuerdos que ella quería olvidar _Los ángeles nos tenían miedo, y los animales querían salvar al planeta pero para eso debían destruir a los seres humanos._
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La guardia del león: Soy Un Desterrado
FanfictionEn esta historia Kion no es líder de la guardia del león y tampoco es miembro de la familia real aunque es el hijo bastardo de Simba, lo que significa que su madre no es Nala y fue concebido fuera del matrimonio. Su madre una joven que tuvo que cria...