Kim Taehyung, un hombre conocido por no tener compromiso alguno, destinado a solo pasar una noche con diferentes chicas, su parte animal, ese alfa dentro de él jamás será dominado, o eso era lo que creía hasta que una bonita chica de melena roja le...
El regreso a su hogar fue silencioso y asfixiante ya que el Alfa se encontraba completamente molesto luego de aquel encuentro con Jackson que terminó en golpes y discusiones poco agradables, su lobo se encontraba tan inconforme y actuando sobreprotector sobre esa Omega por la cual había decidido arriesgarse, lo único que deseaba era poder llegar a su comoda cama y caer dormido, o al menos poder conversar y tener un abrazo de Yeontan. Yoongi había sido amable al llevarlo hasta su apartamento y luego de un intercambio de palabras ambos se despidieron, el sonido de los botones cuando ingresaba la contraseña en la puerta le generaban aún más conflicto, o realmente solo buscaba una razón más para sentirse frustrado.
Sus zapatos cayeron a un lado junto con su abrigo cuando finalmente logro ingresar y camino pesadamente arrastrando sus pies por toda la sala, llamando a su pequeña mascota que después de unos minutos apareció moviendo su cola y latiendo suavemente, dándole la bienvenida a su amo.
[Taehyung]- Mi Tannie, te extrañe demasiado, papá necesita cariño y un abrazo
El alfa hablaba con un tono meloso mientras cargaba al pequeño perro, dándole besos sobre su cabeza y cerca de sus mejillas, hartando al pobre animal que finalmente le gruño fastidiado de su actitud, tratando de morderle para que le dejara en paz, Kim lo vió entre sorprendido y ofendido, aunque sabía el carácter de su mascota, siempre sobrepasaba los límites e invadía su espacio personal.
Con sollozos fingidos, dejo al pequeño perrito sobre su cama, dispuesto a lanzarse sobre ella cuando la notificación de su telefono móvil le hizo interrumpirse de su acción, iba a ignorarlo ya que no estaba interesado, no era como si estuviera esperando algún mensaje y no estaba de humor para responder a alguna mujer molesta que le estuviera rogando por una segunda noche de sexo, no cuando su mente y algo más estaba siendo entregado a una linda pelirroja. Pero hubo algo en su interior, como una sensación que le impulsaba a ver, tal vez la curiosidad, tal vez el destino.
Y como si hubiese invocado a su sol con su mente, pudo ver esa notificación de mensaje, algo tan simple como un "hola" pero que por alguna razón aceleró a su corazón y aunque confundido le dió una respuesta, lo que venía después era algo que no esperaría ni siquiera en sus sueños, ¿Cómo había sido que su manzanita obtuvo su número personal? Y que por voluntad propia le había escrito, parecía imposible, una broma, tal vez de Yoongi vengandose de todas las veces que le había hecho molestar, es que para si mismo eso era un sueño, uno que estaba siendo real.
Los mensajes fueron fluyendo hasta que su corazón se detuvo casi por completo cuando una sola frase le robó el aliento, "te extraño" un aullido sonoro de su lobo fue suficiente para ser impulsivo, necesitaba escucharla decirle eso, que sin pensarlo, sus dedos se movieron y lo que habían sido escritos lo decidió cambiar por una llamada, una la cual pensó que tampoco sería respondida, pero, ¿Estaba ya en el cielo? Porque estaba seguro que estaba escuchando la voz de un ángel, de su Ángel pelirroja.
Sus respiraciones chocaban y se mezclaban aún estando separados, al igual que sus sonrisas cuando la conversación fluyó entre ambos, como si hubiesen sido amantes que se conocían de años o adolecentes que morían por saber el uno del otro en una sola noche, no había minuto en el que permanecían en silencio pues era el Alfa o el Omega quien encontraba un nuevo tema de conversación el cuál les hacía darse cuenta que eran más similares de lo que podrían pensar. Kim había olvidado la última vez que había hablado con naturalidad con alguien, rompiendo aquella apariencia que él mismo había creado, era algo que solo la fémina había logrado y por ello la consideraba aún más mágica, más pura, más suya.
Y no quería perder la oportunidad, y sus labios se movieron mientras los rayos del sol que daban la bienvenida a la mañana atravezaban la ventana y chocaban contra su cabello castaño.
[Taehyung]- Permíteme tener una cita contigo Yuki, una cita digna de ti.
Trago saliva esperando una respuesta, tal vez una negativa, si era así no sé rendiría, había tenido suficiente con su número y con ello podría hacer lo que fuese para conquistarla, aún así sus latidos se aceleraron y estuvo a punto de gritar de emoción cuando el "si" había sido dado luego de una sonrisa y por primera vez en todos sus encuentros su nombre siendo pronunciado por esa hermosa voz que parecía una hermosa melodía.
Si, el destino estaba siendo tan considerado con él.
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La emoción era tan notoria en el Alfa que incluso su padre se encontraba asombrado ese domingo por la mañana, ambos habían quedado en desayunar juntos en la casa del más grande, pero no esperaba que su hijo fuera puntual y que llegara con una sonrisa radiante, una que no había visto durante años, incluso sus feromonas eran dispersadas sin siquiera notarlo, siendo más dulces que podía decir que lo empalagaban, si no fuese su hijo posiblemente lo hubiese corrido de su casa, pero para Namjoon era una razón de felicidad, verlo tan vivo le causaba nostalgia.
[Namjoon]- ¿Me dirás por qué estás tan emocionado?
[Taehyung]- No sé de qué hablas, estoy igual que siempre.
[Namjoon]- Si claro, y yo nací ayer, Taehyung, yo te cambie los pañales y te crié, te conozco mejor de lo que tú mismo te conoces, así que ahora mismo cuéntale a tu viejo padre qué es lo que te trae tan emocionado.
Taehyung trato de ignorarlo comiendo parte de lo que estaba en su plato, tratando de disimular la sonrisa tonta que se formaba en sus labios, haciendo que Namjoon aclarara su garganta y arqueara sus cejas, sabía que su hijo era aún como un niño, o al menos ante sus ojos era así.
[Namjoon]- Si no me cuentas entonces le diré al cheff que no les prepare su postre favorito a Yeontan, Yoongi y a ti.
[Yoongi]- Oye, ¿Yo por qué debo ser castigado por culpa de tu hijo?
Resoplo Yoongi cuando entraba al comedor y se sentaba al lado de su amigo, esperando su taza de café matutino y la rebanada de pastel de mandarina que tanto adoraba, siendo la única razón por la cual visitaba a aquella particular familia.
[Namjoon]- Porque sé que eres cómplice de mi hijo.
[Yoongi]- Pues tu hijo actúa como un idiota porque tendrá una cita está noche.
[Taehyung]- ¡Oye! Traidor.
Y la carcajada del alfa mayor se hizo presente mientras que Min únicamente disfrutaba de aquel postre y Taehyung, él solo podía atinar a cubrir su rostro ruborizado con ambas manos, porque si, ese era el día en que podría salir con su manzanita.
Y así finaliza el capítulo 12, en dónde nos muestra como las actitudes de Taehyung poco a poco van cambiando, haciendole mostrar la verdadera ternura de su corazón.
También un poco más de interacción de esta bonita y particular familia y bueno, Yoongi que solo está ahí por la comida jaja
¿Qué les ha parecido el capítulo? Cómo siempre, estaré leyendo sus comentarios.
