Capítulo 6.

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Monte Olimpo.

Zeus, Hades y Poseidón estaban frente a los Ciclopes, con Hestia, Deméter y Rhea detrás de los varones.

Los únicos que no estaban presentes eran Naruto y Hera.

Brontes se acercó, con una mirada tranquila.

“Hemos forjado sus armas. Naruto fue de mucha ayuda, aunque el esté ocupado ahora, él pensó en lo más apto para cada uno de ustedes”.

Arges se acercó a Zeus, y sacó una caja de plata que mantuvo en el aíre para Zeus. El menor de los hermanos abrió la caja, y miró con los ojos brillando su arma.

“El poder del Rayo. Con esta arma, podrás controlar todos los rayos, truenos y relámpagos”.

Zeus lo tomó, sintiendo como si se conectara con su propia esencia. El arma desapareció en chispas doradas, y luego convocó un rayo en sus manos.

Estéropes se acercó a Poseidón, y en un brillo azulado, apareció en sus manos un tridente dorado, con detalles de piedras azules en la separación de las tres puntas.

Se lo entregó a Poseidón. El tridente se rodeó de un aura azulada cuando tocó sus manos, y Poseidón sintió su misma esencia mezclarse con el poder del tridente.

Líneas azules aparecieron en el cuerpo de Poseidón, que miró eso en silencio.

“Este tridente tiene el poder de crear tormentas eléctricas, fuertes mareas, terremotos… Tempestades en general”.

Brontes se acercó a Hades, que se veía frío y tranquilo como siempre. Sacó una caja cuadrada, algo grande si lo pensaba.

“Para usted, principalmente teníamos pensado esto”.

Brontes abrió la caja y le mostró a Hades un casco, cosa que lo hizo alzar una ceja levemente. Esperó una explicación, que no tardó en llegar.

“Este Yelmo le puede hacer invisible a los ojos de los demás. Como dije…”

Hades tomó el Yelmo y se lo puso, y cuando el mismo se juntó con su esencia, se volvió invisible.

Casi todos abrieron sus ojos con sorpresa, hasta que Hades se sacó el Yelmo y volvió a verse.

“Pero Naruto no creía que esto fuese suficiente, así que hicimos un trabajo extra”.

Una caja con varias almas alrededor apareció en las manos de Brontes, y le dio la caja a Hades, que sintió la emoción crecer en el.

Abrió la caja, y lo vio.

Dos armas en forma de gancho, que no tenían brillo.

Las tomó, y metió su esencia en las mismas.

Un brillo violeta se formó en los ganchos, y eso hizo sonreír casi maniáticamente a Hades.

Un juego de cadenas se formó en los brazos de Hades, que enganchó a las Garras con su magia.

“¡Prueba conmigo!”

Poseidón sonrió emocionado al ver las armas de su hermano, que lo miró con una ceja alzada, pero se encogió de hombros.

Rhea miró preocupada a sus hijos por la idiotez que estaban por hacer.

Zeus miró con curiosidad las armas de Hades, que tenían un poder… Escalofriante, debía decir.

Hades lanzó las garras y las clavó en Poseidón.

Algo dentro de el le hizo tirar hacía su cuerpo.

Naruto: El Verdadero Dios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora