Destino archivado

Capítulo 3: El nuevo en la empresa

Narra Fox

No puedo creerlo, hoy será mi primer día de trabajo. Estoy emocionado, podré poner a prueba todas mis capacidades y conocimientos del área y, con suerte, puedo hacer que él me note y se enorgullezca de mí.

Lo admito, siento algo por el jefe de la empresa Premium Page, es tan... guapo, fuerte, esa barba de candado, esos ojos como rubíes y esa voz. Perdón, perdón, suelo ser algo fantasioso, pero supongo que es una forma de aceptar que alguien como él nunca se fijaría en alguien como yo. Se vale soñar de vez en cuando.

Justo ahora estoy desayunando con Bill en nuestra cafetería favorita antes de irme a trabajar, aunque no podía esperar a mi hora de entrada.

- Fox: Será un buen día - Dije alegre.

- Bill: Solo relájate, se tú mismo y haz bien tu trabajo - Me sugería Bill mientras le daba una mordida a su panini.

- Fox: Lo haré.

- Bill: Calma Fox. Estás por trabajar para una de las mejores revistas como técnico. Tómalo como una oportunidad de agarrar experiencia y luego podrás irte a una empresa más grande. Ya lo verás.

- Fox: ...Si me quisiera ir... - Murmuré involuntariamente.

- Bill: ¿Cómo dices? - Preguntó para tratar de sacarme la sopa.

- Fox: Bueno... - Ya me cachó. Mejor le digo - Hay alguien...

- Bill: ¿Un macho alfa?

Cabe aclarar que Bill sabe de mi orientación y me acepta tal cual soy. Quizás sea porque él aún no tiene claro la suya, pero igual, lo acepto tal cual.

- Fox: Sí. Es un lobo plateado. Y es algo guapo - Dije para evitar sonar raro.

- Bill: ¿Algo? - Aunque Bill me conoce tanto que sabe cuándo me contengo.

- Fox: Bueno, es muy... guapo - Dije con algo de pena.

- Bill: Ve y díselo. Le dices: "Tú, pene. Yo, culo. Nosotros, coger" - Me dijo en broma.

Yo me sentí muy avergonzado por lo que dijo, mi rostro se puso muy rojo por ese chiste y Bill se reía.

- Fox: ¡¿Cómo crees que yo le diría algo así a mi jefe?! - Expresé muy avergonzado.

- Bill: Uy, mejor aún. Pide un aumento, un ascenso, una oficina y solo le tendrás que dar tu trasero - Seguía con su broma.

- Fox: Jajaja - Reía con sarcasmo - Muy ingenioso, eres único amigo. Bueno, mejor me voy si no quiero llegar tarde.

- Bill: Ok, me pasé. Pero antes... ¿Qué tal una selfie? - Me preguntó animado.

No tenía una respuesta pronta y ya me quería ir, pero sin darme cuenta, Bill me rodeó el cuello con un brazo y nos tomó una foto a los dos, con todo el fondo que había atrás.

- Fox: Oye, no estaba listo - Dije algo temeroso.

- Bill: Tranquilo. Saliste bien. Mira, te la mando más tarde y lo verás por ti mismo.

- Fox: Bueno, está bien. Nos vemos - Dije para tratar de salir deprisa de la cafetería.

Pero, en el momento que quise abrir la puerta, por estar corriendo, choqué con alguien y ambos caímos al suelo. Al levantar mi vista, vi que era una zorra naranja a quien le estaba ofreciendo ayuda un hombre dinosaurio.