Capítulo 8: Un tiempo dedicado

50 7 12
                                    

Narra Wolf

Había despertado porque oía cómo algo se estaba ahumando y mi nariz había captado un aroma muy delicioso en el ambiente. Poco a poco iba abriendo mis ojos y sentía que los rayos del sol pegaban en mi rostro.

Me levanté y, con el aroma como guía, me dirigí a la cocina donde, para mi sorpresa, vi a Fox sirviendo comida en un plato y acomodando la mesa para dejar dicho plato.

- Wolf: ¿Qué estás haciendo? - Pregunté intrigado, captando su atención.

- Fox: Oh, buenos días... ¿Ehm? - Quería dirigirse a mí, pero aún se le veía con algo de duda.

- Wolf: Wolf. Recuerda, no estamos en el trabajo - Le decía para que me llamara por mi nombre, aunque espero no tenga que hacerlo muchas veces.

- Fox: Wolf. Claro que sí jeje - Reía un poco apenado - Estaba por llamarte para el desayuno.

- Wolf: ¿Desayuno?

- Fox: Sí. Es que pensé, como me diste asilo en tu casa cuando lo necesité, pensé que hacerte el desayuno sería una manera, por así decirlo, de compensarte tu hospitalidad - Me decía tímidamente.

- Wolf: ¿Tú lo hiciste? ¿Eso? - Pregunté apuntando a la comida.

- Fox: Sí. Y disculpa el desorden que causé - Decía temerosamente.

Dicho esto, inspeccioné toda la cocina para ver el disqué desorden que dejó, pero no había ninguno. Es más, estaba más limpia que ayer.

- Wolf: ¿Qué desorden? - Pregunté, viéndolo a los ojos.

- Fox: Es que limpié antes de servir.

- Wolf: Entonces, ¿Por qué te disculpas si ya limpiaste? - De verdad, no entiendo a este zorro

- Fox: Bueno... - Él iba a tratar de explicarme su tan peculiar acción, pero se quedó un momento pensando en algo. Algo que parecía que no le traía buenos recuerdos - Supongo que es la costumbre.

Este zorro me causa mucha intriga, algo en él no era normal, bueno, tal vez muchas cosas no lo son, pero creo que hacen a este zorro un poco más interesante, de cierta manera.

- Wolf: ... Okey... Gracias - Le agradecí con una sonrisa.

- Fox: No hay problema. Bueno, espero que te guste. Yo me voy a mi vivienda a descansar - Luego, él se dirigía a la salida de la cocina - Nos veremos luego... Wolf.

- Wolf: ¡Espera! - Lo detuve antes de que se fuera - ¿Que no piensas desayunar conmigo? - Le pregunté intrigado.

- Fox: No quisiera ser una molestia. Además, ya hiciste mucho por mí y no quisiera fastidiarte con mi presencia - Decía con timidez.

La verdad, me sorprendió que atinara a eso último, pero admito que sentí algo de pena por él. Si lo hace para llamar la atención, para ser honestos, creo que le funciona. Si quería que esto funcionara, debía demostrar mi mejor lado; el romántico, aunque sea a un... hombre.

- Wolf: Pues te salió mal porque me molestaría que me dejaras desayunando solo - Le decía con una risa humorística.

- Fox: ¿En verdad? - Preguntó asombrado.

- Wolf: Ven... - Dije mientras me ponía a buscar otro palto, servirle algo de comida y colocarla en la mesa - Desayunemos juntos - Le sonreí mientras me sentaba.

Destino archivadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora