Clyde se había dormido. Los dolores de cabeza habían vuelto otra vez, y aunque solo era mediodía estaba realmente oscuro por las nubes.
Hasta que alguien tocó a la puerta. El joven se despertó sobresaltado, cubierto en sudores fríos, como si hubiera tenido una pesadilla.
Se levantó y caminó torpemente hasta la entrada, al abrir la puerta se encontró justo lo que esperaba.
-Clyde, siento lo de antes, ¿Crees que podría quedarme aquí hasta que cese la tormenta?- Preguntó Caspian, rascándose el cuello y mirando en otra dirección, claramente avergonzado.
Clyde lo vio todo empapado de agua, temblando. Fue algo extraño pues el demonio era un tipo fuerte a sus ojos, pero en esos momentos lo vio muy vulnerable. Sintió la necesidad de hacer algo, así que lo dejó pasar.
-Está bien, pero ve a ducharte, estás cubierto de barro.
-Cierto, resbalé mientras venía de camino, jeje.- Dijo Caspian con un leve tono rojizo en sus mejillas.
Después de una buena ducha, se dio cuenta de que su ropa estaba empapada y no tenía otra cosa para poder ponerse. Salió del baño con una toalla alrededor de su cintura y fue a preguntarle a Clyde si no tenía algo de ropa que pudiera servirle.
-Oye, Clyde... ¿No tendrás por casualidad algo de ropa que puedas prestarme?
Los ojos del joven se abrieron como platos, y su cara rápidamente se puso colorada.
-D- déjame ver s- si tengo a- algo...- Tartamudeó aún con la cara roja y fue a mirar en su armario. Tras unos minutos sacó unos pantalones y una camiseta.
-Esto es lo más grande que tengo, pruébatelo...- Habló con un tono suave desviando la mirada hacia su derecha.
-Gracias, y no pasa nada por que me mires, no me voy a molestar por eso.- Dijo con un pequeño tono entre gracioso y seductor.
Por suerte la ropa era lo suficientemente grande para su cuerpo. Una vez se cambió, se reunió de nuevo con Clyde. Ambos se sentaron en el sillón.
-Clyde... Quiero hablar contigo de algo... Necesito que me ayudes.
-¿Hm? ¿Con qué necesitas mi ayuda?- Con notable confusión.
-Verás... Quiero saber qué son los sentimientos y como funcionan. Creo que tú sabes acerca de eso mejor que nadie más a quien pueda preguntar.
A pesar de la confusión y sorpresa que mostró el joven, comenzó a explicarle tranquilamente como funcionaban las emociones, hasta que llegó a una última.
-Para terminar te voy a explicar este último sentimiento... El amor... Es algo que todos sentimos alguna vez, pero nunca lo sabemos hasta que ocurre. Muchas veces intentamos negarlo o silenciarlo pero lamentablemente es muy difícil de ignorar. - Tragó saliva, conteniendo algunas lágrimas. -Es una emoción compleja, difícil de identificar, pero usualmente cuando estás con la persona que amas, lo sabes, sabes que independientemente de cualquier cosa amas a esa persona...
Caspian observó atentamente el comportamiento de Clyde con una mueca de preocupación.
-Tú... ¿Has encontrado el amor?
-No estoy seguro, tal vez sí o tal vez no. Tal vez lo que siento es de verdad o solo una farsa. Quiero creer que es simplemente una tontería pero cada día que pasa siento que es más real... No quiero aceptarlo, es un amor imposible...
-A veces las cosas imposibles son más reales de lo que pensamos... Yo aún no entiendo nada de esto muy bien... Pero... Creo que comprendo como te sientes.
▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄
563 palabras en menos de 1 hora gente
Ok sé que dije que este capítulo iba a ser mejor pero no sabía que tan poco me iba a ocupar tanto así que tendrá que ser para el siguiente ¯\_(ツ)_/¯
Bueno, se despide un servidor
-Kay.
ESTÁS LEYENDO
Hasta Que El Infierno Nos Separe.
Teen Fiction(Portada por: @Luky22058) Clyde Asher Westwood, más conocido como "El cazador Sombrío", era el mejor cazador de demonios en los alrededores, con apenas 19 años. Tenía grandes competencias pero aún así no rompía su título. Repentinamente, cuando se e...
