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Capítulo 17

Lisa's pov

— ¡Lisa! ¡Despierta, Lisa! — Oí una voz que parecía lejana llamándome. — ¡Joder Lisa, despierta! — Sentí una bofetada en la cara, justo al lado de la oreja.

Maldije y abrí los ojos aturdida, recordando la terrible pesadilla que había tenido y desesperándome al instante.

— ¡Jennie! ¿Dónde está, está bien? — Me levanté y Miyeon me agarró del brazo, impidiéndome entrar en urgencias.

— Cálmate, de momento no ha aparecido ningún médico. ¿Te encuentras bien? — preguntó alarmada por el arrebato que acababa de tener. Me limité a asentir e intenté calmar mi respiración. Se apartó y fue a sentarse en el sofá con Minnie, que, como yo, estaba dormida.

Todo había sido una pesadilla, una terrible y horrible pesadilla. Eso no quita que el hecho de que ella estuviera allí fuera culpa mía. Si no me hubiera dejado llevar por mi orgullo, ni siquiera estaría allí. Qué estúpida fui.

— ¿Los familiares de Jennie Kim...? — Minutos después, un médico alto entró en la sala de espera, alertándonos.

Sincronizadas, Minnie, Miyeon y yo nos levantamos.

— Soy Lalisa, su novia.

— Me llamo Jhon Miller. Soy el médico que lleva el caso de la señorita Kim.

— ¿Cómo está, doctor? — preguntó Miyeon. Haciéndome retener el aire en los pulmones por miedo a la respuesta.

Miró su historial médico y luego nos miró a nosotras, dejando escapar un suspiro melancólico. El corazón me dio un vuelco.

— Tengo que decir que la señorita Kim tuvo mucha suerte. Tenía una alta dosis de drogas fuertes en su organismo y, si tomaba alguna más, sin duda sufriría una sobredosis. — hizo una pausa. — También está muy deshidratada y tiene una leve neumonía. De momento, sigue dormida a causa de los sedantes que tomó, pero ya está conectada a una vía intravenosa y, en cuanto su organismo esté despejado, empezaremos a tratar su neumonía leve.

Sentí que me quitaban un enorme peso de encima. Mi mayor temor era que su vida corriera peligro o algo peor, como en mi pesadilla. Pero no era así. Se pondría bien.

— ¿Tiene idea de cuándo despertará? — preguntó Miyeon.

— ¿Podemos verla ahora? — oí la voz de Minnie.

—  ¿Puede quedarse con un acompañante en la habitación? — pregunté, porque si fuera posible, Miyeon que me perdonara, pero yo sería quien se quedaría con ella.

— Cálmense, una pregunta cada vez — El médico nos miró levemente — Debería despertarse dentro de unas horas, creo que sólo le quedan cinco horas de sueño, teniendo en cuenta que, como estos medicamentos son muy fuertes, podría despertarse y luego volver a dormirse, hasta que su organismo esté limpio. El horario de visitas es de ocho de la mañana a cinco de la tarde, así que sí, puede visitarla. En cuanto a que tenga un acompañante, la respuesta es sí, Lalisa.

— Estupendo — murmuré y miré a Miyeon con miedo. Ella me miraba especulativa. — Miyeon... — empecé, pero ella extendió la mano, interrumpiéndome.

— Lo sé, Lisa. Debes quedarte con ella. En cuanto se despierte, les exijo que solucionen esta situación, ¿me explico? ¡No soporto más verlas sufrir por tonterías!

— Estoy de acuerdo con Miyeon, Lisa, ustedes se aman. Ella no se casó, te quiere de vuelta, así que deja el orgullo a un lado y vuelve con ella. Ustedes merecen tener un final feliz. 

Sonreí. En serio, por primera vez desde que peleé con Jennie, sonreí de verdad. Era bueno tener el apoyo de amigas de nuevo y eso era lo que estaba teniendo.
 
— No tienen que preocuparse, en lo que dependa de mí, Jennie y yo estaremos juntas en el segundo que despierte — Sonreí para mis adentros, ahora sí estaba en el camino correcto.