06. Ssugar mommys e iguanas cuimas.

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No había una vaina que SeonWoo Fabián detestara más que ir al gimnasio. No sabe porque coño , ni como coño, sus panas lo convencieron de pagar un mes en el gym para ponerse "mamados".

Mamao' lo tenían a el vale, que webo pelao'.

Fabián no estaba hecho para ir al gimnasio... La gente (sus panas) no entienden que a diferencia de ellos, ir al gimnasio y ponerse yuka no es una de sus prioridades ni necesidades como hombre.

¿Saben cuál sí lo era?

El chisme marico, ¡El chisme!

—Deja de estar llorando Fabián, solo es una lagartija. — Se burló Riki sentado en una de las máquinas monitoreando que Fabián completará por lo menos un ejercicio.

No podía permitir que se desperdiciaran los 25$ que pago el catire para ir al gym.

—¡Dale Fabián tu puedes tu puedes! ¡Solo una más!— Le aplaudía JungWon en toda la pata de la oreja para intentar animarlo.

Pero ese catire estaba a dos segundos de agarrar uno de esos hierrros y meterse lo por la geta a JungWon. Carajito pa' ladilloso.

Lo peor de todo es que no le podía ni mentar la madre porque tenía toda su fuerza concentrada en sus bracitos de fideo y en esas nalgas que las tenía más apretadas.

Al final, con todo el cuerpo tembloroso y a punto de fallecer consiguió completar la tercera lagartija de las 10 que se había pensando podria hacer.

Terminó con el cuerpo desplomado en el piso del gimnasio con esos cachetes rojiiiiitos y todo sudado.

—Buscale un poquito de agua al pobre — Le dijo Riki a JungWon quien le alcanzó el termo de dos litros y se lo pasó al moribundo catire.

—Gracias — Dijo entre jadeos antes de empinarse el perol de agua, que por Barbie o se hechó un poquito en la camisa e hizo un reguero de agua.

—¡Nagüara Fabián! Carajito pegao'— Le reprendió JungWon agarrando una toalla para comenzar a secar el reguero.

—Pero busca la correa y pégame, Fernando — Lo retó con ojos de fiera salvaje el catire.

—No se pelien vale — Interrumpió Riki parándose para ayudar a Fabián a levantarse del suelo y llevarlo a otra área del gimnasio. A ver si conseguía convencerlo de que no lo abondanara en el primer día.

Es que a el si le hacía ilusión hacer ejercicio con sus bros ¿Okay?

—¿Te gusta andar bicicleta?— Preguntó el más alto a uno de sus dos enanos. Fabián solo se encogió de hombros como respuesta.

No es como si fuera un webo pegao' andando en bicicleta, Pero por lo menos no se había hechado tantas matadas.

—Porque puedes hacer spinning, también puedes trotar y hasta hay bailoterapia — Enumeró el castaño mientras le señalaba las caminadoras, el área donde se encontraban las bicicletas y una puerta que llevaba al salón donde impartían la bailoterapia.

—¿Pero van a hacer bailoterapia conmigo?— Preguntó Fabián con cara de perro mojao', haciéndoles ojitos nada más porque le daba pena ir solo para allá.

JungWon y Riki podían sacrificarse por el, solo por esta vez.

—Pero más tarde — Advirtió el cara de gato — Porque hoy voy a hacer brazo.

—Y yo voy a hacer espalda — Agregó Riki.

Los tres se fueron cada uno por su lado, agarrando sus botellitas de agua, sus audífonos y sus toallas. Acordaron verse en 10 minutos.

¡QUE BOLAS! / Enhypen Venezuela AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora