𝐌𝐀𝐑𝐁𝐋𝐄 𝐄𝐘𝐄𝐒 || JJ Maybank

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MARA y el resto de pogues se habían despertado temprano para salir a dar una vuelta en el barco y darse un baño para pasar el rato. Aún no había electricidad. Al menos para los pogues, que no podían permitirse un generador.

La castaña escurrió su pelo subiendo al barco y se puso sus gafas de sol sentándose al lado de JJ. Le sonrió levemente y el rubio hizo lo mismo girando su cabeza a otro lado, intentando controlar sus nervios.

JJ y Mara solo eran amigos. Eso parecía o eso creían ellos dos. Nunca había pasado nada entre ellos más que una simple amistad. Bromeaban de forma cariñosa pero nada más allá que eso.

Al mirar hacia atrás comenzó a hablar al ver algo que le sorprendió. Topper y su novia. Pero eso no le sorprendió, al menos a él.

—¿Habéis visto eso? Es un Malibu 24-MXZ. La mejor lancha del mundo. Número uno en lujos, calidad y rendimiento.

—Muy bien por aprenderte la teoría pero, —la ojiverde hizo una mueca y continuó mirando el barco rojo—. Doscientos mil pavos, tío. No podemos ni encender la luz de la cocina.

—Nos equivocamos de padres... —Pope se puso las manos en la cadera viendo la lancha pasar.

—Siento decir esto pero son Topper y su novia. —Kiara la miró con odio a través de sus gafas de sol y murmuró—: no hagas como que no nos ves, zorra.

—Es una creida, todo lo que tiene es porque es una niña de papá y le cumplen los caprichos. —Mara la miró frunciendo el ceño. Luego se puso su ropa una vez su bikini se secó.

John B llevaba el sobre que encontró Mara de su padre a su lado. JJ les había dicho un sitio donde podrían tener acceso a internet. Podrían localizar aquel lugar del mapa donde estaba el Merchant.

—Estad alerta, estamos en territorio enemigo. —el rubio cargo la pistola antes de bajarse de la furgona.

—Ya vale, guárdala JJ. —John b se quitó el cinto de seguridad.

—¿Qué? Hay que estar protegidos.

—Me da que traer un arma a un hotel de cuatro estrellas causará más problemas de los que hay. —Pope apareció en la ventanilla del chico.

—¡Gracias, Pope! —John B alzó sus brazos.

Mara apareció entre el asiento de John B y JJ y miró al rubio con seriedad.

—Te juro por dios que voy a coger esa mierda y después de meterte un tiro la voy a tirar al mar. Guárdala, JJ. —La castaña se bajó y se puso al lado de Pope y Kie.

John B le quitó la pistola de las manos al rubio y la guardo en la guantera para después bajarse.

—Así no se coge una pistola... —JJ rodó sus ojos y tomó una tarjeta—. Casi olvido mi identificación de camarero profesional.

—¿A dónde íbamos? —Mara caminó al lado del ojiazul dirigiéndose al hotel.

—A meternos en internet, solo los ricos tienen. Venid por aquí.