(18) Final y epilogo

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Todos se habían acomodado en la pequeña casita de dos habitaciones de Reaper y Geno, que estaba escondida en el bosque. La mayor parte de las pertenencias personales ya no estaban, pero tenían comida, agua y un lugar seguro en el cual quedarse.

Darse un baño fue lo mejor que pudo haberles pasado después de escapar de ese lugar. Tenían un kit médico, algo normal considerando que Geno era un enfermero, con el curaron las quemaduras leves de todos y también vendaron correctamente la pierna lastimada de Lust.

A la mañana siguiente de haber escapado, Dream había aparecido en la entrada de la casa. Lust pensó que era su fin y que había llevado a la policía allí para que los atrapara.

Pero no, Dream solo pidió hablar con Nightmare y ellos tuvieron una conversación a solas fuera de la casa. Todos trataron de escuchar, pero nadie lo consiguió. Nightmare volvió a casa con un animo estable y aunque le preguntaron, no quiso hablar de lo que converso con su hermano. Solo admitió que los dejaría tranquilos.

Lust temía que las cosas se salieran de control conviviendo en un pequeño hogar con tantas... mentes diversas, pero, superando sus expectativas, todos estaban tranquilos. Veían televisión, limpiaban, leían los libros que se habían quedado en las enormes estanterías o cocinaban. Para esto ultimo resulto que todos eran un desastre excepto Horror. Cocino las latas de espaguetis como si fueran recién hechas y todos lo adoraron.

En las noticias finalmente apareció el recuento de muertos, que superaba las cien personas. Fue catalogado como una de las tragedias más grandes del país. La mayoría de pacientes de mínima seguridad escaparon, incluidos los trabajadores y administrativos, pero los de media y máxima seguridad no tuvieron tanta "suerte". El director Gaster también falleció, incluido Ink y su hijo, Cross.

Como nadie pudo encontrarlo, todos asumieron que era parte del polvo. Lo mismo sucedió con los demás, incluido Lust.

Todos estaban oficialmente muertos.

El hospital quedo completamente arruinado y seria abandonado, trasladando a los pacientes que sobrevivieron a otros lugares. Se pensaba que todo fue provocado por un fallo en el generador, que, según los testimonios, siempre causaba apagones.

Lust fue feliz con ese final. Pasaba sus días junto a sus chicos, ayudaba a Horror a cocinar, estaba junto a Cross recolectando leña, leía junto a Dust y veía telenovelas con Error, de esas terriblemente aburridas y sobreactuadas, pero no importaba.

Nightmare pensaba gran parte de su tiempo junto a Killer. Decía que lo ayudaría a recuperarse. Lust nunca perdió la esperanza de que lo lograría.

(...)

[Tres años después...]

—Oh, dios, la lasaña huele delicioso —admitió Geno, entrando a la cocina.

Había quedado con una cicatriz permanente en su pecho después de su ataque y a veces admitía que le dolía, pero había seguido con su vida junto a Reaper y era feliz. Su hijo Goth lo visitaba a menudo.

Lust le sonrió a su amigo. —Gracias, Horror se esmeró mucho en hacerla.

Actualmente se encontraban en una casa con varias habitaciones, al otro lado del país. Muy, muy lejos de los restos y los recuerdos del hospital. Después de unos meses de vivir en el antiguo hogar de Geno y de que a este le diera un ataque al enterarse de todos los pacientes que había terminado recibiendo, se marcharon para irse a vivir más cerca de este mismo. Tuvieron que tener cuidado con ser descubiertos, pero no salió mal.

Llevaban años en esa casita en mitad del bosque, a unos cuantos kilómetros de la casa de Geno y Reaper.

¿Cómo pudieron pagarlo? Nightmare se hizo cargo. Según su historia, Dream había accedido a darle parte de su herencia después de que converso con él ese día hace años. Ahora podían vivir en paz.

Lust cuidaba de Error, Dust, Killer y Nightmare como si fueran sus hijos, aquellos que nunca tuvo. A Cross lo cuidaba como si fuera un amigo y a Horror...

Entre ellos habían florecido unos inevitables sentimientos. Seguían trabajando en eso.

Dust dedicaba su tiempo a leer, estudiar y compartir con todos ellos. Su mente algunas veces perdía estabilidad, pero Nightmare lo ayudaba con eso, junto a todos.

Killer había vuelto a ser él mismo, después de que Nightmare trabajo meses en sanar la herida de su alma, está había regresado a ser un objetivo rojo y con esto, Killer regreso. Tenían muchos gatos en casa gracias a él.

Error pasaba su tiempo tejiendo y viendo telenovelas. Al igual que Dust, muchas veces tenía sus episodios oscuros, donde las voces de su cabeza lograban traspasar sus barreras. En ese momento no estaba solo, tenía a todos a su lado para acompañarlo, medicamentos y la magia de Nightmare.

Nightmare todavía seguía siendo un cascaron cerrado, pero nunca rechazaba la compañía de nadie, menos la de Lust. A él le había confesado más que a nadie y, sinceramente, lo quería. Lo había hecho sentir amado, como nadie nunca.

Cross no había encontrado su propósito al principio. Siempre siguió las reglas de su padre y se preparo para ser un guardia toda su vida, bajo las ordenes de otros. Ahora que tenía el control de su vida, iba poco a poco dando sentido a sus acciones.

Horror tenía mucho que pensar. Siempre estuvo solo, creció siendo alguien detestable para los demás, sobre todo por su cicatriz. No esperaba formar lazos con nadie, pero ahí estaba, rodeado de chicos que lo querían, eran unos idiotas, sobre todo Killer, pero lo admiraban y eso llenaba su alma. Cuidar de ellos logro llenar algo dentro de si mismo y de sus instintos.

Cuidar de Lust fue un asunto aún mayor.

Era especial.

Podían ser los mayores apuestos y aún así encontraron cosas en común que nadie se hubiera imaginado. Lust lo quería por quien era y Horror se sentía como el monstruo más afortunado.

—¡Llegue! —un sonriente Blue anuncio su llegada al salón, trayendo un montón de bolsas en sus manos que debían estar llenas de galletas y otros dulces.

Cuando se pudieron comunicar con él y explicarle lo sucedido, Blue admitió que había llorado en sus funerales, pensando que habían fallecido de verdad. El alivio que le llego cuando supo que habían logrado escapar lo hizo desmayarse.

Error y Dust se pelearon rápidamente por los dulces que trajo. Nightmare bebía un poco de café negro y los miraba, con una media sonrisa. Cross llegaba del exterior y se quitaba la nieve de su ropa y las botas. Horror, junto con Reaper, Geno y Lust aparecieron desde la cocina.

Iban a celebrar una preciosa navidad.




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Gracias a todos los que llegaron hasta aquí, espero que esta historia, aunque un poco demasiado dramática, haya sido de su agrado. Fue un placer escribirla, a pesar de que siempre termino estresándome imaginando que pude haberlo hecho mejor, pero la verdad es que lo que más importa es escribir. 

Realmente agradezco su paciencia y cualquier comentario positivo o constructivo será bien recibido. Una abrazos y besos a todos.

Nuestro Extraño DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora