Un par de días después, el erizo azul se encontraba caminando por las calles, iba en dirección a la casa de los Chaotix, la abeja les había dejado una nota con una cita para conversar sobre el asunto del erizo negro.
Le preocupaban las movilizaciones militares tan frecuentes, no sabría en que momento podrían tener algún tipo de ataque y temía porque sucediera cuando su pareja estuviese sola.
—Vector, Espio, Charmy, ¿qué es lo que saben?
—Bueno, Espio supo lo que pasó, fue testigo del hecho.—la mirada del azul se posó en el camaleón.
—El erizo estaba huyendo, no sé de qué exactamente pero venía del bosque corriendo, ya estaba herido del costado. Cuando pasó por algunas calles del pueblo, se agotó y desmayó detrás de la florería. Después pasaron algunos soldados buscando entre los locales, fue entonces que llegaron las camionetas militares, pero tu amante ya lo había rescatado.
—Mmh.—hizo una mueca de disgusto ante la palabra con la que describió a su pareja—Bien, pero entonces, ¿quién es él?
—Eso es difícil de averiguar, tendríamos que tener una entrevista con él, podemos deducir varias cosas con la simple interacción directa.—respondió el cocodrilo.
—Alguna vez podrían pasar a almorzar con nosotros a casa, pero que sea pronto, ha intentado escapar varias ocasiones, y no dudo que ahora esté tardando más en actuar porque lo está planeando mejor.
—¡Esperen por nosotros mañana!—la abeja afirmó con emoción.
Con esta pequeña charla, terminó saliendo de vuelta a su hogar, mirando a su alrededor para intentar buscar alguna pista por si mismo. Se acercó a la florería, discretamente veía a la dueña, pensando que podría tener una relación al incidente.
—¿Busca algo en particular?—un empleado lo tomó por sorpresa.
—N-No, estoy viendo si le llevo algunas a mi, em... Pareja.
—Disculpe la pregunta pero, ¿su novia es una eriza rosa de nombre Amy?—el erizo plateado lo reconoció, su clienta frecuente siempre le contaba acerca de su amado erizo azul.
—¿Umh? Oh, cierto, olvidaba que Amy venía seguido a aquí.—sonrió de lado, recordando que muchas veces le regaló flores.
—¿Quiere que le ayude? Conozco las flores favoritas de ella, quizá es un buen día para sorprenderla usted a ella.
—No, bueno, quiero decir, no soy de dar esos detalles, y en este momento tenemos gastos que me impiden-
—No se preocupe.—interrumpió, tomando un ramo—Lleve este, es algo simple, solo algunas rosas con nubes.
—Pero no tengo con que pagarle en este momento.
—Sé donde vive, puede pagarlas después.—el azul aún dudaba en tomarlas—Mire, pronto se van a terminar de marchitar, prefiero que tengan un uso antes de morir por el frío.
—Bien.—las tomó y sonrió—Muchas gracias.
—¡Gracias a usted!—se inclinó levemente en agradecimiento.
Sonic llegó a casa. Antes de entregar las flores, buscó al erizo oscuro, puesto que no escuchaba ruido alguno.
Grande fue su sorpresa al ver que los erizos estaban conversando mientras tomaban té, tenían unas cuantas hojas manchadas de pintura, lo cual se le hizo aún más extraño.
—Hola Amy, ya regresé.
—¡Oh! Sonic, a que no adivinas.—la menor se levantó.—¡Shadow me está enseñando a pintar! Tiene técnicas muy buenas.
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La Brisa de los Cerezos [SonAmyShad] (+18)
Hayran KurguCuando la segunda guerra mundial estaba por acabar, la esclavitud de japoneses estaba también en su punto final. Amy se encuentra por accidente con uno de ellos herido, llevándolo a su casa junto a su pareja para intentar ayudarlo. >Portada temporal...