Capítulo 11.
Llevábamos toda la tarde siguiendo las pistas para encontrar la maldita bandera, podría decir que íbamos bien pero sería completamente mentira.
-Venga, estoy segura de que es por aquí- le dije.
-Llevas diciendo eso desde hace media hora- dijo Cameron empezando a desesperarse.
- Porque estoy segura de que es por aquí- grité agitando el mapa.
-Dame eso- dijo. Lo miró y noté como palidecía, después me miró enfadado- no me lo puedo creer, llevas mirando el mapa mal desde que te lo di.
-¿Qué?- le quité el mapa y lo miré. Era cierto- no puede ser.
-Madre mía, son las 9.00pm y estamos perdidos en medio de un bosque sin comunicación y con una brújula rota- dijo Cameron mirándome como si yo tuviera la culpa.
-¿Y a mi que me cuentas?- dije enfadada- tu eres el que tiene la culpa.
-Que yo sepa la culpa es tuya, si no te hubieras salido del sendero no estaríamos así.
-Si tu no me hubieras asustado yo no me hubiera salido- dije poniéndome en frente de él
-Si no fueras tan cobarde no te hubieras asustado tan fácilmente- me encaró.
-Cobarde será tu abuela imbécil- le grité fuera de mi.
-Eres una cobarde, quítamelo quítamelo- gritó con voz aguda.
-Yo no hablo así.
-Yo no hablo así- me imitó.
-Para ya- dije empujándolo.
Él tropezó y se dio con un árbol, hizo una mueca de dolor y se levantó. Me di la vuelta.
Que se joda, se lo tiene merecido- pensé.
Seguí caminando por el sendero sintiendo los pasos de Cameron detrás mía.
Estaba empezando a oscurecer, por suerte aun nos quedaba agua y un poco de comida pero no duraría mucho.
(...)
Casi una hora y media después seguíamos en las mismas, Cameron había insistido en parar en más de dos ocasiones, pero yo me negaba a parar, habíamos decidido subir a lo más alto para localizar el campamento e intentar volver, si no funcionaba esperaríamos a que alguien nos encontrara.
Cameron se puso en frente mía y se paró- Ahora si, tenemos que parar, no sabemos donde estamos y encima ya no se ve nada, estamos arriesgándonos a perdernos más en el bosque.
Me quejé pero finalmente acepté, buscamos un lugar llano y nos sentamos.
-Solo tenemos que sentarnos y esperar a dormirnos, mañana podremos seguir- dijo Cameron positivo.
Yo solo asentí.
En el bosque solo se escuchaban animales, el aleteo de los pájaros, algún búho -o eso creo, no soy una experta en esto- me acomodé en el árbol en el que estaba apoyada e intenté dormir pero un ruido hizo que abriera los ojos de nuevo.
-¿Cameron?- le llamé mirando hacia su dirección. No recibí respuesta de él.
Escuché el mismo ruido y me levanté de mi sitio, rodeé el árbol y vi unos arbustos, recorrí el lugar con la mirada hasta que escuché de nuevo el mismo ruido y vi el arbusto que había justo detrás del árbol moverse.
Muerta de miedo fui hacia donde estaba Cameron, me arrodillé a su lado y lo moví un poco para despertarlo.
-¿Qué te pasa ahora?- preguntó con voz adormilada.
-Creo que hay algo ahí- apunté hacia el árbol.
-Si lo que quieres es dormir a mi lado no necesitas inventar ninguna escusa- bromeó.
-No tienes remedio- susurré, me moví dispuesta a levantarme pero su mano me lo impidió.
-Era broma, ven- se hizo a un lado para dejarme espacio, dudé un poco pero al final me senté y me apoyé en su hombro- descansa Kels- murmuró.
Le miré durante unos segundos, ya tenía los ojos cerrados y poco a poco su respiración se iba haciendo más lenta.
Sonreí levemente y le susurré en el oído: Descansa Cam.
(...)
Empecé a abrir lentamente los ojos, lo luz del sol me cegó por completo y empecé a hacer ruidos raros y a taparme los ojos con mis manos.
Me destapé los ojos y miré al frente, estábamos en el bosque.
Miré a mi lado y vi como Cameron seguía durmiendo apoyado en mi hombro, lo moví un poco causando que despertara.
-Tenemos que irnos- le dije suavemente.
El asintió, me levanté y fui hacia el árbol en el que estuve la noche anterior, recordaba haber dejado allí la mochila.
Al estar parado en frente del árbol y no encontrarla rodeé el árbol y busqué la mochila en los arbustos, después de unos minutos la encontré y volví a donde se encontraba Cameron.
Él ya se había levantado y estaba mirando desde lo alto.
Fui rápidamente con él y miré hacia la misma dirección, pude ver que desde allí se podía observar el campamento del instituto.
-Genial, no estamos tan lejos- dije con una sonrisa.
-Si, pero lo mejor será que sigamos buscando la bandera, el lago está allí- señaló el lago- va a ser más fácil llegar- dijo dándose la vuelta.
Miré como se iba de allí, al recorrer su cuerpo con la mirada -si, el chico no esta nada mal, que se le va ha hacer- noté en su brazo algo que no tenía cuando salimos del campamento.
-Cameron- llamé su atención, él se giró y yo avancé hasta él.
Tomé su brazo con mis manos.
-¿Qué tienes en el braz...?- al verlo abrí los ojos sorprendida, tenía una cicatriz que ocupaba prácticamente todo su brazo, se podía notar que estaba infectada- ¿Como te has hecho eso?
Él me miró y respondió con duda: -Bueno, ayer me arañé cuando... choqué con un árbol...
-¿Chocaste con un...árbol?- hice memoria y al recordarlo me sentí culpable inmediatamente- oh dios, lo siento Cameron, yo pensé que no te habías hecho nado, no creía que...
El me interrumpió- No es nada Kels, enserio- dijo intentando convencerme.
-¿No es nada? ¿Has visto el tamaño de la herida? Y encima ha sido culpa mía.
Me quité la mochila y saqué el botiquín de primeros auxilios.
-Siéntate- le dije. El obedeció, busqué algodón y agua oxigenada para desinfectarle la herida.
Pasé el algodón por la zona baja de su brazo haciendo que él se quejara.
- Perdón, ya falta poco- dije.
Le vendé el brazo como pude, levanté la cabeza para verlo y lo pillé mirándome.
El me dio una mirada dulce e instintivamente yo se la devolví. Bajó la mirada desde mis ojos hasta mis labios y yo hice exactamente lo mismo. Estábamos demasiado cerca y de un momento a otro empecé a ponerme nerviosa por lo que aparté la mirada y hablé
-P-por ahora eso servirá- dije.
Él asintió y se levantó, yo hice lo mismo.
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¡¡Espero que os guste este capítulo!!
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El Campamento (Cameron Dallas)
FanfictionKelsey Jones es una especie de imán para la mala suerte. Nunca llega a tiempo a clases, tropieza con cosas, choca con personas... y la lista es bastante más larga. En uno de esos tantos días que llegaba tarde fue pillada por el director, para su mal...