Capítulo 18.

5.2K 326 16
                                    

Capítulo 18.

Los tres chicos aparecieron cargados de ramas hasta la cabeza.

Caminaron hasta el centro y las dejaron unas encima de otras para formar una hoguera.

Tony, el chico rarito, caminó hasta la tienda de los tres chicos y entró en ella, después de unos minutos salió de ella y se dirigió a todos.

-Creo que nos hemos olvidado de algo- dijo.

-¿De qué hablas?- preguntó Sky.

-No tenemos cerillas para encender el fuego.

Todos nos quedamos en silencio durante un rato hasta que Cameron habló.

-Por favor, que alguien diga que sabe encender fuego o algo por el estilo.

Miré de uno en uno a todos los presentes y al ver que ninguno decía nada suspiré.

-Supongo que... podría intentarlo- murmuré. Todos miraron hacia mi- Pero no os aseguro nada, hace ya mucho tiempo desde la última vez que lo hice.

-Solo inténtalo- dijo Lily.

-Vale, necesito dos palos y un trozo de madera de árbol.

Los cinco se pusieron a buscar lo que necesitaba, y si, solo los chicos y mis dos amigas, las tres "señoritas" no ayudaron ni un poco.

Cuando ya tuve todo lo que necesitaba me puse manos a la obra.

Casi diez minutos después todavía estaba intentado que saliera algo de el trozo de madera. Me dolían las manos y lo único que había a mi lado era el pesado de Cameron quejándose de que tardaba mucho.

-Creo que no va a salir nada de ahí- dijo por décima vez.

-Cállate ya idiota.

-Es que no está funcionando, solo estamos perdiendo el tiempo, no haces nada bien.

Di un sonoro golpe en el suelo y puse mi mirada en el castaño.

- Si vas a quejarte de lo que hago, te puedes levantar e irte, a sin que déjame en paz de una vez y haz algo.

El me miró sorprendido por mi arranque pero a los pocos segundos apartó la mirada y pasó la mano por su nuca.

-Lo siento, yo solo...- se quedó callado sin saber que decir

Cogí el palo y empecé a intentar hacer fuego de nuevo. Minutos después sentí una respiración en mi cuello y una voz ronca en mi oído.

-¿Estas enfadada?- su voz hizo que me estremeciera y apretara más el palo contra la madera por lo que salió una pequeña chispa.

Aparté a Cameron con una mano y lo hice de nuevo provocando que esta vez saliera una pequeña llama.

-Rápido, necesito hierba seca- les dije a los chicos.

Pocos minutos después teníamos el fuego encendido.

-Menos mal que te tenemos aquí Kels- dijo Tony abrazándome por la espalda y apoyando su cabeza en mi hombro.

¿Desde cuándo había cogido tanta confianza este chico?

Un poco incómoda miré a mis dos amigas, que estaban a unos metros de nosotros mirando hacía algún lugar con sonrisas divertidas.

¿Que les pasará a estas dos ahora?

En ese momento una mano nos separó. Me da la vuelta para ver de quién se trataba y me sorprendí al ver a Cameron mirando a Tony con furia.

El Campamento (Cameron Dallas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora