Lentos Brinquitos [Rirae]

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Hoy era el primer día de clases después de las largas vacaciones que Taerae y Ricky habían tenido, y justo ahora caminaban hacia allá, tomados de la mano, balanceandolas de enfrente hacia atrás y los cumplidos no podían faltar en su rutina.

— ¿Dormiste bien bebé? — Ricky asintió, pegando su cabeza al antebrazo de Taerae quien pellizco su mejilla.

— Si, ¿Y tú? A noche me dormí tarde por tu culpa — frunció el ceño.

— Ah, tu quisiste que viéramos otra película y te fui a dejar tarde a tu casa — se defendió mientras apretaba su mano.

— Te perdono solo si me compras una malteada — Taerae rio y asintió besando su frente.

— Solo si me das un beso.

Ricky se sonrojó.

— ¿Un besito de buenos días?

— Un besito de buenos días — afirmó.

Ambos detuvieron su, Ricky enredo sus brazos sobre el cuello de su novio y miro a Taerae, tomándose el tiempo de apreciarlo para luego alzarse un poco un poco y unir sus labios, sintiendo las manos de su novio colocarse por su cintura, apretando entre ellas, moviendo sus labios al ritmo del compás, sin ser brusco, solo dulce y tierno, probando de su chico y sintiendo todo el amor que sentia por el.

Ricky se separó para tomar oxígeno y sus mejillas no dudaron en sonrojarse, siempre que Taerae lo besaba era fantástico, lo hacía sentir bien, lo hacía sentir en las nubes, y lo mejor era que se sentía amado.

— Mi bebé hermoso.

Taerae dijo mientras frotaba su nariz contra la de Ricky, quien soltó una leve risa totalmente enamorado, podrían pasar años y su amor por Taerae sería el mismo, incluso más fuerte.

— Mi RaeRae lindo.

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Taerae y Ricky tomaron asiento juntos, prestando atención a la clase aunque a veces no tanto, Taerae siempre le daba besitos desprevenidos y no lo culpaba, el también lo hacía.

— ¿Quien quiere pasar a resolver la integral? — Ricky levantó su mano tímidamente, y Taerae sonrió, su niño ya no era aquel chico que lloraba en la esquina del salón, ni tampoco aquel que se dejaba golpear, ni humillar, ahora tenía presencia, y aunque amaba a su Ricky de antes este de ahora era el mejor, su mejor versión, su niño habia superado su trauma y no podia estar más orgulloso de él.

— Muy bien joven Shen, el resultado es el correcto.

El profesor dijo sonriéndole a Ricky quien bajó su rostro avergonzado, Taerae aplaudió incitando que todos los hicieran.

Ricky se devolvió a su asiento, recibiendo un par de besitos de Taerae, junto a un.

— Bien hecho amor.

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