¿Puedo pasar por tu balcón? | JoongDunk

capítulo 15

Joong estaba preocupado por varias razones en ese momento. durante la tarde se habían reunido con Gemini y Fourth a beber en un bar.

la iniciativa la tuvo Dunk para agradecerle a Fourth por haber realizado esa llamada en el momento oportuno.

pero ahora Joong se preguntaba cómo lograría llegar al piso 17 con un Dunk que no dejaba de repetir lo mismo.

— vamos a bailar, vecino. — insistió, colgándose de sus hombros una vez que bajaron del auto.

— bailamos bastante. sujétate, pequeño pulpo. — Joong lo alzó por los muslos, cargando del otro como si fuese un koala. — no más fiesta para ti hasta el próximo fin de semana.

— vecino, no. — se quejó el más bajo, alargando la vocal final. — debemos bailar.

— lo haremos en el departamento. — suspiró, caminando hacia el edificio.

para su suerte, el encargado le abrió la puerta al verlo a través del cristal. lo saludó, y le deseó buena noche, presionando el botón para que las puertas del elevador se abrieran.

— muchas gracias. — sonrió Joong, entrando a la caja metálica que Dunk adoraba usar, en lugar de ejercitarse con las escaleras. — que tenga buena noche-.

— señor encargado. — Dunk apuntó con su dedo índice a un lado de donde estaba el hombre. — es usted el encargado de decirle a mi guapo vecino que baile conmigo.

el mayor rió. — le deseo suerte, joven Archen.

Joong presionó su piso en el panel del elevador. — creo que la necesitaré. — contestó, viendo al hombre agitar su mano como despedida hasta que se cerraron las puertas.

el pensamiento tomó más fuerza cuando Dunk comenzó a dejar húmedos besos en su cuello.

una vez en su departamento, dejó a Dunk sentado a la orilla de la cama.

— levanta los brazos. — pidió en tono amable, llevando sus manos al final de la camiseta del otro. pero terminó rodando los ojos al ver a Dunk sonreír de forma bastante sensual.

— vecino, pensé que nunca lo dirías. — balbuceó el más bajo.

— intento colocarte pijama, Natachai. — lo regañó, lo cual le sirvió para que el otro obedeciera.

tras cambiarlo, lo acomodó en su lado de la cama. antes de que pudiese retroceder, Dunk pasó sus brazos por sus hombros, y lo atrajo peligrosamente cerca de su rostro.

— déjame besarte en agradecimiento, vecino. — Dunk quiso besarlo, pero él volteó el rostro, recibiendo el beso en la mejilla. — ¿vecino?

— tu lenguaje corporal me dice que intentarás obtener más que besos de mí. — con suavidad, quitó los brazos del otro de su cuello, para acariciar su cabello. — y no te tocaré estando ebrio.

— ¿me estás quitando mi pase libre a tus besos? — el labio inferior de Dunk comenzó a temblar, a la vez que sus ojos empezaban a cristalizarse.

— sí. es una revocación temporal, ¿de acuerdo? — Joong lo abrazó al verlo llorar. — Dunk, por la mañana, cuando acabe tu resaca, me podrás dar todos los besos que ahora no puedes.

— ya no quieres mis besos. — Dunk lloraba realmente desconsolado, pero aceptaba su abrazo.

Joong rió suavemente, secando las mejillas del otro. — mañana recordarás esto como algo divertido.

— me estás rompiendo el corazón. — el más bajo limpió su nariz con su camiseta. — ¿cómo podría reírme?

— porque esto es una pena de ebrio, no un dolor real. — Joong lo besó en la mejilla, lo cual impidió que volviera a llorar. — listo, estás sano y salvo.