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La pintura roja goteaba sobre el suelo, tiñéndolo de un tono vibrante. El pincel en su mano y la sonrisa en su rostro hacían que la habitación pareciera claustrofóbica. Los cuadros tuyos colgaban en las paredes, algunos de ellos esparcidos por el suelo. Era una habitación llena de arte, pero todo giraba en torno a ti. Esta era su sala de arte y estaba llena de ti. ¿Se suponía que debías ser feliz? ¿O estabas en peligro? Nunca antes habías sentido un miedo y un peligro tan intensos, dejándote paralizada mientras lo mirabas, aparentemente imperturbable y extrañamente tranquilo, como si esto fuera solo otro suceso mundano para él. De hecho, ve su obsesión por ti como una obligación, una parte integral de su existencia. Hwang Hyunjin era uno de los artistas que más admirabas. Incluso te habías unido a su clase y él siempre había sido amable y encantador contigo. Pero nunca supiste que podía ser tan obsesivo. Te sentías atrapada, asfixiada por su amor.
¿Era amor? ¿O era algo mucho más oscuro? Hwang Hyunjin era un artista talentoso y su trabajo era impresionante. Pero verlo de pie frente a ti, rodeado de sus lienzos y materiales de arte, te llenó de pavor. Te arrepentiste de haber aceptado ir a su clase especial. Esto no era lo que esperabas en absoluto. Mientras mirabas alrededor de la habitación, notaste pinturas tuyas colgadas en las paredes. Te había pintado mientras dormías. Te sentiste violada, tu privacidad invadida. “¿Viniste?”, preguntó Hyunjin, su voz goteaba obsesión. “¿Te gusta mi sala de arte? Todo esto está pintado por mí. Incluso decoré la habitación en base a tus favoritos. Te encantan las plantas, ¿verdad? También tienes muchas de ellas en tu habitación” La suave voz de Hyunjin sonaba diferente ahora. “Este es mi lugar favorito en esta casa, porque está lleno de ti”, dijo.
Habías admirado su arte antes, pero ahora lo viste como lo que era: una manifestación de su obsesión enfermiza por ti. “Oh, mira, esa planta también está en tu habitación.” Señala tu planta favorita en tu habitación, una posesión preciada que nunca has mostrado ni compartido con nadie. Sin embargo, él sabe que está allí, colocada exactamente en el mismo jarrón, como si hubiera replicado meticulosamente cada detalle. La verdadera pregunta es cómo sabe cada detalle de tu vida que nunca has compartido con nadie. A Hwang Hyunjin le encanta dibujar. Le encanta la forma en que su pincel baila sobre el lienzo, creando hermosas obras de arte. Ama todas las cosas bellas, pero lo que más ama es a ti. Tú eres la razón por la que sigue dibujando. Nunca habría alcanzado este nivel de habilidad sin ti. Llegaste a su vida cuando estaba en su punto más bajo y lo hipnotizaste. Le robaste su atención y su corazón. Cuando le dices cuánto amas su arte, la forma en que tus ojos brillan y tu atención está pegada a su trabajo, él se siente más feliz de lo que puede explicar.
Él dedica toda su habilidad a ti, como lo evidencian las pinturas tuyas que adornan su habitación. Hyunjin quería que supieras que eras su máxima prioridad en el mundo. Parecía tan irreal, pero lo había creído desde la primera vez que te vio. Naciste para ser suya. “El hombre con el que hablaste ayer habló demasiado contigo. No me gusta que no sepa nada de arte. Sé todo sobre arte y sé todo sobre ti. No hables con él.” Dejó el pincel, sus manos manchadas de pintura. Su sonrisa angelical nunca se desvaneció, pero ¿quién creería que pudiera estar tan loco? “Estás loco” dijiste, tu voz se convirtió en un susurro. Él se rió, como si tus palabras fueran el mejor chiste que hubiera escuchado. “Lo sé, ¿verdad?” Diste un paso atrás, evitando acercarte demasiado a él.
Él creía que lo hacía por tu propio bien, vigilándote para asegurarse de que estuvieras lejos de las personas malas. Pensaba que merecías a alguien mejor y estaba decidido a satisfacer todos tus intereses y pasatiempos. Era el único que podía hacer eso por ti. Estaba aterrorizado. La idea de que estuvieras lejos de él lo llenaba de pavor. No podía imaginar su vida sin ti. Te necesitaba para sobrevivir. Por eso te había invitado a su vida. Eras su musa, su todo. Le hiciste todo tan fácil. Llegaste a él sin que él tuviera que hacer ningún esfuerzo. Significaba que lo deseabas tanto como él te deseaba a ti, ¿no? Cuando estás a punto de correr hacia la puerta, él llega primero, la cierra y le pone llave. Sentiste que tu corazón se aceleraba al escuchar su risa.
Fue una locura, y te hizo querer que el corazón se te saliera del pecho. “Sabes que siempre preparo todo a la perfección” dijo, con la voz llena de felicidad “Especialmente para una ocasión especial como esta” La habitación que te había dedicado era perfecta, y ahora tú también estabas en ella, lo que la hacía aún más perfecta. Siempre había imaginado este momento, y sabía que reaccionarías así. En el momento en que sentiste su aliento detrás de tus orejas, su presencia cerca de la tuya, sentiste que caías en la nada. Como su pintura cayendo al suelo. Si hubieras sabido lo peligroso que era, te habrías mantenido alejada de él. Pero su rostro angelical te había cegado. Habías caído en su trampa, y ahora eras su alegría. Eras su musa, y ahora él te tenía. “No te haría daño, mi musa, mi amor, mi todo” susurró “No tengas miedo.”
Pero sus palabras eran mentira. Todo lo que salía de su hermosa boca sonaba a mentira. Podías imaginarte todos los peores escenarios posibles con él en tu vida. Podías imaginarlo apuñalándote lentamente, desangrándote. No habría más felicidad. Poco a poco te olvidarías de la libertad. Él no necesita seguirte todo el tiempo, estar enojado con personas sin importancia que intentan acercarse a ti o acosarte. Su máxima prioridad eres tú, y solo tú. Todo lo que quiere es que lo entiendas, incluso si eso significa hacerte recordar a la fuerza. Él sabe que eres suya, incluso si no quieres serlo. Y de todos modos no necesita tu opinión. Se rió. Lo sabía. Era consciente de que no actuaba con normalidad. Estaba obsesionado contigo, y lo sabía. Ni siquiera necesitabas recordárselo. Después de todo, eso era lo que era. Y él pensaba que estaba en el camino correcto. Lo llevó a ti, y eso lo hizo sentir cómodo. Sí, tienes razón. Si él es un monstruo, es tu monstruo. Te pertenece.
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Espero les haya gustado! <3 por cierto ya subí el headcanon de channie a tumblr para que se pasen por allá >◡< en tumblr estoy como ‘@hwangrfrnd’ en caso de que no hayan visto el aviso anterior estaré subiendo traducciones a tumblr también; nos leemos pronto ¡bye! <3
