Capitulo XXIII | Problemas Previos Al Evento

44 4 0
                                    


Los pocos días que sucedieron después del cumpleaños de Applejack habían sido tranquilos. El eco de la celebración aún resonaba en la mente de Rarity, pero la vida no se detenía. Todos habían vuelto a sus rutinas, y la familia Diamond no era la excepción, como siempre, estaban ocupados. Magnus se encontraba inmerso en sus tareas laboralmente cotidianas, y Margaret seguía sumergida en los preparativos para el gran evento de caridad que organizaba cada año.

Este evento era algo significaba mucho para ella, pues le permitía trabajar hombro a hombro, más de cerca de lo acostumbrado a su querido esposo, pero no solo eso, sino también permitía una gran aportación para la familia, la empresa, y los negocios, pero más importante aún, una gran comunidad de personas que necesitaban del evento, y Rarity había sido testigo de su impacto desde que era pequeña.

Este año, sin embargo, sería diferente. Rarity no solo estaba involucrada detrás de escena como en años anteriores, ayudando con la decoración o aconsejando a su madre sobre detalles estéticos. Esta vez, Margaret había decidido que era el momento para que Rarity diera un paso al frente. Sin previo aviso, en una de esas tardes ocupadas en las que Rarity ayudaba con la lista de invitados, su madre se acercó y, con una sonrisa suave, pero decidida, le reveló su plan.

— Querida — comenzó Margaret tomando las manos de su hija entre las suyas — Tengo una petición para el evento de este año... Quiero que tú des las palabras de apertura — dijo muy sonriente

Rarity sintió que su corazón daba un vuelco. No era una simple tarea. Este evento reunía a personas importantes, a benefactores que apoyaban causas nobles, y el hecho de que su madre confiara en ella para algo tan significativo la dejó sin aliento.

— ¿Yo... dar el discurso? — preguntó Rarity con su voz reflejando una mezcla de sorpresa y emoción — Mamá, yo... no sé si estoy lista para algo tan grande — añadió nerviosa

— Rarity, has estado preparándote para este momento desde hace años. Sé que lo harás maravillosamente. Tienes una elegancia y una elocuencia que no pueden ser ignoradas, y quiero que todos vean lo increíble que eres. Este evento no sería lo mismo sin ti — dijo Margaret sonriendo con ternura, acariciando el rostro de su hija

Las palabras de su madre fueron como una brisa cálida en un día de invierno. Siempre había admirado el temple y la gracia de Margaret en estos eventos, y aunque la idea de hablar frente a una multitud la intimidaba, Rarity no pudo evitar sentir una ola de orgullo recorriéndola. Su madre confiaba en ella.

Esa noche, mientras se sentaba frente al espejo de su tocador, su reflejo le devolvía una mirada pensativa. El evento de caridad ya no era solo un compromiso en su agenda, ahora representaba algo más personal. Sabía que este sería un momento decisivo, no solo para la organización, sino para ella misma. Su madre le estaba ofreciendo la oportunidad de brillar, de demostrar lo que realmente podía hacer.

Con ese pensamiento, Rarity cerró los ojos y tomó una respiración profunda. Ya podía imaginarse de pie en el escenario, su corazón latiendo fuerte, pero su voz firme, dirigiéndose a la multitud con la elegancia que su madre siempre había elogiado. Había mucho en juego, pero no se permitiría fallar.

A medida que se acercaba la fecha del evento, Rarity se sumergió en los preparativos con más entusiasmo que nunca. Practicó su discurso una y otra vez, frente al espejo, a Reginald y Beatrice, a Sweetie Belle, incluso a Opalescence, quien la miraba con desinterés, pero en silencio, como si supiera que su dueña estaba ante algo importante. El evento se acercaba, y con él, una nueva y maravillosa etapa en la vida de Rarity.

Sin embargo, lo que debían ser días de preparación, felicidad y emoción, se tornaron en un encuentro de distanciamiento inexplicable, una creciente sensación de que algo se estaba desmoronando.

Cosas Del Amor: "Por Primera Vez" | Rarijack (1/3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora