Bomba de humo

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Pov Raven

Despues de participar en la clase de Abril fui a la habitacion del piano. Necesitaba gestionar mis emociones y necesitaba hacerlo solo. Primero intente tranquilizarme y bajar las pulsaciones, que las tenia muy alterasdas, hice un par de respiraciones. Empeze a analizar todo en mi subconsciente.

*Bale Raven calma. No ha sido nada. Simplemente esta buena y te ha puesto como una moto, nada mas. No puedes hacerte debil, no puedes tener sentimientos por ella, no es bueno, te ba a hacer daño. Lo mejor que puedes hacer es evitarla y ya esta.*

Mis pensamientos fueron interrumpios por Martin.

—Raven te estaba buscando.— Cerro la puerta y se sento al lado mio.

—Lo siento estaba pensando en mis cosas, que te pasa?— Tenia cara de preocupacion.

—Nada, simplemente queria hablar contigo de un asuntito.— Se mordia las uñas, se le notaba indeciso. Le cogi de las manos y lo mire con sinceridad sin decir ni una palabra. Queria darle animos, pero tampoco queria presionarlo.

—Creo que me gusta alguien y mucho.— Los ojos se le llenaron de lagrimas y agacho la cabeza. Lo habraze y deje que descansara en mis brazos.

—Pero el no siente lo mismo y no puedo hechar para atras. Creo que me he enamorado. Nomsenque hacer Raven.— Le seque las lagrimas. Me olia algo desde que entramos, pero nunca le presione para que me lo contara, le deje su espacio pero siempre le demostraba mi apoyo.

—Quieres decirme quien es?— Lo anime a que me lo dijera en voz alta, asi le ayudaria a asimilar las cosas.

—Juanjo.— Sus ojos brillaban cuando hablaba de el, pero su luz se apagaba cuando chocaba con la realidad.

—Martin ya sabes que es algo nuebo para el, yo creo que siente lo mismo, que no estas perdido y que tienes una oportunidad, pero tienes que ser mucho mas paciente con el que con cualquier otro. No es facil que todos los esquemas se te rompan cuando aparece un bigotudo bohemio y te replanteas todo. Es muy confuso, por ello tienes que ayudarlo y demostrarle lo que es el amor sea del sexo que sea.— Martin me habrazo y cuando nos separamos tenia una sonrisa, parecia mucho mas tranquilo.

—Gracias Raven, de verdad que necesitaba escucharlo.— Nos quedamos un rato mas hablando de cosas casuales y luego se fue junto a Kiki y Rus.

Segui inmersa en mis pensamientos, unas letras me vinieron por la cabeza y las apunte en mi libreta. Era mi forma de desaogarme, componer y expresarme con mis letras. Ya era bastante tarde pero no fui a cenar, estaba tan centrada que no me di ni cuenta.

—Hola.— Pegue un salto de la silla.

—Lo siento no queria asustarte.— Era Violeta. Yo me mantube estatica y ella se quedo en la puerta.

—No has venido a cenar.— Parecia bastante preocupada.

—No tenia hambre.— Le conteste fria y seca.

—Te he guardado un sandwich.— Lo dejo encima del piano. No obtubo contestacion. No queria estar cerca de ella, y menos a solas, mi cabeza entro en panico y me levante de un tiron. Parecia como si hubiera visto un fantasma. Cogi el sandwich y me dirigi hacia la puerta.

—Raven espera.— Me agarro de la mano y me pare en seco. Se me tensaron todos los musculos y mis manos emoezaron a temblar. Mi cuerpo habia reaccionado a su toque, y se habia puesto en alerta. Violeta al ver mi reaccion solto su agarre al instante.

—Siento si antes me he pasado o te he hecho sentir incomoda, no era mi intencion. Por favor perdoname.— La mire y su expresion era de culpa y de arrepentimiento. Se me encogio el corazon y me dieron ganas de habrazarla y de decirle que no era culpa suyo, que era mi problema. Pero el miedo gano y sali de la habitacion sin decir nada. Hui como una cobarde y me meti en las duchas. Todo el mundo estaba dormido ya. Un cumulo de sentimientos se me hicieron bola y estalle. Estalle en una de las duchas, llore en silencio. Llore por el miedo, por los sentimientos que empezaban a aparecer en mi, por la culpa y por el dolor que me causaban.

Unos brazos familiares me acogieron y me rodearon bajo su proteccion. Me senti segura y proteguida. Hace mucho que no me sentia asi.

—Violeta me ha dicho que estabas mal. Tranquila estoy aqui. No me voy a ir.— Era la voz de Martin. Nos levantamos y despues de estar un rato abrazados, nos dirigimos a nuestras camas.

—Puedes dormir conmigo hoy?— No obtube respuesta. Senti frio y al de dos segundos su cuerpo estaba pegado al mio. Me recoste en su pecho y me dio un bezo en la cabeza. Su respiracion se relajo y sus caricias pararon, ya se habia dormido, yo no tarde mucho en dormirme tambien.

La mañana siguiente no sali de la cama, me quede en la habitacion con la escusa de que me dolia la cabeza. Martin se quedo conmigo todo el dia, me traia comida e intentaba alegrarme, pero parecia un alma en pena. Todos parecian un poco preocupados poe mi. Siempre era la primera en lebantarne y dar la nota, pero desde la clase de Abril estaba como apagada.

—Raven cariño tienes que salir un poco y despejarte.— Noemi habia venido a ver como estaba.

—Yo la llevare a la terraza mas tarde, no te preocupes.— Martin seguia a mi lado. Y cumplio lo prometido, cuando todos estaban en clase, me llevo a la terraza.

—Raven no puedes seguir asi, tienes que hablar con alguien. Da igual si no es conmigo, pero no puedo verte asi. Quiero ayudarte, tu solo dime lo que quieres que haga.— Martin estaba un poco desesperado. Mi cambio tan repentino de actitudud lo mosqueaba. Entendia su agobio y no queria que creiera que no confiaba en el asique decidi dar el paso.

—Martin tengo que contarte una cosa.—

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