FLUFFTOBER//BAJIFUYU²⁰²⁴

🍁Cultivar un jardín🍁

Keisuke sonreía con orgullo, necesitaba con urgencia que Chifuyu viera lo mismo que él.

–¡Chifuyu! –gritó con emoción –¡Fuyu!

–¡Fuyu ven al huerto! –gritó nuevamente al no obtener respuestas por parte del rubio.

Su emoción era demasiada, Chifuyu y el le habían puesto tanto empeño al huerto que decidieron tener en casa. Por supuesto que habían tenido algunos inconvenientes como la vez que todos sus cultivos se infectaron de una molesta plaga o cuando su cultivo de fresas que habían cuidado por tanto tiempo se negaba a dar frutos. Baji recuerda lo frustrado que lucia Chifuyu y lo entendía mejor que nadie pues ambos se habían esforzado tanto.

Así que cuando se percató que una fresa del tamaño de  su dedo meñique colgaba de uno de sus muchos cultivos que Chifuyu había insistido en tener, no dudó en llamar a su pareja.

–Kei, ¿qué ocurrió? –algo agitado Chifuyu llegó al huerto donde Baji se encontraba, con el cabello húmedo pues acababa de bañarse.

–Ven Chifuyu, acércate –dijo aún con la emoción a flor de piel –dime, ¿ves algo nuevo?

Chifuyu se acercó, le asustaba ver a Keisuke tan entusiasmado.

Observó con atención y casi lo pasa por alto pero la vio justo ahí frente suyo una pequeña fresa aún de color verde, se sostuvo del brazo de Baji por temor a desmayarse.

Por fin habían logrado lo que pensó imposible.

Se alejó de Keisuke y no le importó ensuciar sus manos que recientemente había lavado pues empezó a rebuscar con cuidado entre su cultivo y para su sorpresa encontró más fresas escondidas algunas más grandes que otras.

–No puedo creerlo, después de tanto esfuerzo por fin lo logramos –comentó Chifuyu acariciando con la yema de sus dedos las pequeñas fresas.

–¿Deberíamos nombrarlas? Son como nuestras hijas – dijo Baji mientras se acercaba a Chifuyu.

El rubio se rio entre dientes, por supuesto que le encantaba la idea.

–Estoy de acuerdo, necesitamos pensar muchos nombres.