mi nombre es jeremías » enzof/enzop

TRECE: 2024 - PARTE 3

- Alias "Fase de grupos de Copa América".

- Jugadores con los que está EnzoF: Exequiel Palacios, Enzo Nicolás, Julián Álvarez, Leandro Paredes, Lautaro Martínez y Lisandro Martínez.

- Tags: sex phone, trío, un poquito de drama, Juli bottom, 17k palabras.

Para su sorpresa, Julián no lo recomendó a nadie nuevo esos días desde que salió la lista oficial de convocados hasta el debut de la Selección en la Copa. Eso no quería decir que no había estado con algunas caras conocidas.

Se reencontró con Palacios. Fue una sorpresa verlo en la puerta de su habitación sin Montiel pisándole los talones, pero Enzo no iba a quejarse al respecto y Jeremías tampoco, por supuesto.

No podía quejarse de haber terminado arriba de la mesa, con sus rodillas en los hombros del jugador, mirándolo a los ojos y aferrándose al borde del mueble mientras Exequiel se lo cogía sin piedad. Enzo soltaba sus gemidos típicos de trola y le ponía esa carita sufrida que sabía que al pibe le gustaba. Exequiel se mordía los labios y le daba todavía más fuerte.

Exequiel paró un momento y Enzo se quejó, pero solo fue para cambiar la posición. Ahora Enzo tenía el pecho contra la mesa y la mano de Exequiel en su cuello, su otra mano sosteniéndose firmemente de su hombro mientras sus caderas daban embestidas cortas y rápidas que lo estimulaban de la manera perfecta.

Enzo gemía sin parar, empañando la madera brillante de la mesa cada vez que dejaba caer su cabeza sobre la superficie, y Exequiel apretaba su mano en su garganta de vez en cuando para que no aflojara con sus quejidos.

Terminaron sentados en uno de los sillones individuales de la habitación, justo frente al espejo de cuerpo entero, con su espalda contra el pecho de Exequiel y sus piernas abiertas por las manos del jugador en el dorso de sus muslos. Enzo se masturbaba con apuro, desesperado por acabar, y Exequiel mordía y marcaba toda la piel que tenía cerca. Enzo acabó en esa posición, pero cuando fue el turno del jugador, lo hizo ponerse de rodillas, se sacó el forro y Enzo hizo garganta profunda de una.

Exequiel le acarició el pelo y la nuca lo poquito que duró el pete debido a lo cerca que estaba. Lo retuvo de la frente cuando quiso bajar del todo y empezó a acabar en su cara con hilos gruesos de semen. Ya tengo mi propia rutina para el cuidado de la piel, pensó Enzo con una sonrisa privada mientras succionaba los últimos vestigios del orgasmo de Exequiel.

Enzo se levantó con elegancia y Exequiel miró con ojos oscuros y la boca entreabierta su figura. Le sonrió y le guiñó el ojo antes de ir en busca de una toalla para limpiar el desastre en su abdomen y pecho.

—¿Me puedo quedar un ratito más? —preguntó Exequiel cuando Enzo le revoleó una toalla para que se limpiara.

Por un momento, Enzo vio a ese pibe que recién se estaba formando como jugador, pero que ya la estaba rompiendo toda en River. Vio la timidez inicial de la inexperiencia y la desesperación por seguir probando más y más. Ese mismo fervor que se le notaba en la cancha, se lo demostraba a Enzo cada vez que se veían.

Y como siempre, Enzo no podía decir que no a semejante propuesta.

—Podés quedarte todo el tiempo que quieras —contestó Enzo, acostándose boca abajo en la cama y con una almohada contra su pecho, parando de más la cola a propósito.

Exequiel sonrió y se levantó, caminando con muchísima pachorra hasta saltar por encima de su cuerpo y acostarse junto a él. Enzo sonrió y suspiró cuando el jugador pasó su mano por su hombro, siguiendo la curva de su espalda hasta llegar a la montañita que era su cola. Masajeó su nalga y se inclinó para besar suavemente su hombro.