57

90 11 14
                                    

-No se porque a fuerzas Louis quiere hacer una fiesta de presentación. Eso ni siquiera se considera una celebración en Corea. -se quejo Eunu. -¿Ya le dejaste claro que el bebé es tuyo y no de el?.

-Bueno eso no le importa mucho a Louis. -Le aclare. -Además está muy emocionado con esto, no quieres romperle la ilusión ¿o si?.

-Claro que esta emocionado, no es su dinero el que está gastado. -Dijo Eunu mirando a Louis salir del restaurante donde habíamos pasado a comprar la comida para la cena.

-No seas malo, tu nunca te has quejado porque gaste tu dinero, si fuera así, no le habría dado una tarjeta de credito. -Le dije al ver que Louis se acercaba feliz dando brinquitos.

-Eso fue porque el se encarga de traer todo lo que tu y Jae necesitan. -Dijo rendido.

-Te dije que le diéramos la que JungKook me dejo.

-No quiero que nuestro amigo termine muerto y bajo un puente. -Dijo serio, sacándome un suspiro.

La puerta del auto se abrió y un muy feliz Louis entró con las bolsas de comida, notando el mal humor de Eunu.

-¿Ya estas quejándote de nuevo?. -Le reclamo Louis. -Quita esa cara o nos vas a amargar el día.

-No me quejo, solo no entiendo para que hacer una fiesta de presentación, aun es pronto y además Anne ni siquiera ah elegido un nombre, ¡Deberían multarte! Eres una madre terrible, como puedes tener un pobre bebé sin nombre. -Dijo volteandose hacia mi señalandome con el dedo de mala gana.

-¡Tres semanas no es muchísimo!. Además si que tiene nombre, solo que aun no se que apellido llevara. -Me defendí. -Tu eres un terrible tío, como puedes olvidar su nombre.

-Claro que soy un terrible tío, pero soy un excelente padre, que tal si olvidamos el Jeon, Park o Kim y usamos el ¡CHA!. -Sugirió enfatizando su apellido.

-Ya, ya, ya, dejen su pelea de novios para otro momento, vamos a comprar lo que falta y podemos pasar por la boutique a elegir un vestido para Anne. -Dijo Louis.

-No, mejor vamos por lo que falta y el vestido lo dejamos para mañana, Jae esta cansado y para ser honesta, yo igual.

-Buuu, aburridos. -Me abucheo Louis por mi respuesta.

-Yo también estoy cansado. -Me apoyo Eunu.

-Son tan dramáticos, parecen personas de la tercera edad, ¿acaso tienen ochenta años?. -Dijo burlándose de nuestro cansancio justificado.

-Bueno, no eres tu el que se levanta a alimentar a Jae a las tres de la madrugada. -Le Dijo Eunu encendiendo el auto para ir a la próxima tienda.

-¡Oye! yo les di la solución la primera semana y ustedes no quisieron tomarla, sufren porque quieren, porque hay seis manos extras y dispuestas a ayudar en ese horrible suplicio. -Contesto Louis volteando a verme con mirada juguetona.

-No digas tonterías. No vamos a llevar a esos tres a vivir a casa con nosotros Louis, que tipo de persona crees que soy. -Dijo Eunu con desagrado pellizcando el hombro de Louis que se había sentando en el puesto del copiloto.

-Una con muchas parafilias ocultas, no creas que no eh notado como miras los pies de Anne. -Respondió Louis haciéndonos reír a los dos.

-¡Que! ¡estas loco!. -Contesto Eunu con las mejillas rojas por la vergüenza. -Podré ser un imbécil si quieres, pero no llevare a ese trío a vivir a mi casa.

-Tu lo dices porque estas celoso, pero, pregúntale a Anne y te aseguro que a ella no le molesta mi propuesta tanto como a ti. -Le contesto Louis con picardia haciéndolo bufar y Eunu me miró por el espejo retrovisor esperando a ver mi reacción, pero yo solo solo sonrei y hice un gesto de negación con las manos.

SavageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora