Entres canciones y sueños (Quevedo)

14: aterrizando en la realidad

La relación entre Lucía y Pedro avanzaba con una nueva claridad. Habían pasado algunas semanas desde aquella noche juntos, y aunque todavía sentían la emoción de haber retomado su historia, también sabían que ahora vendrían los verdaderos retos. La vida de Pedro seguía siendo un torbellino de conciertos, entrevistas, viajes, y compromisos, mientras que Lucía mantenía su propia vida en Madrid.

Pedro, consciente de lo que había ocurrido antes, se esforzaba más por estar presente en la vida de Lucía, enviándole mensajes cada vez que tenía un momento libre y llamándola antes de irse a dormir, sin importar en qué parte del mundo estuviera. Sin embargo, ambos sabían que no podían vivir en esa burbuja para siempre.

Una tarde, mientras Pedro estaba en medio de una gira en América Latina, Lucía recibió un mensaje de él:

"Te echo de menos. Quiero que vengas conmigo."

Era algo que había pensado antes, pero nunca se había atrevido a sugerirlo. El trabajo de Lucía, sus amigos, su vida en Madrid, eran importantes para ella, y aunque quería estar con Pedro, también sabía que sacrificar tanto no era sencillo. Sin embargo, el deseo de estar juntos crecía, y ahora que su relación estaba más fuerte que nunca, tal vez era hora de replantearse lo que significaba estar verdaderamente comprometidos.

Lucía se quedó mirando el mensaje, indecisa. ¿Debería hacer las maletas y seguirlo?