Prólogo

98 14 0
                                    


—Hee... —dijo jadeando, con la cabeza apoyada en el hombro del mayor.

—Dime, cariño —respondió Heeseung con voz baja, acariciando la cintura de Jake, mientras este se movía suavemente sobre él, sus cuerpos conectados en una danza íntima.

—No voy a aguantar más... —susurró Jake, sintiendo el calor de la cercanía entre ellos.

—Jaeyuni... —respondió Heeseung, esforzándose por mantener el control—. No creas que eres el único, estoy al límite, pero quiero que este momento dure un poco más.

La ropa esparcida por todas partes delataba la situación. Los sonidos que llenaban el aire eran la única música en esa escena, suaves suspiros y respiraciones entrecortadas.

Heeseung levantó delicadamente el rostro de Jake, viendo sus labios hinchados y entreabiertos. Sin poderlo resistirlo más, lo besó con pasión: un beso intenso, como si fuera el último que compartirían. Sus labios se separaron, y en ese instante, ambos llegaron al clímax de su conexión, un momento que resonó en toda la habitación.

—Jake... —jadeó Heeseung suavemente, antes de darle un tierno beso en una marca que había dejado en su piel momentos antes—, eres increíble.

—Te amo, Heeseung —murmuró Jake, su voz cargada de emoción, mientras depositaba un suave beso en los labios del mayor.

—Yo también te amo, hermoso —respondió Heeseung con ternura, apartando suavemente el cabello de la frente de Jake y dejando un beso en su piel.

Heeseung acomodó a Jake en la cama con cuidado, envolviéndolo en sus brazos, mientras el más joven se acurrucaba contra su pecho.

—Descansa, mi amor —dijo Heeseung, y poco después, ambos se quedaron dormidos, envueltos en la calidez del momento.

El amor como el día en que nos conocimos - HEEJAKEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora