La primera semana en Alexandria había sido todo menos tranquila. Aunque el lugar ofrecía seguridad y comodidades que parecían sacadas de un sueño, el grupo de Rick aún se adaptaba a la idea de bajar la guardia. A pesar de las casas ordenadas y las sonrisas amables de los residentes, la tensión entre los dos grupos era palpable, como si un solo paso en falso pudiera derrumbar todo.
Avery caminaba por el sendero principal, con Tommy apoyado en su cadera. El pequeño parecía estar hipnotizado por la tranquilidad del lugar, mirando a su alrededor con ojos curiosos mientras mordía su propio dedo. Avery le dedicó una sonrisa, acariciando su cabecita con ternura. Estar en un lugar donde Tommy podía crecer con algo de normalidad era todo lo que había deseado, pero aun así, no podía ignorar la sensación de incomodidad en el ambiente.
—¿adaptandote?— La voz de Erick la sacó de sus pensamientos.
Avery levantó la mirada y vio a su hermano apoyado contra la cerca de madera, observándola con una mezcla de curiosidad y preocupación. Habían compartido pocas palabras desde su llegada a Alexandria, como si ambos estuvieran algo distanciados apesar de vivir en la misma casa. Ella se detuvo frente a él, sosteniendo a Tommy con más firmeza.
—Lo estoy intentando— respondió con un encogimiento de hombros. —No es fácil para ninguno de nosotros, ¿verdad?—
Erick asintió lentamente, sus ojos claros fijos en los de ella. —No, no lo es. Pero…— vaciló, como si buscara las palabras adecuadas. —Me alegra que estemos aquí. No sé lo que habría hecho si algo te hubiera pasado allá fuera.—
El tono de vulnerabilidad en su voz la conmovió, y Avery se acercó un poco más, apoyando la mano libre en el brazo de su hermano. —Estamos aquí ahora. Juntos. Eso es lo que importa— le dijo suavemente.
Erick dejó escapar un suspiro, pasándose la mano por el cabello en un gesto frustrado. —Sí, pero… esto no es como lo que conocemos. La gente aquí no entiende lo que significa sobrevivir allá afuera… ellos son diferentes. Y si no tenemos cuidado, esto podría estallar— advirtió, su voz baja.
Avery asintió, entendiendo a la perfección lo que su hermano decía. —Tienes razón, pero no podemos vivir esperando que las cosas se desmoronen. Por una vez, tenemos la oportunidad de estar a salvo, de construir algo. Deberíamos aprovecharla, ¿no crees?—
Erick no respondió de inmediato. Sus ojos se desviaron hacia Tommy, y una pequeña sonrisa se formó en sus labios. —Por él, deberíamos intentarlo— murmuró, estirando la mano para acariciar la mejilla del bebé, que lo miraba con curiosidad.
Avery sonrió también, su corazón suavizándose al ver a su hermano interactuar con Tommy. Pero antes de que pudiera decir algo más, Carl apareció corriendo desde el otro lado de la calle, su mirada fija en Avery.
—Avery, ¿puedes venir? Necesito hablar contigo— dijo rápidamente.
Ella lo miró sorprendida, pero asintió, siguiéndolo mientras Rick y los demás se encargaban de una situación en el portón con glenn y ¿Alden?. —¿Qué pasa, Carl?—
El chico la guió hasta el frente de su casa, lejos de las miradas curiosas. Cuando estuvieron solos, se giró hacia ella, su expresión seria.
—Solo quiero saber… ¿estás bien?— preguntó, su tono lleno de preocupación.
Avery parpadeó, sorprendida por la pregunta. —¿Por qué no lo estaría?—
Carl se pasó la mano por el cabello, visiblemente incómodo. —Es solo… que he visto cómo mi papá te mira. Y… no sé. No quiero que te pase nada. Ya hemos perdido a demasiada gente, y tú eres… importante para nosotros— murmuró, desviando la mirada con un toque de vergüenza.
El corazón de Avery se suavizó al escuchar sus palabras. A pesar de todo, Carl seguía siendo un niño que se preocupaba por las personas que le importaban. Ella se agachó un poco para quedar a su altura, colocando una mano en su hombro.
—No voy a ir a ninguna parte, Carl. Te lo prometo. Todos vamos a estar bien aquí. Solo tenemos que adaptarnos— dijo suavemente.
Carl asintió lentamente, pero la preocupación no desapareció del todo de su expresión. —Solo… ten cuidado, ¿sí? No quiero verte herida—
Avery sonrió y asintió. —Lo tendré en cuenta, Carl. Y gracias— respondió.
Él le devolvió una sonrisa tímida, Pero cuando se giraron para regresar, Avery vio de reojo a Daryl, observándolos desde el otro lado de la calle con una expresión indescifrable.
Sus miradas se cruzaron por un segundo eterno, y Avery sintió su corazón acelerarse. Había tanto que no se había dicho entre ellos, tanto que ambos seguían intentando entender. Pero ahora, con la situación en Alexandria tan delicada, sabía que no podían permitirse distracciones.
Tommy comenzó a balbucear en sus brazos, y ella apartó la vista, sonriendo suavemente al bebé. A veces, los pequeños momentos de normalidad eran los más valiosos.
Cuando regresaron al grupo, la discusión había terminado, pero la tensión aún colgaba en el aire. Avery se quedó cerca de Carl, su mirada encontrando la de Rick por un momento. Él le dedicó una leve inclinación de cabeza, un gesto silencioso.
Había muchas cosas que aún no comprendían de Alexandria, pero lo único que sabía con certeza era que, pase lo que pase, protegería a su familia y a los que amaba, sin importar el costo.
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Avery tienes que elegir
Besos💋💋
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EL LEGADO DE LOS MUERTOS [TWD]
FanfictionEl Legado de los Muertos": En un mundo devastado por la muerte y la desesperación Avery Harper lucha por mantener la esperanza mientras enfrenta la brutal realidad de la supervivencia. Pero cuando su corazón se ve dividido entre dos hombres que han...