Había salido temprano de mi departamento para hacer algunas compras. El sol aún no había salido completamente, y las calles estaban tranquilas. Me gustaba esta hora del día, cuando todo parecía más pacífico.
Mientras caminaba por la calle, escuché a unos hombres hablando en voz baja en una esquina. Su conversación captó mi atención.
— La carrera de este fin de semana va a ser intensa — dijo uno de ellos.
— Sí, he oído que van a participar algunos de los mejores conductores del país — respondió otro.
Me detuve en seco. Una carrera? Eso era algo que no podía perderme.
Me acerqué un poco más, tratando de escuchar más sin llamar la atención.
— ¿Dónde es la carrera? — preguntó otro hombre.
— En el circuito de fuera de la ciudad — respondió el primero. — Va a ser una noche emocionante.
Me sentí un escalofrío de emoción. Tenía que ir a esa carrera.
Regresé a mi departamento y busqué información sobre la carrera en línea. Era una carrera clandestina, sin regulaciones ni seguridad. Exactamente lo que me gustaba.
Llamé a Scott y le dejé un mensaje.
— Scott, necesito que me acompañes a una carrera esta noche — dije. — Es clandestina, pero va a ser emocionante.
Sabía que Scott no podría resistirse a la oportunidad.
Me vestí con ropa cómoda y me preparé para la noche. La adrenalina ya estaba corriendo por mis venas.
Esta noche iba a ser intensa. Y yo estaba lista.
Scott llegó a mi departamento con una expresión seria.
— Daphne, no creo que sea una buena idea ir a una carrera ilegal — dijo, antes de que pudiera siquiera saludarlo.
Me reí y me acerqué a él.
— Vamos, Scott — dije, tomándolo del brazo. — Será divertido. La velocidad es lo que me hace sentir viva.
Scott me miró con escepticismo.
— No es solo la velocidad — dijo. — Es la seguridad. No sabemos qué tipo de personas estarán allí.
Me encogí de hombros.
— Eso es parte de la emoción — dije, sonriendo. — Además, soy una agente entrenada. Puedo cuidarme.
Scott suspiró, pero podía ver la curiosidad en sus ojos.
— ¿Qué es lo que te gusta tanto de la velocidad? — preguntó.
Me pensé por un momento.
— Es la sensación de libertad — dije. — Cuando estoy conduciendo a toda velocidad, nada más importa. Solo el momento.
Scott me miró y sonrió.
— Entiendo — dijo. — Creo que tengo que experimentar eso por mí mismo.
Me reí y lo abracé.
— ¡Genial! — dije. — Vamos a hacerlo.
Scott se rió y me tomó la mano.
— Pero prométeme que serás cuidadosa — dijo.
Le prometí que lo sería, y nos dirigimos hacia el circuito de carreras.
Mientras conducíamos, podía sentir la emoción creciendo dentro de mí. La velocidad corría por mis venas, y sabía que esta noche iba a ser inolvidable.
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A Dangerous Love || Pequeño Don Nadie
AcciónDaphne O'Conner hermanan menor de Brian O'Conner es interrumpida en una misión por la llamada de Don Nadie, esa llamada hace que viaje desde el otro lado del mundo para golpear al pequeño Don Nadie quien rayo su auto