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Me encontraba con Eiji, Kafka y Kikoru.

─Hey, señorita Shiba, escuché que él vice capitan Hoshina ya esta por aqui, ¿No planea irlo a saludar?

Kafka me dirigió la mirada y sentí como empecé a sudar, ni jodiendo.

─¿Narumi dónde está?

─Había ido con algunos miembros de la tropa a ver a él vice capitan al parecer.

─Oh no, esto es malo.

Dijo Eiji con el mismo rostro pero se fue yendo a paso algo acelerado.

Coloque una mano en mi cien y ambos me miraron curiosa.

─¿Por qué es malo _____?

─Ah... Bueno, digamos que porque ambas divisiones comparten territorio en Tokio, en algunos hay ciertas rivalidades....

Me rasque la nuca pero era más que obvio que si Narumi enfrentaba a Soshiro el último nombrado sería el ganador por ser bastante increíble con sus argumentos y palabras.

Y por supuesto que no me equivocaba con lo que decía, ahora me encontraba yendo hacia la sala donde se haría la reunión y varios murmuraba sobre ese suceso donde el gran capitán de la primera división hasta quedó en el suelo agonizando por las palabras

Obvio después de la gran humillacion que se hizo Narumi al tratar de humillar a Soshiro y era más que claro que no le resultó a lo lejos pude ver a Hoshina, que mantenia su mira sobre mi haciandome tensar.

─¿Acaso no saludaste a tu noviecito ____?

Rin se acercó a mi con una sonrisa salgo burlona haciéndome colocar nerviosa.

─¿Noviecito...? No sé de qué hablas.

─El vice capitan de la tercera división, es más que obvio que ustedes tienen una tensión diferente que a los demás.

─¿De rivalidad te refieres?

─Se ve que lo suyo no es rivalidad.

Río un poco y me tense, Hasegawa llegó a nuestro lado pidiendo silencio porque ya iba a comenzar, sentí un ligero escalofrío por mi espalda aún sintiéndome observada.

No esperaba que todo lo que dijo Hoshina en la reunión iría a ser cumplido, si que era exigente.

Terninando la reunión escuché que se irían al parecer de inmediato las demás divisiones.

Sentí como me alguien me abrazo por los hombros y me tense.

─A-ah...

─Tu que si no sabes saludar, bonita.

Me sonrroje por su algo hacia mi y aún más, la cercanía que tenía.

─¿No deberías irte yendo...?

─Soy el vice capitan, yo decido cuando nos largamos de aqui, ¿Acaso no querías encontrarte conmigo?

Vi de reojo como abrió sus ojos haciéndome sentir más tensa, era extraño, de cierto modo daba algo de miedo.

Sentí su agarre más fuerte pero porque saco un brazo para poder entregarme una rosa.

─¿Eh?

─Es para ti, te lo tenía guardado hace bastante tiempo.

Escuché un suspiro relajado de él a la vez que rebuscaba algo en sus bolsillos.

Unos bombones.

Quedé atenta observando sus regalos, sentí mi corazón palpitar un poco por aquella acción.

Inesperadamente mi corazón casi se sale por mi boca al sentir a Soshiro muy cerca de mi cuello y con los ojos bien abiertos.

─¿Cambiaste de perfume? ¿Quien te lo dió? ¿Tan pronto se te acabó el que te compre?

─Eh... Es que, Narumi por accidente lo paso a tirar al suelo y quiso compensarme comprando otro.

Sentí un agarre más fuerte colocándome más tensa, estando en una posición en donde prácticamente no me podía mover y mis mejillas parecian querer estallar junto a mis latidos que iban a mil por hora tal vez.

Sentí una mordida en mi cuello, abrí en grande mis ojos.

─Ug-hg...!

Me queje un poco pero una de sus manos cubrió mi boca para guardar silencio.

Sentía una extraña aura, una vibra diferente y bastante espesa y caliente, me estaba dando calor.

Luego que se alejo de mi cuello me sonrió como lo hacía típicamente soltando una sutil sonrisa.

Me agarre mi cuello sobandolo.

Se acercó a mi y desvíe la mirada mirando a la vez hacia abajo. Él se agachó un poco acercándose a mi oído.

─No lo vuelvas a usar, yo te compraré otro al momento de volvernos a ver, será más pronto de lo que imaginas, ____.

Me dijo con una voz algo... ¿Sexy? Mierda, me causaba algo.

Coloco las manos atrás de su espalda mientras mostraba sus dientes riendo un poco volviendo a ser él mismo de siempre.

Salí de la habitación junto con el atrás, me sentía observada porque caminaba detrás de mi y yo seguía con la mano en mi cuello. Rápidamente quite mi mano de ahí para no verme sospechosa de algo.

Hoshina estaba, extraño, esto fue extraño pero yo no reclamaba en lo absoluto, es que simplemente, ugh, no lo sé.

Bajo tu mira (Soshiro Hoshina X Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora