Lee Felix es un chico que se siente perdido en sus propios problemas. Tras mudarse a Corea por el trabajo de su madre, se enfrenta a un nuevo entorno, dejando atrás su hogar y añorando su antigua vida. Sin embargo, lo que inicialmente parece ser una...
Felix había pasado el resto de la noche despierto, con el corazón agitado y la cabeza llena de pensamientos oscuros. El sueño en el que Hyunjin lo humillaba se había grabado en su mente como si fuera un recuerdo real. Aún sentía el eco de las crueles palabras resonando dentro de él, y aunque intentaba convencerse de que solo había sido un sueño, el dolor seguía ahí, aferrado a su pecho.
Por la mañana, Felix decidió que lo mejor sería ignorar todo. No tenía la energía para enfrentarse a la realidad de lo que sentía ni a las preguntas que podrían surgir si alguien lo veía tan vulnerable. Así que se puso su máscara habitual: la sonrisa que solía usar para protegerse. Tenía que actuar como si todo estuviera bien, aunque por dentro estuviera en caos.
En la escuela, se movió entre las clases como un fantasma, pasando desapercibido, sin acercarse demasiado a nadie. Incluso evitó a Hyunjin, cosa que no pasó desapercibida para el chico.
Hyunjin lo notó casi de inmediato. Felix no estaba siendo él mismo. El día anterior había estado más distante de lo normal, y ahora, aunque intentaba actuar con normalidad, Hyunjin sentía que algo no encajaba. Había una tensión en los gestos de Felix, una especie de inquietud en sus movimientos. Estaba sonriendo, sí, pero no de la forma en que lo hacía cuando estaba realmente bien.
—¿Todo bien, Felix? —Hyunjin le preguntó durante la pausa entre clases, acercándose con su típica confianza, aunque había una pizca de preocupación en su voz.
Felix levantó la vista y lo miró, y por un segundo su fachada se tambaleó. El rostro de Hyunjin, tan cerca, le recordó el sueño de la noche anterior, y el miedo volvió a surgir, ahogándolo. ¿Y si Hyunjin realmente llegara a verlo de esa manera? ¿Y si, al descubrir lo que en realidad le pasaba, lo rechazaba tal como en el sueño?
—Sí, todo bien. Solo estoy un poco cansado —mintió Felix, desviando la mirada.
Hyunjin frunció el ceño, sin creerle del todo, pero tampoco queriendo presionarlo. Felix siempre había sido reservado, y Hyunjin no quería asustarlo con preguntas directas. Sin embargo, su intuición le decía que algo andaba muy mal.
La tensión entre ellos se mantuvo durante el resto del día. Aunque compartieron las clases y momentos juntos, Felix evitaba cualquier tipo de conversación profunda, manteniéndose a la defensiva. Pero lo peor vino después de clases.
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Felix había planeado ir directamente a casa, pero el peso de todo lo que estaba sintiendo lo desbordó cuando llegó al baño de la escuela, un lugar donde sabía que podría estar solo por un momento. Cerró la puerta del cubículo y se apoyó contra la pared, respirando rápidamente. El ataque de ansiedad lo golpeó con fuerza.
Su mente se llenó de pensamientos incontrolables. Las imágenes del sueño volvieron a su cabeza: Hyunjin riéndose de él, mirándolo con desprecio, llamándolo "patético" y "roto". El miedo de que algo así pudiera suceder en la vida real lo asfixiaba. Sus manos comenzaron a temblar, y el nudo en su estómago se hizo insoportable.
