Electric love

13-Celos

Desde que Lena cumplió 17 años, se había dado cuenta de que ser bonita, tener dinero y carisma le había abierto muchas puertas. Entre ellas, la oportunidad de lanzar su banda al estrellato, lo que le generó una enorme confianza en sí misma. Siempre conseguía lo que quería, claro, aunque la mayoría de esas cosas eran meramente superficiales y servían para alimentar su ego: coches, casas, chicas atractivas, fiestas extravagantes, contratos y acuerdos de publicidad con marcas prestigiosas. Todo eso la hacía sentir invencible.

Pero los últimos días se había sentido insegura de si misma, no quería admitirlo pero la causante era cierta rubia, Sabía que su publicista, Kara, era irritante, cálida, explosiva, tierna y, por supuesto, heterosexual, aunque este último detalle no le importaba demasiado. Ya había logrado que varias mujeres heterosexuales se acostaran con ella. Además, Kara le había dado un pequeño beso una vez... aunque bueno, estaba ebria. Lena solía molestarla con ese episodio, pero Kara siempre lo negaba, diciendo que no se acordaba y que nunca había pasado.

Cuando Sam fue a su cuarto a contarle que Kara y Mon-el habían salido a  cenar, Esa noticia solo avivó más sus inseguridades, provocando que la duda y el temor que había intentado ignorar se hicieran más fuertes.

-¿Sabes a dónde fueron? -preguntó Lena, parada al final de la cama.

-No, solo me enteré porque Andrea me lo contó -dijo Sam con gesto despreocupado, recostada en la cama.

-Si vas a venir a contarme algo, avísame con detalles completos: dirección, hora, fecha...

-¿Para qué quieres saber todo eso? No es como si fueras a ir -respondió Sam, sin saber que acababa de darle a Lena una idea .

-Averigua a dónde fueron a cenar esos dos, mientras tanto, voy a alistarme.

-¿Vas a rescatar a tu "amiga" de las garras de Mon-El?

-Ella no es mi amiga.

-Oh, claro. No puede ser tu amiga porque tú quieres que sea tu novia -Sam la miró burlona-. No encuentro otra razón para que vayas a esa cita.

-Molestarla es parte de mi outfit -respondió Lena con un tono serio-. No puede andar por ahí coqueteando con otros hombres. ¡Ella me besó!

-Eso no significa que estén en una relación. De hecho, tú nunca has tenido una.

-Y tampoco quiero una relación. Solo no quiero que esté con Mon-El.

-Sabes que si apareces sola en el restaurante, vas a parecer una desesperada.

-Buen punto. Alístate, Sam. Vamos a cenar, yo invito.

-No, gracias. Estoy saliendo con alguien. Consíguete a otra -dijo Sam mientras se levantaba de la cama y se dirigía a la puerta-. Te paso la dirección por mensaje cuando sepa dónde están.

Las letras de AL'S DIVE iluminaban el restaurante. Era un lugar gourmet conociendo a Mon-El, Lena habría apostado que la llevaría a comer a un McDonald's, pero parece que se esforzó. Al ser un lugar elegante, Lena se vio obligada a ponerse un vestido rojo que se ajustaba perfectamente a su cuerpo. A su lado, Eve, con un vestido negro que resaltaba su sonrisa radiante, una sonrisa que no había perdido desde que Lena le dijo que la invitaría a cenar.

-No pensé que me llamarías después de aquella noche

Lena solo sonrió y la tomó del brazo mientras entraban al restaurante.

-¿Separaste mesa para esta cena? -preguntó Eve con un toque de ilusión.

-Oh, sí. Vamos a comer en una mesa muy especial -dijo Lena mientras alzaba la mirada para buscar a Kara y Mon-El, a quienes encontró a tres mesas de distancia, inmersos en su conversación. Cuando jaló a Eve hacia su mesa, los dos se sorprendieron al verlas.