Spring [Jinx]

❁ XXIX ❁

Tal como nos había indicado el obstetra asistimos una semana después para saber si esta vez era la definitiva.

—Lo siento, es negativo —me entregó los resultados, mi corazón se quebró, un vacío en mi estómago me encogió, Jaekyung apretó mi mano, ahí iba.

—La siguiente será, cariño.

¿Cuánto tiempo tendría que pasar para poder concebir?, mi útero ya era del tamaño adecuado, mis hormonas ya estaban en niveles correspondientes, entonces, ¿qué estaba pasando? Las lágrimas corrieron, me atrajo hacia él y trató de consolarme, su pulgar recogía las lágrimas mientras regalaba besos sobre mi coronilla.

—Comprendo la desilusión, pero así es este proceso, todo se basa en probabilidades, tal vez tu cuerpo aún no está preparado, pero no pierdan la esperanza, este proceso es atareado, tranquilos —nos sonrió y me aparte de Jaekyung, limpie el resto de lágrimas—, deben tener mucho cuidado en este proceso y les recomendaría asistir a terapia, sino podrías desarrollar un embarazo psicológico, Dan, debes tomar esto con calma y no desesperar esto no significa que te des por vencido al contrario cuando menos lo esperes estarás en cinta.

—¿Asistir a terapia? —asintió.

—Necesitan con quien desahogar lo que sienten, sus preocupaciones y sus miedos, alguien que les ayude a regular sus sentimientos.

—Lo tomaremos en cuenta, gracias —nos sonrió y nos fuimos del lugar, la emoción de melancolía no cedió, y así se mantuvo por un tiempo.

༻❁༺

—Dan...

—Ahora no, Jaekyung, mañana trabajamos —me cubrí con la sabana y me hice ovillo, me abrazó por detrás.

—Estoy contigo, no lo olvides, tu dolor es mi dolor, tu desilusión es mía —beso mi cuello y no dijo nada más, las lágrimas empaparon mis mejillas, acaricie sus brazos y me aprete contra su pecho, no dijo nada, pero ajustó su abrazo.

—Estoy asustado —dije por fin.

—Yo también lo estoy cariño, pero aquí estoy, sabes que puedes hablar conmigo, siempre te voy a escuchar —acariciaba mi cabello—, siempre te he hecho saber que si ya no quieres seguir puedes decírmelo, nada cambiará entre nosotros, pero por favor no me hagas esto, no me alejes.

Me giré y lo abracé enterrando mi rostro en su pecho.

—Lo siento...—me rompí.

—Yo también, no debí presionarte —beso mi coronilla, negué con suavidad.

—No me has presionado... es sólo que siento que no soy suficiente.

—No digas eso, eres perfecto para mi si el embarazarnos no está en nuestro destino no cambia nada porque sé que siempre te tendré a ti y con eso estoy satisfecho, no puedo pedir más.

Solloce y nos quedamos en silencio hasta que nos quedamos dormidos.

༻❁༺

Aún después de esa plática decidimos descansar un poco y como habíamos prometido nada cambió.

—El desayuno está servido —dije al pie de las escaleras, escuché sus pasos provenientes del cuarto.

—Bajo en un minuto, cariño.

Fui a acomodar la mesa cuando apareció frente a mí.

—Siéntate, cielo.

—No me siento muy bien —suspiro tomando asiento.