Capitulo 9: Sabores pt 2

223 31 0
                                        

✨Recomendación de canción ✨
Sweater Weather - The Neighborhood

Satoru 🩵

La brisa suave de la tarde acariciaba la playa mientras caminábamos juntos. El sol apenas comenzaba a bajar, tiñendo el cielo de un cálido naranja, pero lo único que podía ver era a Suguru. Cada palabra suya, cada sonrisa, era como un imán que me mantenía pegado a él.

Nos habíamos quedado enredados en una conversación que ya ni siquiera recordaba cómo había comenzado, pero tampoco importaba. Todo lo que me rodeaba se desvanecía cuando él reía, y en esos instantes, el mundo parecía ser solo nuestro.

—¿Y entonces qué pasó después? —preguntó Suguru, inclinando la cabeza con esa expresión curiosa que me volvía loco.

—Bueno, digamos que... terminé cayendo de la silla, todo por querer impresionar a Nanami —reí, sintiendo mis mejillas enrojecer al recordar el bochornoso incidente. Pero el calor en mi rostro no era solo por la historia, sino por la cercanía de  mi precioso chico, que me miraba con esos ojos profundos, llenos de una mezcla de diversión y algo más que no podía descifrar del todo.

Suguru soltó una carcajada, esa risa cálida y contagiosa que hacía que mi corazón latiera un poco más rápido. Y sin darme cuenta, mientras hablábamos, nuestras manos se encontraron. Al principio, fue un gesto casi casual, como si nuestros dedos hubieran decidido encontrarse por su cuenta, pero cuando me di cuenta de que estaba sosteniendo su mano, el simple contacto me hizo estremecer. No solté su mano, y tampoco él pareció tener intención de hacerlo. Nos quedamos así, en silencio por un momento, con nuestros dedos entrelazados.

—¿Te das cuenta de que ya llegamos? —me dijo Suguru, señalando la playa con una ligera sonrisa en los labios.

Me giré sorprendido, apenas percatándome de que, efectivamente, ya estábamos junto al mar. Las olas rompían suavemente contra la orilla, y los demás ya estaban empezando a organizarse para las actividades que habíamos planeado.

Shoko estaba charlando con Mei Mei, mientras Nanami y Megumi discutían algo con Utahime, probablemente sobre cómo organizar los equipos para el juego de voleibol que era un actividad ya planeada.

—¿Ya llegamos? —pregunté, medio en broma, mirando a mi panadero favorito como si él hubiera sido el culpable de que no me diera cuenta de nada más. Pero la verdad es que solo me había perdido en él.

Como siempre.

Sonrió de lado, un poco tímido, y me apretó la mano antes de soltarla, aunque en su mirada había algo que me decía que él tampoco había querido romper el contacto.

Nos acercamos al grupo y Nanami, siempre tan práctico, comenzó a darnos instrucciones.

—Ok, si vamos a hacer esto, necesitamos equipos. ¿Quién va a estar en el equipo de voleibol? —preguntó, cruzándose de brazos.

— Yo estoy dentro — Hablo Megumi.

—Yo no juego a eso —dijo Mei Mei, riendo suavemente—Pero puedo animar desde la sombra.

—Qué sorpresa —murmuró Utahime con una sonrisa irónica, pero su tono era más juguetón que molesto.

—Suguru y yo estamos dentro —dije rápidamente, mirándolo de reojo para ver su reacción.

Él asintió con una sonrisa leve, aunque era obvio que lo había arrastrado a mi plan.

—Claro, claro —dijo Shoko, lanzando una mirada cómplice hacia Suguru y luego hacia mí— Pero deben jugar o acaso se darán mimos todo el rato?.

Me reí, pero sentí el calor subir de nuevo a mis mejillas. Suguru también rió, pero apartó la mirada, tratando de esconder su propio sonrojo. Era como si, aunque estuviéramos rodeados de amigos, una parte de nosotros seguía atrapada en esa burbuja donde solo existíamos él y yo.

 𝓗𝓪𝓷𝓷𝓪  -  𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐧𝐨𝐭𝐚𝐬 𝐲 𝐬𝐚𝐛𝐨𝐫𝐞𝐬 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora