Pensé que al fin el amor me había sonreído, aquel hombre de pecas y sonrisa encantadora me daba la oportunidad de cortejarlo, o al menos eso pensé.
Lo llene de regalos y atenciones sabía que los necesitaba acababa de romper una relación de más de 6 años con su novio el nerlandes Max Verstappen.
Uno de los nuevos debutantes en este deporte donde yo era el rey. Antes de que se involucraran románticamente, Sergio y yo teníamos una bonita amistad pero se terminó cuando Max le pidió ser su novio y se volvió posesivo con Sergio.
Hay días en que lo veía triste, sus sonrisas se habían apagado quería ayudarlo pero Sergio siempre dijo que todo estaba bien y que no me preocupara.
Un día llegó llorando hasta mi MotorHome buscando consuelo ya que había encontrado a su amado Max con dos chicas en la cama y al confrontarlo Max solo se había reído en su cara y lo había echado.
Lloro en mis brazos mientras lo consolaba, los días pasaron y Max busco con insistencia a Sergio pero no pudo hablar ya que yo se lo impedi. Amaba a ese ser tan hermoso, daría mi vida por el si era necesario, pero la luna de miel duró poco ya que Sergio comenzó a cambiar de un día para otro.
Se volvió distante y a veces no llegaba a nuestras citas, ponía muchos pretextos para vernos y nunca me dejaba ir a su departamento.
Mientras caminaba por el Paddock oí a unas chicas de Redbull hablar de Sergio, una le decía que Max andaba muy misterioso esos últimos días y al igual Sergio. Se rumoreaba que habían regresado hacia unas semanas y que tenían planes de boda.
No lo crei debía escuchar con mis propios oídos de la boca de Sergio que había regresado con Max, como podía después de lo que le había hecho. Maneje hasta el departamento de Sergio y cuando toque la puerta un semi desnudo Max me abrió la puerta, quedé en shock y mi sorpresa fue mayúscula cuando vi como Sergio se acercaba a Max vistiendo solo una camisa que al parecer era de Verstappen, su cuello era un lienzo donde estaban marcadas mordidas de dientes, se acercó a Max y lo abrazo.
Que haces aquí? - Me pregunto y no supe que responder solo los mire con odio habían jugado con mis sentimientos, quería borrar esa risa burlona que Max tenía en su rostro cuando azotó la puerta del departamento en mi cara.
Después tuve que soportar sus demostraciones de amor, paseaban de la mano por todo el Paddock y siempre que Max me veía besaba apasionadamente a Sergio sin dejar de mirarme.
Quise hablar con Sergio pero el nunca me dio la oportunidad de decirle como me hacía sentir que hubiera jugado con mis sentimientos. Lo cínico de Verstappen se le había contagiado ya que me dijo que el jamás sintió nada por mi y que todo lo que yo había hecho por el nunca me lo había pedido y que lo dejara de molestar.
No dejaría que se saliera con la suya y en un arrebato de celos lo bese a la fuerza recibiendo un puñetazo en la cara de parte de Max y la amenaza de que me mataría si volvía a tocar a su novio. Me concentre tanto en el odio que sentía por ellos que ese año perdí el campeonato y me lo arrebato ese jodido nerlandes.
El año siguiente anunciaron su boda y la futura paternidad de Max, todos se volvieron locos al conocer la noticia el primer bebé de Redbull, maldije mi suerte. Los vi vivir su amor sin preocupaciones, vi como se unian en matrimonio y como a casi finales de temporada se convertían en padres y de nuevo Max en campeón del mundo.
Esta vez sería la última vez que confiaría mi corazón a alguien, tal vez sería campeón en el deporte pero un fracasado en el amor.
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