B e y o n d ! No Straight Roads!

A Voces! (XXX)

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'' Máscara de Toxinas ''
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En la mañana del día siguiente, se oía el dulce cantó de trio del soneto, quienes se encontraban afinando y practicando una de las ideas de Ligya. Realizar un "ostinato"* a la canción que crearon con la letra de Rhea.

(Ostinato*: cuando en una sola cancion se repiten ciertas partes sucesivas como un eco. Por ej: "señales de transito" de con arte y con parte.)

Ligya cantaría como guía, mientras Rhea y Metztli eran su eco. Rhea se le complicaba un poco desfazar la canción, por lo que Ligya le chistó más de una vez repitiendo de nuevo toda la canción.

-Aaah... -suspiro Rhea, bajando la cabeza.
-¡Uuugh! ¡Rhea no puede ser que esta sea la quinta vez que te pierdes!-reclamo, Ligya.

-Bueno, pero avanzamos desde la parte anterior...-menciono, con una voz que intentaba sonar optimista, pero engullida sabiendo la respuesta.
-De "bueno" no tiene nada, Rhea.-se acerco, con una severa mirada a la rapera quién cerro los ojos pensando lo peor.

-Grrr... Dale cinco minutos.-gruñó, Metztli interponiendose entre ella y la Lider.
-¿Cinco minutos? ¿Te parece que con estos fallos se merece un descanso?-expreso absurdez, cara a cara con Metztli.

-Un descanso no debería estar condicionado por un fallo, el ostinato fue tu idea, y esta es la primera vez que lo ensayamos. Asi que deja de echarle la culpa de todo.-sentencio, a la vez que rodeo a Rhea con su brazo. Yendo a la cocina.-Ven, tomemos algo Rhea.

-¿Cómo estás?-pregunto a la menor, mientras le servía un vaso de agua.
-¿Quién sabe?... Neutral, pana.-expreso, sin su gorra, con su cabeza a un lado y sus ojos caidos, como uno creeria, siempre estuvieron.

-Mmh, ya...-asintio. La observo beber un poco de agua, con alguna memoria de que esto ya paso.
-¿Qué pasa?-cuestiono, ante la mirada fija de Metztli.

-Te veo. Como has crecido y cambiado.-le tomo por las mejillas, acomodando con las puntas de sus uñas sus rastas, y recorriendo los surcos de su rostro.-Te amo mucho, Rhea.
-E-Eh...-se exalto, ante las raras palabras de afecto.

-Ay, ¿qué? ¿Dije algo malo?-se aparto, palmando a penas su cabeza.
-N-No, es que... Hace mucho no lo expresabas así...-jugueteo con una de las anillas de sus rastas.-Como me fui... Pensé...

-Yo comprendo.-nego, Metztli suponiendo lo que su compañera quería decirle.-Solo quiero recordarte lo genial y chimba que eres, tan hábil, tan pro en la música. Como tú no hay nadie, Rhea. Sin ti no seriamos nada, hazme caso.-insistio, con una sonrisa sutil. Las pupilas de Rhea se recompusieron, junto al brillo de sus ojos y una expresión tranquila.
-Ave María... Jmjm, esta bien.

-Te mereces lo mejor, ¿eh? Asi que contestale a Zam la proxima.-se molesto en recordarle.
-¿Mmh? ¿Pa' que? Pensé que te caía mal...

-Tsk, ay Rhea, sabes que no es por eso... Cualquiera que te mire feo puede caerme mal, pero... Veo que el te hace bien.-admitio, y le tomo del hombro zarandeandola un poco.-Y yo seré feliz si tu lo estás.
-Gracias, pana... Aun que no se bien que decirle...-dubito.

-Pues llega y dile que sientes, si tu quieres seguir o si el camino termina allí.-hizo el ademán con su mano.
-Claro...-asintio, a medias.

Mientras tanto Ligya subió a su habitación, revisando su pequeña e improvisada libreta, la cual arrojo contra la pared murmurando maldiciones a un tal "mago". Sostuvo su cabeza clavando sus cortas uñas en su cuero cabelludo, escaneando con sus ojos por algo a su alrededor.