❛13. El destino❜

711 145 7
                                    

Estaban de regreso en el palacio, un lugar que se había convertido en un torbellino de emociones desde su llegada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




Estaban de regreso en el palacio, un lugar que se había convertido en un torbellino de emociones desde su llegada. Nadie en la corte del rey anticipó que el protegido de los reyes traería consigo a un niño, y aunque muchos se opusieron, los monarcas mostraron una sorprendente amabilidad al escuchar la explicación de Percy. La resistencia del joven era tan palpable que, al ver su renuencia a soltar al pequeño, decidieron permitir que se quedara.

Desde aquel momento, Percy no se había separado de Bemus, permitiendo que solo Livia se acercara para bañar al niño, temiendo que la cercanía de otros lo asustara aún más. Helena, siempre traviesa, había comentado con una sonrisa que iluminaba su rostro: "Mi dulce primo colecciona niños como si fueran trofeos", lo que hizo que la tensión en el ambiente se disipara un poco.

Troilo también se encontraba en su habitación, observando hacia el baño con una expresión preocupada mientras apretaba con fuerza su caballito de madera entre sus manos. El semblante del pequeño evocaba la inquietud del mar antes de una tormenta, y Percy sintió que debía tranquilizarse para que Troilo pudiera encontrar su calma.

—Lucero, cálmate, mi niño. Ya verás que Bemus estará bien —dijo, extendiendo sus brazos en una invitación para que el niño se acercara y se recostara en la cómoda silla.

Troilo se acercó rápidamente, dejándose alzar en el regazo de Percy con la confianza de quien sabe que está en brazos de su protector. Se acurrucó en su pecho, como si buscara refugio de un mundo que a veces podía ser abrumador. Percy sonrió con cariño al ver este gesto, acariciando su cabeza y tarareando una melodía suave, un canto que buscaba arrullar tanto a su pequeño como a su propio corazón.

—Mamá —susurró Troilo, su voz tierna provocando que Percy lo mirara hacia abajo, sintiendo un pinchazo de preocupación al ver el miedo en su rostro.

—¿Ya no me querrás? —preguntó, su voz temblorosa como el aleteo de una mariposa herida.

La respiración de Percy se detuvo por un instante, sus ojos se abrieron con sorpresa al escuchar esas palabras, que se hundieron en su corazón como una piedra en el fondo de un abismo. Pero el pequeño, en su inocencia, continuó hablando sin reparar en el asombro de Percy.

—Filón y Milón dijeron que desde que nació su hermano, su mamá ya no les hace caso —dijo, sollozando mientras recordaba las palabras de sus amigos, quienes no comprendían la naturaleza del amor que una madre puede ofrecer—. Yo no quiero que mamá me deje...

El hijo de Poseidón pestañeó, intentando procesar el torrente de emociones que surgía en el pequeño. Una sonrisa involuntaria emergió en su rostro, no sin antes sentir una punzada de ternura por la fragilidad de Troilo. La celosía que brotaba del niño era natural en su condición de ser amado por todos, un niño mimado por su familia y por el mismo Percy, quien había asumido el rol de protector y figura materna en su vida.

Troilo lo había rodeado con sus pequeños brazos, escondiendo su rostro en el cuello de Percy, quien suspiró, sintiendo una oleada de calma al acariciar la espalda del niño con dulzura. A través de la ventana, el atardecer comenzaba a desplegar su manto de colores, y, sintiendo la necesidad de un cambio de perspectiva, se enderezó para caminar hacia la terraza de su habitación.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 19 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

❝ Ocean's eyes. ❞             ⋆.ೃ࿔*:・❪ Percy JacksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora