Capítulo 13

25 3 1
                                    

Poppy mostró un rostro de comprensión ante las palabras de la azabache antes de responder.—Branchifer, no me importa si eres Perséfone, la famosa y única cantante femenina de la banda Kismet, o si eres la alumna favorita de los maestros que se sienta a mi lado y me explica los temas cuando no entiendo o me comparte la tarea cuando olvido hacerlo. Ante mis ojos eres Branch, eres la chica que amo con todo mi ser por defender a los que amas, por esas respuestas sarcásticas y astutas, entre otras cosas que me encantan de ti. La forma en la que te trato no va a cambiar porque uses un antifaz, porque seas famosa o por atuendos extravagantes. Te amo a ti, sin importar qué.—Declaró.

Branch alzó ambas cejas, sorprendida, su rostro completamente sonrojado, y su boca entreabierta. La azabache tragó nerviosamente antes de atreverse a hablar.

—¿Tú...me...amas?—Preguntó con incredulidad.

Poppy sonrió enternecido por la reacción de la azabache.—¡Por supuesto que te amo! Y no hablo únicamente en un sentido amistoso. También te amo en un sentido romántico.—Confesó. Poppy comenzó a sonrojarse y miró nervioso hacia el suelo, llevando una mano a su nuca.—Si te soy honesto, esa también fue una gran razón por la cual te estuve evitando. Me sentí celoso de la conexión que tú y Hype compartían en ese escenario. Además, Perséfone y Poseidón son los que más shipean en el fandom... así que... no sé... mi comportamiento fue tonto, lo sé y lo admito. Pero la idea de perderte ante alguien más sin que yo tuviese la oportunidad de expresar mis sentimientos... —Poppy pausó, negando con la cabeza y soltando un suspiro.—Perdón si mis celos casi me hacen perderte de verdad. Hype ya me explicó todo. Y Branch, el hecho de que te esté confesando mis sentimientos no significa que estés obligada a sentir lo mismo o a confesarte solo porque yo lo hice. Si sientes lo mismo, sé que me lo dirás cuando estés lista. Y si no... igual lo entenderé. Lo importante es que seas feliz.

Branch se encontraba en un conflicto interno, dividida entre confesar su amor por Poppy y dejar que las dudas y inseguridades la silenciaran. Una parte de ella clamaba por revelar sus sentimientos, pero otra parte la retuvo.

La azabache soltó un suspiro y le enseñó una pequeña sonrisa al chico de ojos magenta.—Gracias.—Susurró, incapaz de decir algo más.

Poppy devolvió la sonrisa y se levantó del suelo para después extenderle su mano a la chica.—Vamos, estoy seguro de que los demás se estarán preguntando dónde estamos.

Branch tomó la mano de Poppy y comenzaron a caminar rumbo a la cafetería, donde efectivamente todo su grupo de amigos los esperaba.

—Branch.—Llamó Poppy antes de llegar a su destino.

—¿Sí?—Respondió la azabache.

—Necesito que asistas al concurso de talentos el viernes, por favor. Yo... tengo una sorpresa para ti.—Dijo el chico, con una sonrisa misteriosa.

—¿Una sorpresa?—Preguntó Branch con interés, alzando una ceja mientras intentaba suprimir una sonrisa de emoción.

Poppy asintió con la cabeza y, con su mano, pretendió pasar un cierre sobre sus labios, indicando que sus labios estaban sellados.

La azabache negó con la cabeza divertida, pero no dijo nada más. Continuaron su camino a la cafetería en un cómodo silencio. Al llegar, todos en la mesa sonrieron al verlos llegar juntos, aliviados de que las cosas entre el par finalmente se hubiesen solucionado.

—¡Por fin!—Exclamó Creek.

—¡Las cosas han vuelto a la normalidad!—Celebró Smidge, feliz de descansar del drama entre sus amigos.

El resto de la hora, el snack pack lo disfrutaron entre bromas y pláticas entretenidas.

***************

Las cosas entre Poppy y Branch habían mejorado para bien. Ahora que ya no sentía el peso de mentirle al chico acerca de su doble identidad, Branch se sentía liberada. La sensación de alivio y tranquilidad inundaba su ser. Durante tanto tiempo había vivido con el miedo de que la verdad saliera a la luz y de la reacción de Poppy al descubrir que ella era Perséfone.

Pero ahora, al ver la aceptación y el amor en esos ojos magenta, Branch se sentía libre. Aunque una parte de ella se seguía sintiendo culpable por no decirle la verdad a todos sus amigos, la relación con Poppy había cambiado. El chico se acercaba más de lo usual a ella, y Branch podía apreciar en su totalidad cómo sus manos encajaban a la perfección, como si el destino lo hubiera querido así.

La presencia de Poppy iluminaba sus días, y Branch se sentía afortunada de tener a alguien que la amara por quién era, sin condicion alguna. La sensación de ser amada incondicionalmente la llenaba de ganas de gritarle al chico que ella sentía lo mismo, pero algo interno en la azabache se lo impedía.

Con solo dos días para el concurso de canto, los nervios y la emoción de Branch aumentaban. ¿Qué sorpresa tramaba Poppy?

Pero por ahora, debía enfocarse en sus obligaciones con la banda. Siguió a la hija de su manager a través del lugar en el que Kismet se presentaría al final del mes, intentando dejar de pensar en Poppy y su sorpresa.

—Presten atención.—Dijo Flora, la hija del manager de Kismet, Michael, con una voz clara y autoritaria.—Mi padre fue a recoger a la banda de Rock, así que voy a necesitar que se comporten cuando los conozcan. ¿Entendido?—El grupo de Kismet asintió de manera obediente.

Trickee levantó la mano para hacer una pregunta. Flora lo vio con la ceja alzada, pero le dio permiso de hablar.

—¿Tendremos que usar máscaras alrededor de ellos? —Preguntó el chico.

Flora negó con la cabeza.—Mi padre los ha hecho firmar un contrato de confidencialidad, así que no tienen de que preocuparse. Pueden dejar a sus rostros respirar durante los ensayos junto a ellos. Sus identidades están a salvo, al menos que esa banda de rock quiera meterse en problemas.

—¿Cómo se llama la banda? —Preguntó Branch con curiosidad.

Flora sonrió.—Rock Unity. Espera a escucharlos, son realmente buenos, aunque no mejor que ustedes, obviamente.—Dijo guiñando un ojo en dirección de Ablaze. El pelirrojo bajó la vista al suelo. Flora se rió.—Si no hay más dudas, los veré en un rato. El coreógrafo y los músicos ya tienen su lista de canciones para el concierto, así que no tarden en pararse en el escenario para comenzar a ensayar.—Terminó de decir la chica antes de caminar lejos de Kismet.

Una vez que Flora se alejó, Hype miró a Ablaze con una sonrisa pícara. El pelirrojo se encontraba ligeramente sonrojado.

—Hermano, si sigues babeando así por Flora, nos vas a babear a todos y eso sería asqueroso.—Dijo Hype con una risa contenida.

El resto de Kismet trató de suprimir las risas, pero no pudo evitar algunos resquicios de sonrisas. Ablaze, por su parte, frunció el ceño y le dio un golpe en la cabeza a Hype.

—¡Cállate!—Le reclamó.—No sabes de lo que hablas. Mejor vamos a ensayar antes de que salgan más tonterías de tu boca.

La advertencia de Ablaze fue inútil. El resto de Kismet estalló en carcajadas, incapaz de seguir suprimiendo las risas. Ablaze simplemente giró los ojos, sacudiendo la cabeza.

—Vamos.—Insistió el pelirrojo, comenzando a caminar en dirección al escenario.

El resto de la banda siguió a Ablaze con grandes sonrisas en sus rostros, aún riendo por el comentario de Hype.

Kismet subió al escenario, listos para ensayar para su próximo gran concierto. La emoción y la energía vibraban en el aire, incluso en un día de ensayos.

La pasión de la banda por su música era contagiosa. Desde los ensayos, Kismet demostraba un compromiso y dedicación que su staff apreciaba enormemente. Pero no solo era su talento lo que los hacía especiales, sino también su corazón. Todos los miembros de Kismet eran buenas personas, siempre dispuestas a ayudar y apoyar a su equipo de trabajo.

Este ambiente positivo se extendía también a sus fans, a quienes trataban con respeto y cariño. Kismet había construido una relación única con su público, basada en la autenticidad y la pasión. Y su staff estaba agradecido de ser parte de este equipo, libre de pretensiones y egos inflados.

Sinfonía de Secretos (Trolls Human Genderbend AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora