Life in the races| |Lando Norris, Lewis Hamilton

•Unforgettable, Cap 39•

—Es algo complicado en realidad...
—¿porque?
—Es que Lando fue... todo para mi, también estaba comprometida con el pero mi ex mejor amiga me traicionó besándolo...
—O sea que aun no lo olvidas.
—Te digo que es complicado, según yo ya lo superé pero todo me recuerda a el... el otro día soñé con el.— Camila estaba haciéndome señas de que alguien mas estaba escuchando en la puerta pero no lo había visto hasta que acabé de hablar.

—¿Con quién soñaste?—voltee y cuando vi a Lando un escalofrío recorrió mi cuerpo.

—¿Qué hacen aquí?
—Lando quería saber como estabas...
—Mínimo toquen.
—Lo siento, no sabía que estaría Nat contigo.
—Mmm...bueno yo ya tengo que irme—Salí de la habitación algo apresurada y detrás de mi me seguía Lando.

—Espera Nat.
—no deberías seguirme.
— Y tú no deberías desaparecer de la nada.
—Lo siento ¿okey? Pero ahora mi prioridad no eres exactamente tu.
—¿Es Lewis?
—No.
—¿Entonces...?—baje la mirada y trague saliva. —Oh no... mierda Nat...¿Cuantos meses?
—Como tres meses mas o menos.—Lando hizo una expresión de tristeza.

—Entiendo... por eso estas fuera de las carreras ¿Verdad? Para no cometer el mismo error que con nuestro bebé.
—Era peligroso, además si estaba completamente segura de que si estaba embarazada porque si fue planeado.—
—Se que tu nunca soñaste con ser madre pero... que bueno que alguien te pudo dar lo que yo no.
—Lando no...— Tome su mejilla suavemente y lo mire a los ojos. —Si pudiste darme la posibilidad de una familia, pero fue mi culpa el que no se lograra...
—Es mejor no buscar culpables, tu no lo sabías.-

Me acerqué a Lando para darle un abrazo y pude oler ese perfume que tanto me encantaba, me quedé un momento mas en sus brazos oliendo ese perfume hasta que el se separó lentamente pero nunca soltó mis brazos.

—¿Me permitirías estar en tu vida de nuevo?
—Solo amigos ¿verdad?
—No prometo nada...—lo mire algo extrañada, pero en realidad sentí muchas mariposas en el estómago. —Es broma, te prometo que al menos trataré de respetar lo tuyo con Lewis.—Ambos reímos un poco pero estaba ligeramente decepcionada.

—¿Natalia? ¿Lando?
—Charles, no es lo que parece.
—Hace un momento te estabas comiendo con Lewis y ahora estas muy cerca de Lando.—Lando y yo dimos un pequeño paso hacia atrás y me puse algo roja de la pena.

—Charles, ¿no quieres gritarlo?
—Perdón, es solo que no los entiendo.
—Obvio que no...—murmure.
—Escucha Charles, entre ella y yo no pasara nada, solo seremos amigos.
—Bueno... solo quiero que ambos respeten a Lewis.
—También Lewis debería respetarme.
—Lo de Sam fue hace mucho, y se supone que ya no habían hablado.
—Si, así como ya hablamos lo de Lando...—Charles levantó las cejas y suspiró.

—Bien, ni se porque me meto...¿Camila está despierta?
—Si pero no esta sola...
—Esta con Carlos.
—Okey...creo que volveré después.—Charles se dio la vuelta y se fue dejándonos Lando y a mi nuevamente solos.

—Eso no es cierto.
—¿Qué cosa?
—Lo que dijo Charles, no me estaba comiendo con Lewis.
—De acuerdo...
—Em... bueno ya debería irme.
—Esta bien, con cuidado...—Ambos nos sonreímos y me regresé al estacionamiento en donde estaba estacionado el coche.

Ya en el coche me quedé procesando las cosas por un momento, pude sentir que mi corazón estaba latiendo realmente rápido, luego de poco tiempo ya me dirigía al hotel.

Lewis aun seguía dormido así que tire la nota y me recosté a su lado, lo mire hasta quedarme dormida.

Y así pasaron un par de carreras no seguidas, y las cosas parecían ir bien entre Lando y yo, aunque llegaba a ser un poco incomodo pero fuera de que ambos nos echábamos miraditas y  de vez en cuando coqueteábamos de broma.

Estábamos en Italia, acababa de pasar el gp de Monza.

—Estas segura de que no quieres ir...?
—Si quiero, pero el domingo es la cita con el doctor, por fin vamos a saber si es niña o niño.
—No puedo creer que no estaré aquí para verlo...
—No te preocupes, te mandaré fotos y cuando regreses te prepararé una sorpresa para que sepas su genero.—Lewis me regaló una dulce sonrisa y me beso la mejilla.

—De acuerdo, ya tengo que irme...el vuelo sale en poco tiempo.—Asentí con la cabeza y sonreí.

Esos dos días estuve demasiado aburrida, a pesar de que Lewis me hablaba cada que podía, estar en casa no era exactamente lo que mas quería. Finalmente llegó domingo, el día de la carrera y el día que sabría si sería niño o niña.
La carrera en Bélgica ya había empezado y de camino al medico yo estaba viendo la carrera en mi teléfono, Lewis le acababa de quitar a George la P1, tuve la fortuna de ver el rebase cuando el semáforo estaba en rojo, pero al ponerse en verde no tuve mucha suerte ya que un auto se pasó el alto y hubo un choque terrible, me chocó en mi puerta y a mi lado había otro coche por lo que había quedado atrapada entre ambos coches. Estuve inconsciente por no se cuanto tiempo pero el ruido de la ambulancia y las personas desesperadas por la situación hizo que abriera un poco los ojos pero tenía heridas por todas partes, estaba perdiendo mucha sangre y no lograban sacarme del auto.

Pov radio de Lewis

—Lewis...Mhmm...Algo paso con Nat.
—Qué?¿Qué paso?—La radio de Lewis se quedo por un momento en un completo silencio, el miedo en Lewis cada vez era mayor al no tener respuesta. —¿Qué mierda le paso? ¡Respondan con un carajo!

—Tuvo un accidente automovilístico y va de camino al hospital.
—A la mierda todo.  Me saldré de la carrera.
—Lewis relájate y no cometas una estupidez.
—No me pidas que me relaje, puede perder a mi bebé ¿no entiendes eso?

—Si lo entiendo pero relájate, te mantendré informado toda la carrera si hay noticias de su estado pero no abandones, estas en P1 no puedes abandonar.
—¡Puta madre! ¡Maldita sea! Me quiero ir.- Lewis comenzaba a sollozar.

—Aguanta por favor, solo faltan dos vueltas.-
—No jodas, apagare la radio.

Cuando Lewis cruzó la linea de meta ni siquiera celebró, cuando le entregaron el trofeo el solo agradeció y se fue corriendo del circuito, tomo el primer vuelo que había para Italia, la preocupación y ansiedad en su rostro era demasiado notable.

pov Natalia

Desperté con un dolor intenso en todo mi cuerpo, mire a mi alrededor y me encontraba sola con una enfermera, al ver que desperté ella se acercó a mi y llamó a otros doctores.

—Todo está bien, tranquila.
—Mi bebé...necesito saber como esta.—la cara de la enfermera se entristeció y bajo la mirada, estaba por decir algo pero en eso entra otro doctor.

—Ciao Nat.
—Si hola hola, ¿Como esta mi bebé?— El doctor y la enfermera se voltearon a ver pero las palabras no salían de su boca.