La presa.

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Narra Emma.

Me siento sucia, esos hombres hicieron conmigo lo que quisieron.

Cuando me trajeron como moneda de cambio por culpa de mi hermana, tuve miedo. Debía pagar una deuda que no provoque.

Pero entonces, vi los ojos de Vladimir,  había interés y deseo. Escuché lo que decían las sumisas, él no tocaba a nadie... pero me deseaba a mí, así que decidí utilizar eso a mí favor.

Cuando me trajo a la mansión me dijo que no llamara la atención, su padre había ordenado que me lleven a los calabozos pero fuí más inteligente y utilice mi belleza a mí favor.

Pero lo ví a él, sabía que estaba mal pero ese hombre me causaba un calor.

Él Boss era todo lo que podía desear.

Jugue con él, utilice el papel manso y obtuve lo que tanto anhele. Poco a poco me fui metiendo en su piel.

Cada vez que las sumisas querían humillarte, las ponía en su lugar.

¿Quienes se creían?, solo eran unas putas... Yo era Emma James, hija de Rick James, exgeneral de la FEMF.
Esas putas habían sido criadas para dar placer pero yo... Yo había sido criada para ser la señora del lugar, soy una patinadora increíble, yo venía de una buena familia. Era mejor que ellas.

Yo Emma, había conseguido la atención del Underboss y el mismísimo Boss.

Pero luego, ilenko me arrojo a sus hombres.

Antes había tenido la seguridad de que no podía tocarme, por eso andaba con blusas pegadas y sin brasiel.

Él dejo que sus hombres me tomaran, y ellos se divirtieron conmigo.
Me cogieron el coño, el culo y la boca, no complacidos con eso me cogieron entre cuatro, sabía que era cuestión de tiempo y los demás trabajadores sabrían que estaba disponible.

Aproveche que el último hombre se había dormido y saque su celular, sin pensarlo mandé el mensaje.
Mi hermana vendrá por mí, y como agradecimiento le dije lo que escuché sobre ese empresario Ronal.

Cuando Sabrina la humilló me sentí tan feliz y satisfecha. La chica perfecta había caído y solo era una perra necesitada que había engañado a su prometido.

La escuchaba llorar y gritar maldiciendo a los Lewis.
Mi hermana era una perra que se escondía tras su imagen de mojigata, era cuestión de tiempo para que tomará su venganza.

Me enteré que los Lewis frecuentaban a los Westin.

Ese Ronal era un impostor, mira que hablar con el mismísimo Boss, líder de la brava.

Mi hermana se enteraría de esto y así podrá acabar con los Lewis.

Después, tome unas fotos de mí y lo subí etiquetando a la FEMF con palabras dirigidas a los James.

Tienes una deuda conmigo. Tú hermanita lleva tiempo conmigo y tú andas cogiendo con tu amante.

De esta manera Rachel tendrá que venir por mí, ella no soporta que la gente hable mal de ella.

Ilenko Romanov lamentará haberme traicionado.


















– Saquenla – dice una voz gruesa.

Abro mis ojos al sentir que me toman del brazo. Intento soltarme pero estos son más fuertes.

Soy arrojada al suelo, mi cabeza se golpea, alzó la mirada y veo a ilenko junto a Vladimir.

– Vlad...

– Silencio, las sumisas no hablan – me dice el Boss.

– No soy una sumisa – le digo enojada

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