That's not how this works | KV

Capítulo 24.

El día del viaje llegó más pronto de lo esperado, pero eso no los detuvo en abordar el avión y prepararse para su próximo fin de semana fuera de la ciudad. Jungkook había conseguido un permiso provisional en la guardería, además de coincidir con sus días de descanso en la universidad, estaba dispuesto a disfrutar del viaje en todo su esplendor sin ninguna preocupación sobre sus hombros; contrario a Taehyung, se encontraba tan nervioso al ser su primer viaje sin Jimin acompañándolo y teniendo a Jiyoung en su vida, sentía que estaba olvidando algo y constantemente el azabache tenía que calmar sus pequeños ataques. 

—¿El avión no se caerá? Escuché un ruido cuando despegamos y siento que eso no es normal.—El pelinegro cuestionó mientras observaba sobre los asientos, buscando algún indicio de alerta. 

Jungkook sonrió, negando.—Taehyung, ¿No te habías subido a un avión antes? ¿Siempre sueles ponerte de esta manera? 

Procesando sus palabras, el mencionado negó.—Creo que es por tener a Jiyoung conmigo, ahora me preocupo más de lo que debería.—Soltando un suspiro, cerró los ojos.—Lo siento, debes de estar pensando en que fue mala idea acompañarnos. 

—Nada de ello, puedo comprender esa sensación.—Alcanzando la mano del pelinegro, envolvió sus dedos en un cálido apretón.—No tienes de qué preocuparte, Jiyoung te tiene a ti y sabes cuidarlo perfectamente, y en caso de que algo esté fuera de tus manos, también estaré ahí para cuidarlo, él no podría estar en mejor cuidado que en nosotros. 

Asintiendo ante sus palabras, bajó la mirada hacia el pequeño que dormía plácidamente entre sus brazos. Verlo con aquella expresión relajada y su pecho subiendo y bajando rítmicamente con respiraciones suaves le provocaban cierta sensación reconfortante, por lo que se obligó a mantener esa imagen en su cabeza cada que algún pensamiento intrusivo lograba invadir en su mente, porque tenía la certeza de que nada malo pasaría, solo eran sus propios miedos hablando. 

El resto del vuelo fue menos estresante para Taehyung, sin embargo sintió que pudo respirar verdaderamente hasta que pudo bajarse con el bebé en brazos y el sol pegó directamente sobre sus hombros. 

—Bien, bebé, hemos llegado. ¿Emocionado por lo que nos espera? Presiento que será un fin de semana memorable.—El pelinegro confiaba plenamente en ello. 

(...)

La primera parte del itinerario consistía en una cena en el restaurante del hotel. Todos se encontraban en sus respectivas habitaciones desempacando y descansando después de varias horas de vuelo, teniendo la tarde libre para conocer a los alrededores antes de volver a verse. 

Taehyung desempacaba cuidadosamente mientras Jiyoung jugaba con uno de sus peluches favoritos en la cama, y Jungkook organizaba las cosas de ambos en el armario.

—Es más bonito de lo que esperaba.—Comentó el azabache, admirando la vista desde el balcón. El océano se extendía como un lienzo infinito bajo el atardecer, y los colores cálidos del cielo bañaban el paisaje con una luz suave.

—Es verdad. Cada año el equipo elige lugares increíbles.—Respondió Taehyung, dejando las últimas cosas en su lugar antes de acercarse a cargar a Jiyoung, que estaba comenzando a bostezar.

El primer día en el hotel transcurrió rápidamente entre desempacar, explorar un poco las instalaciones, y organizar todo para que Jiyoung estuviera cómodo en el cuarto. Taehyung y Jungkook apenas tuvieron tiempo para relajarse antes de prepararse para la cena oficial de bienvenida organizada por la editorial. Era una tradición que se realizaba cada año, y esta vez se aseguraron de contratar niñeras profesionales para cuidar de los pequeños mientras los adultos disfrutaban de la velada.