Título: El inicio de una mágica historia.
Advertencia: La rayis se va a llamar Adelaide y ella va a ser una maga perteneciente al universo de Harry Potter.
Recomendación: Leerse este capítulo sabiendo la historia de la saga de Harry Potter.
Edades: Ambos tienen 16 años.
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Adelaide Jane Lennox Moonheart era conocida por su belleza, inteligencia, y por sus habilidades en la magia y en la brujería.
Su padre era un reconocido empresario de los Estados Unidos, y su madre una joven maga de la sociedad inglesa.
Ella pasaba poco tiempo en los Estados Unidos, por qué ella estudiaba en Hogwarts, perteneciendo a la casa de Ravenclaw, donde pasaba la gran mayoría del tiempo.
Pero quien diría que Adelaide y Damián cruzarían caminos.
La madre de Aldelaide había pedido autorización para que ella pudiera viajar a U.S.A por 3 días,
extrañamente, Umbrige la dejó.La menor estaba bastante estresada, pues era su 5to año, por ende tenía que dar los TIMOS, además de tener a un sapo Barbie tratando gobernando Hogwarts, no era nada fácil.
Ahora estaba terminando de arreglarse para salir a la gala de sus padres, pues se aliaron con Bruce Wayne para un negocio importante.
Cuando ya estaban listos, se subieron a la limosina para ir al lugar del evento.
Cuando llegaron, Adelaide fue el centro de atención, ya que debido a sus estudios en Hogwarts, no aparecía mucho en eventos con sus padres.
✨Adelaide's POV:✨
Después de que la prensa me tomara fotos, entré al imponente edificio, todos me miraban como si fuera lo más llamativo en toda la fiesta.
Saludé a algunas personas y hablé un poco con estas, después de un rato, mi madre me llama para que fuera a saludar al señor Wayne, y sin quejarme, cumplí la orden.
Mientras me iba acercando a él, sentí una vibra rara, como si estuviese ocultando algo muy relevante.
Cuando lo saludé y estreché mi mano con la de él, vi que tenía un pasado oscuro, al igual que su presente.
Después de un rato estaba agobiada con tanta gente a mi alrededor y tratando de hablarme, así que me fui a algún lugar más reservado. Pero lo que no sabía es que ya había alguien ahí.
Salí al jardín del edificio, y me sorprendió encontrar a un joven, estaba sentado en el pasto, se notaba que era un poco más alto que yo.
Iba a decir algo pero se me adelantó:
—Tu debes ser Adelaide Lennox. ¿Verdad?— dijo una voz que sonaba segura y hablaba con obviedad.
—Y supongo que tú eres Damián Wayne, he oído hablar de ti.— le dije sin sonar grosera mientras me acercaba a él.
Cuando me senté, vi a un chico de piel morena y hermosos ojos esmeralda.
—Todos creen que estás desaparecida, pues nunca apareces en los eventos que organizan tus padres.— dijo mientras miraba a la luna como si fuera lo más interesante.
—Pues, estudió en un internado en gran Bretaña, por eso es que no aparezco tanto en las insoportables galas de mis padres.— con mi último comentario, el río.
—Te entiendo.— dijo mientras miraba el cielo estrellado, pensando en decir algo.
—Sabes, se tu pequeño secretito, tú no estudias en un internado normal ¿verdad maga?— cuando él soltó esas palabras lo miré fijamente.
¡Como carajos lo sabía! ¡Por Merlin, ahora me va regañar porque un Muggle sabe mi secreto!
—¿Como lo sabes?— trate de preguntarle de manera calmada.
—Fue facil descubrirlo, tu papá una nocha cuando estaba con mi padre, y lo confesó. Así que tu sabes de magia ¿eh?.— dijo restándole importancia.
—Y por qué te metes en conversaciones ajenas, petirrojo.— solté como si nada, esperando su reacción.
Pues digamos que sabía su pequeño secreto, pues una noche de verano cuando estaba acá, tuve una visión donde lo veía a él sacándose la máscara de Robin después de patrullar.
—¿Y tu como lo descubriste? ¿Con magia?— dijo algo intrigado.
Reíste por la última pregunta que había hecho.
—No hizo falta usar un hechizo para saberlo, una noche vi cómo te sacabas la máscara mientras estabas en la baticueva.— respondió casi sin interés.
—¿Acaso espías la Baticueva? ¿Cómo viste ese momento si nunca has estado allí?— preguntó con su tono más serio y de detective.
—Bueno, digamos que tengo visiones, algo heredado de mi madre, y una noche cuando me quedé dormida tuve una visión donde te veía a ti sacándote la máscara.— comentó mientras lo volteaba a ver.
—Vaya, suena interesante, ¿Como es la vida en tu escuela? ¿como dijiste que se llamaba?.— me preguntó mirándome a los ojos.
Me demoré unos pocos segundos en responderte, quería explicarle de la mejor manera posible para que él entendiera.
—Bueno, en Hogwarts, se divide en cuatro casas, que son como hermandades: Gryffindor, al Lugar donde van las personas con valentía, la honestidad, el coraje, la caballerosidad y la disposición. Hufflepuff, son muy amigables, respetuosos y abiertos a la diversidad, Los Ravenclaw son creativos, inteligentes y abiertos al conocimiento, y por último, Slytherin, son ambiciosos, determinados y astutos. Yo pertenezco a la casa de Ravenclaw.— Terminaste de hablar.
Damián parecía algo sorprendido al escuchar tus palabras, el mundo mágico era más interesante de lo que él pensaba.
—Así que eres creativa, inteligente y abierta al conocimiento ¿eh?.— Hace una pequeña pausa, y la mira a los ojos . —Esa vida tiene que ser, algo estresante.— dijo soltando una pequeña risa.
—Bueno, si tengo todas las cualidades de mi casa, y esa vida es estresante, pero creo que tu vida es más estresante que la mía. ¿No es así, héroe?— le dije con un tono cómico.
—Mi vida claramente es estresante, de día se supone que soy un 'estudiante normal' y en las noches soy Robin. Todo Gotham depende de mí trabajo.— dijo con una mirada más fría.
Me acerqué un poco más hacia Damián, para mirarle a los ojos y volver a hablar.
—Lo que tú haces todas las noches es algo de admirar, pero nunca olvides que también eres un ser humano, también tienes que vivir tu vida.— le aclaró.
—Tienes razón, la vida es una, no soy un adolescente normal, pero tus palabras han causado algo de efecto en mi, gracias.— terminó de hablar.
Yo le iba a decir algo, pero llega mi hermana menor.
—Adelaide, Mamá te llama, te espero allá.— dice mientras se devuelve a la fiesta.
Miro como ella se va, y lentamente volteo hacia Damián, para volver a darle toda mi atención.
—Bueno, me tengo que ir, espero que nos volvamos a encontrar, te voy a escribir cartas.— dije mientras me levantaba.
—Fue un gusto Adelaide, espero que nos volvamos a ver.— se levantó del césped para acercarse a mi.
—El gusto es mío. Espero que nos volvamos a ver, niño maravilla.— dije mientras soltaba una pequeña risa.
—Nos vemos, Adelaide.— el término de hablar mientras yo ya iba de camino al salón.
Aquel chico tenía algo interesante, algo poco común, ambos esperaban con ansias volver a verse.
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One shots Damián Wayne
AcakOne shots, imaginas,preference,Type of y más de Damián Wayne