Cinco minutos después de que regresara mi hermano cargando un enorme saco lleno de todo tipo de dulces, Luke tocó la puerta de entrada. Peter y yo corrimos rápidamente a abrirle, junto con él estaban Lisa y Emma. Los saludamos y los invité a pasar, Peter los guió hacía mi habitación. Yo estuve a punto de subir detrás de ellos, cuando mi hermano me detuvo.
-Espera-me dijo-¿Invitaste chicas? No me dijiste que habías invitado chicas...
-Sí, ¿ocurre algo?
Me observó atentamente estudiándome con la mirada, mientras tomaba un dulce del saco y se lo metía a la boca.
-No, supongo que no...pero deja la puerta abierta-me advirtió.
Puse los ojos en blanco.
-Bueno, entonces la ventana-me dijo antes de meterse a la cocina-¿Quieren pizza?
-¿Otra vez?
-Agradece que tenemos dinero para comprar pizza...sí tan solo a tu edad papá me hubiera dejado comer pizza diario...
-Está bien...como sea.
Cuando subí, el grupo se encontraba tirado en el suelo riendo a carcajadas sobre alguna tontería que Peter hubiera soltado. Me les uní y escuché como el chico narraba la historia de cuando un tlacuache se fugó dentro de su casa y atacó a su hermana mayor. La había oído tantas veces...de hecho, ¡yo había estado presente! Pero por alguna razón siempre omite esa parte.
-Entonces, mi hermana gritó y corrió a esconderse al baño...
Observé por la ventana, la primera estrella ya se había iluminado en el cielo que comenzaba a oscurecerse. Luke se acercó a mí.
-¿Estás bien?-me preguntó.
-Sí-titubé-¿Descubriste algo sobre la electricidad?
-Sí, tal parece ser que fue el ejército-me comentó-Es una teoría...
-¿Qué?-le pregunté sorprendido.
-¡Oigan!-nos llamó Peter-¡Aquí estamos! No se olviden de nosotros...
-¿Cómo cuando fuiste a cenar con tu familia, te encargaron a tu hermanita y la olvidaste en el restaurante?-le atacó Luke.
Emma río como loca. Lisa comenzó a carcajearse también pero no lo hizo por el comentario de Luke, sino por la extraña forma de reír de su amiga. Peter se sonrojó.
-¡No es cierto! Bueno sí...pero no del todo cierto-se defendió.
-¿De qué tanto hablan chicos?-preguntó Emma en un suspiro.
Luke me observó tímido.
-La madre de Peter mencionó haber visto varios militares por el pueblo, los apagones van y vienen, y por alguna razón las brújulas no funcionan-explique.
-Tampoco el radio-añadió Lisa.
La observamos expectantes.
-Esta tarde antes de venir, intenté encenderlo, pero se escuchaba demasiada estática en la mayoría de las estaciones y algunos pitidos.
Luke abrió los ojos como platos.
-Pero por el momento sí hay electricidad-mencionó Peter encendiendo la luz, el cuarto se iluminó.
-Magnetismo-sugirió Emma.
-¿Qué hay de la mina del pueblo?-preguntó Lisa-¿Sigue en operaciones?
Por si no lo había dicho antes, Buitenville es un pueblo minero. Contamos con una pequeña pero significativa mina justo del otro lado del bosque, cerca del lago Greenwood.
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El Monstruo de Buitenville
Science Fiction¿Alguna vez haz mirado las estrellas y te has preguntado que hay allá afuera? Ese solía ser una extraña adicción misma, hasta que el mismo cielo nocturno me dio la respuesta. Yo y mis amigos seguimos la luz hacia el bosque, donde nos encontramos co...