Capitulo 7

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La luz del día entró por la ventana de mi cuarto despertándonos de nuestro profundo sueño. Observé a mí alrededor, Peter dormía en el medio cubierto con una sábana. Luke estaba sentado a la orilla de la cama con la computadora en manos. Observé el reloj, eran apenas las ocho de la mañana, me incorporé lentamente aún muerto de sueño, comencé a estirarme mientras bostezaba; miré hacia la ventana y observé la belleza del día. Normalmente prefiero la noche, pero he de admitir que era una mañana hermosa.

Todo iba bien, hasta que de golpe recordé lo vivido la noche anterior. Por un momento me había olvidado por completo de ello, y me había parecido perfecto. ¿Por qué tenía que acordarme justo en ese momento? Todo llegó a mi cabeza estrellándose en mi mente justo como la cápsula del ente: el impacto, el bosque, los militares, el cráter, el Alíen, la prosecución...luego llegaron Emma y Lisa...

La noche anterior Peter había comentado que probablemente había algo bueno en todo eso, y lo había encontrado: Mi relación amistosa con Lisa comenzaba a forjarse, yo ya la podía considerar mi amiga y esperaba que ella me considerara su amigo. Lisa...tal vez, Peter tenía razón. Sí me gustaba, no lo suficiente pero sí me gustaba. Tampoco es que tuviera muchas esperanzas con ella, pero con el simple hecho de ser su amigo me conformaba, aunque después estaría sufriendo en la "friendzone", me agradaba la idea.

Peter en el suelo comenzaba a despertar con un gran bostezo, Luke lo miró de reojo rápidamente para luego continuar tecleando en mi computadora. ¿Qué tanto hacía? Mientras no entrara a sitios para adultos, todo estaba bien.

Me puse de pie y fui a orinar al baño, cuando terminé y volví. Peter estaba junto con Luke en la computadora, riendo de algo. Los tres estábamos en ropa interior, pero nos teníamos tanta confianza a tal grado que nos cambiábamos el traje de baño en la misma habitación sí era necesario, así que no me importaba en lo absoluto.

-¿Qué hacen?-pregunté acercándome.

-Observamos un nuevo de esos vídeos virales de internet-respondió Peter riendo-Este es sobre una chica que le reprocha a su artista favorito...lo sé, es extraño...

¿Cómo podían actuar tan naturalmente después de lo ocurrido la noche anterior? Me asomé por la ventana y observé la solitaria calle, a unas casas, pude ver un hogar cubierto de papel higiénico. Esperaba que ningún niño hubiera sido atacado por el Monstruo la noche anterior mientras pedía dulces en la calle. Me pregunté, ¿Dónde estaría la criatura? ¿En el bosque? ¿En algún edificio abandonado? ¿O abría abandonado ya la zona?

Mi hermano, tocó la puerta de la habitación para anunciarse, su cabeza se asomaba ligeramente por la entrada.

-Chicos-saludó-No tenía ni idea de que se habían quedado a dormir...espera, ¿y tus amigas...?

-En casa, ellas no se quedaron-lo tranquilicé.

-Qué lástima-lamentó Peter por lo bajo, Luke le dio un codazo.

Contuve la risa.

-Como sea, no sirven los teléfonos y tengo que llamar a papá y mamá...iré a buscar alguno en la ciudad que aún funcione, ustedes...no sé, háganse unos sándwiches...pero hará falta el pan...te dejo dinero en el comedor...volveré en cuanto antes.

Asentí y se marchó.

-No sirven los teléfonos-frunció Luke el ceño.

-¿A qué se debe?-preguntó Peter-¿Será por el...Monstruo?

El chico aún seguía muy asustado y se rehusaba a admitir que lo que habíamos visto era un Alíen. Pero era algo indiscutible, ¿Qué otro tipo de bestia salía de enormes cápsulas de metal que llegaban desde los cielos? ¿Un wómbat? Luke asintió levemente con la cabeza, mirando a una esquina de la habitación.

-Probablemente, el impacto haya provocado una especie de pulso electromagnético.

-¿Eso no inutilizaría el internet?-le pregunté señalándole la computadora.

-No hay internet-mencionó el chico-Descargué el vídeo el día de ayer...tampoco hay radio, ya lo intenté.

-¿Quieres decir que estamos totalmente incomunicados?-le planteé.

-Parece que sí-respondió Luke.

-Malditos sean los marcianos y su chacha-se enfadó Peter, dijo marcianos...ya era un avance.

-Como sea-mencionó-Luke cerrando la Laptop-Vamos por algo para desayunar...

Nos vestimos rápidamente y salimos directo a la calle, andamos a pie. Antes de continuar, Peter fue a su casa para avisarle a su madre que estaríamos afuera. Para Luke no era necesario sus padres trabajaban toda la mañana fuera, así que fuimos directo al supermercado. En el camino, vimos una multitud de personas cuchicheando alrededor de una tienda. ¿Qué ocurría?

Nos acercamos y Peter nos abrió paso entre aquél mar de gente. Cuando llegamos a la primera fila, vimos de lo que se trataba. Era la Joyería del Señor Earn, un viejo bastante extraño. Al parecer alguien había irrumpido en su tienda rompiendo los cristales de enfrente y derrumbado la puerta de entrada, dentro todo estaba destruido, literalmente. En el suelo había cientos de cristales rotos y algunas perlas, en las paredes había una especie de extraños arañazos.

-Yo se quién fue...fue el Señor Triplet-acusó el viejo mientras hablaba con el oficial.

-¿El Señor Triplet?-se sorprendió el policía.

-¡Sí! Yo lo sé, hace unos días vino por que había perdido su anillo de bodas y quería uno idéntico, listo para su noche de aniversario...¡al día siguiente! Le explique que era imposible, y se enfado demasiado...¡Fue él! Arréstenlo.

-Señor, no creo que Triplet haya querido rajar de tal forma su tapiz...

-¡Siempre lo he dicho! Ese hombre es un animal-se defendió el joyero.

Yo y mis amigos nos miramos entre nosotros un tanto asustados, antes de continuar nuestro camino hacía el mini-súper. En el camino, vimos varios faroles destrozados y algunos cables que colgaban de los postes caídos. Varios carros contenían enormes abolladuras, mientras las patrullas de la policía iban de un lado a otro, pudimos observar un enorme camión del ejército patrullando la zona.

Al principió, me alarmé. Nos reconocerían. Sin embargo pasaron de largo como sí nosotros no estuviéramos ahí. Me sentí un tonto, ¿Cómo nos reconocerían sí era de noche y muy probablemente la patrulla que nos había seguido ahora nadaba en los jugos estomacales del Monstruo?

Entramos en la tienda y cómpranos tranquilamente un poco de cereal y leche, con eso nos bastaba. Cuando íbamos de regreso a casa, nos encontramos con Lisa y Emma en el camino, ambas iban montadas en sus bicicleta con dirección hacía opuesta a nosotros. Nos sonrieron nerviosas.

-¿Dónde estaban?-preguntó Lisa-Los fuimos a buscar y nos los encontrábamos, creí que...

-No importa-interrumpió Emma.

-Fuimos a comprar un poco de desayuno-respondió Peter.

Lisa hizo una mueca pensante.

-Ahora estamos ocupadas, ¿les parece si al rato pasamos a verlos?

-Sí-titubé.

-Perfecto-sonrío Lisa, antes de marcharse seguida de Emma continuando su ruta.

Luke soltó un silbido.

-Vaya, primero llueven monstruos del cielo, y ahora unas chicas...¡buscándonos!-exclamó el chico-Confirmado, es el fin del mundo.

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El Monstruo de BuitenvilleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora