Jane (Saga Darks)

11. ¿Papá?

Los sueños no paran de repetirse, y cada vez son más claros, realmente me pregunto si son sueños o recuerdos, pero dado que no tienen nada que ver con lo que recuerdo de parte de mi infancia, supongo que serán simples sueños.

Miro el pequeño reloj de plástico de mi mesilla, son las 8:15, me levanto alarmada pensando que me he quedado dormida, tampoco sería tan raro, ayer me fui a la cama muy tarde, pero en el momento en el que cojo mi ropa rápidamente del armario me doy cuenta de que es Domingo, así que tenemos de margen hasta las nueve para levantarnos.

Abro el pequeño cajón de mi mesilla y empiezo a rebuscar para encontrar la llave rápidamente, cuando la tengo en las manos la acerco a la ventana para que le de un poco de luz y veo que tiene una pequeña S gravada en en lateral, eso no me dice nada. Y no creo que me sirva de ayuda para saber qué es lo que abre.

Aunque sé que no debería tener prisa por levantarme e ir a la cafetería, me visto rápidamente y salgo cuanto antes de mi habitación no sin antes pasar por el baño primero.

Cuando ya me he lavado la cara voy a la cafetería y cuando por fin los guardias me dejan pasar, busco a Liam y a Hiena con la mirada, les encuentro rápido, ya que supongo que mucha gente del primer pasillo seguirán en sus habitaciones durmiendo.

Me siento en una silla al lado de Liam y eso hace que su conversación pare, me debato mentalmente si debería ir directa al grano y preguntarles por qué desapareció todo el mundo, o si debería disimular un poco, pero me decido por la primera opción.

-Hola chicos -Intento sonreír, pero mi nerviosismo me delata y no lo consigo.

-¿Estás bien, Jane? -Me pregunta Hiena y tanto ella como Liam fruncen el ceño.

-Si, eh... esto.. ¿Os puedo hacer una pregunta sin importancia?

-Claro... -Responden los dos al unísono.

Pienso rápidamente cuál sería la mejor forma de preguntarles, hasta que al final formulo la pregunta más sencilla.

-¿Por qué se fue todo el mundo sin avisar? -Cuando veo que me miran extrañados, continúo - En la fiesta de anoche; me fui un minuto a mi habitación y cuando volví estaba todo vacío -Me salto la parte de mi conversación con Hunter y espero a que respondan.

-Jane... No nos fuimos a ninguna parte -Antes de que Hiena pueda continuar le interrumpo.

-¿Qué? -La pregunta sale de mis labios sin darme cuenta.

-Si, te fuiste a tu habitación pero no volviste, pensábamos que te había pillado un guardia -Dice Liam con cautela, como si a la mínima que dijera algo fuera a volverme loca.

-No, vosotros os fuisteis, cuando volví todo estaba vacío, yo soy la que pensaba que os había pillado un guardia -Intento explicarles todo lo que recuerdo lo mejor posible, y me planteo contarles lo de Hunter.

-Jane, no sabemos de lo que nos estás hablando, igual deberías descansar.

-No, Hiena, no. No me trates como si estuviera loca, yo sé perfectamente lo que pasó.

Nos quedamos en un silencio incómodo durante unos minutos, algo que nos pasaba pocas veces, hasta que Liam decide sacar conversaciones triviales sin importancia y se acaba la hora del desayuno.

Salgo de la cafetería y les digo a mis amigos que necesito descansar, pero lo que realmente necesito es investigar todo lo que está sucediendo.

Voy al baño para darme una ducha refrescante y poder despejar un poco la mente, y cuando salgo escucho un aviso por los megáfonos "Pacientes del pasillo 1 y 2, les recordamos que hoy es el dia de visitas, así que vayan a la sala de espera y se les informará si alguien ha solicitado verles"