𐙚 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐗𝐈𝐈𝐈 𐙚

173 36 15
                                    

Sergio estaba visiblemente molesto, y Lewis no tardó en notarlo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sergio estaba visiblemente molesto, y Lewis no tardó en notarlo. Todo había comenzado más temprano ese día, cuando Carlos le comentó cómo había visto a Max y Lando juntos en la zona donde Max acostumbraba cortar leña.

La imagen de ambos, conversando y compartiendo sonrisas, se había quedado grabada en la mente de Sergio, y con cada pensamiento, sentía que una mezcla de celos y frustración lo invadía más.

Había intentado concentrarse en otras cosas, pero cada vez que cerraba los ojos, podía ver a Lando, con esa sonrisa suya, riendo de alguna broma de Max.

Lo peor era que Max parecía no darse cuenta de lo cerca que se había vuelto de Lando. Sergio sentía una incomodidad creciente, como una pequeña espina que no lograba ignorar.

Lewis, siempre atento a los detalles, notó ese cambio en la expresión de Sergio. Sabía que algo había sucedido, y aunque no estaba completamente seguro de qué, tenía una buena idea.

—Oye, Sergio, no te veo con muy buena cara... Pero tengo una gran idea —dijo con una sonrisa amistosa en su rostro y sentándose a su lado — ¿Sabes que va a ver una fiesta por halloween?

—Claro que lo sé, todos los años lo hacen, y siempre viene un montón de gente —comentó Sergio cruzándose de brazos algo irritado.

—Je sí... Podría ser divertido, ¿no? Además, seguro te ayudaría a despejarte un poco.

Sergio lo miró, y por un instante dudó. Sin embargo, la imagen de Max y Lando juntos reapareció en su mente, intensificando la frustración que aún sentía.

Decidió que una salida con Lewis podría ser justo lo que necesitaba para distraerse.

—¿Sabes qué? Claro, ¿por qué no? —respondió con una sonrisa algo forzada, pero aliviado de pensar en algo diferente.

Lewis asintió, satisfecho de verlo aceptar.

—Perfecto. Será divertido, ya verás —dijo, dándole una palmada amistosa en el hombro.

Mientras se alejaba, una leve sonrisa de satisfacción asomó en su rostro, seguro de que esa noche Halloween sería mucho más interesante de lo que esperaba.

Una vez que Lewis se alejó de Sergio, decidió que era hora de compartir la noticia con Carlos. Caminó rápidamente hasta el corral, donde encontró a su amigo alimentando a las gallinas.

—¡Carlos! ¡Tienes que escuchar esto! —exclamó Lewis, acercándose con entusiasmo.

Carlos levantó la vista del cubo de granos que estaba vertiendo en el comedero, pero su expresión no reflejaba la misma emoción que Lewis.

—¿Qué pasa? —preguntó, sacudiéndose las manos para quitarse los restos de alimento.

—He hablado con Sergio. Estaba bastante molesto por la cercanía entre Max y Lando, así que lo invité a la fiesta de Halloween. ¡Adivina qué! Aceptó sin pensarlo —dijo Lewis, sin poder ocultar su satisfacción.

Más allá del bosque | Chestappen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora