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- Primera cosa de la lista. -Dice Hoya animado tras dar un trago a la cerveza que sostiene-. Enseñarte a nadar.

Tamara abre mucho los ojos y le golpea en el hombro.

- NO. ESO DE ÚLTIMO.

- POR QUÉ. -El chico se echa a reír y se baja de la mesa hasta la hierba de un salto.

La joven ríe en bajo mientras niega con la cabeza. El agua y ella son algo incompatible.

- Bueno, pues... comer y videojuegos... Hm... - Howon permanece en silencio con una mueca pensativa en su rostro.

Videojuegos. La mujer sonríe para sí. Aquello lo habían dicho cuando tenían diecisiete años.

Diecisiete.

- ¿Cuántos años tienes? - Pregunta de pronto, y el coreano carraspea antes de suspirar.

- Veinti...veinticuatro, hm. -Se muerde el labio y se acaricia la nuca.

Él detesta que pregunte ese tipo de cosas. Le hace recordar en todo lo que le ha mentido hasta ahora.

- Oh, hm, vaya. -Tamara permanece en silencio unos minutos sin dejar de mirarle y luego se levanta-. Vamos, anda. -Sonríe haciendo un gesto con la cabeza.

El chico sonríe a su vez, de vuelta a la tranquilidad, y se pone las gafas de sol al mismo tiempo que echa a caminar tras ella.

- Tercera cosa de la lista. -Menciona Tamara-. Meterte una paliza en una carrera.

- Oh, venga ya. Soy el más rápido de mi grupo.

Hoya la mira de arriba abajo y ladea la cabeza, mordiéndose el labio inferior al llegar hasta el trasero de la muchacha.

- Me pone nerviosa que la gente vaya detrás de mí. -Comenta ella, parándose de golpe-. TRES. DOS. UNO...

- ESPERA, NO ESTOY LIS...

-YA.

La chica echa a correr lo más deprisa que puede entre risas que la dejan sin aliento, esquivando a las personas mientras estas gruñen malhumoradas.

Howon corre tras ella pidiendo disculpas a todo aquel que se queja de los dos jóvenes, pero sin apartar la mirada del cabello rojo que se ondea delante de él.

- TAMARA, CUIDADO.

El joven se coloca a su altura y continúa riendo. La mujer le adelanta unos centímetros, cosa que él aprovecha para rodear su cintura con los brazos y correr con ella encima hasta la puerta del hotel.

- AH, HEMOS EMPATADO, VAYA.

- Y UNA MIERDA. -Grita Tamara riendo más y se revuelve para que la suelte-. QUIERO LA REVANCHA.

Howon la deja en el suelo y le besa la cabeza al mismo tiempo que la abraza.

- SHHH, EMPATE, EMPATEEE... Empate, que me ibas a ganar.

- Al menos lo admites... -Murmura divertida y le coloca bien las gafas y el cabello cuando se separan.

Él permanece mirándola en silencio a través de los cristales tintados que cubren sus ojos, sonriendo.

Tamara comienza a enrojecer y frunce el ceño.

- ¿Por qué me estás mirando...? -Murmura nerviosa y le da un empujón suave antes de coger otra lata de cerveza en la mochila.

Él no dice nada durante unos segundos sin dejar de sonreir. Observa la boca de la muchacha mientras posa una mano en su mejilla y termina por acercar sus labios a los de ella.

Tamara, respirando agitada por lo que podría estar a punto de ocurrir, aprieta más la lata hasta que se le cae de entre los dedos y moja los pantalones de Hoya, interrumpiendo el acercamiento.

- L-lo siento, lo siento... -Susurra aún más nerviosa y saca un paquete de pañuelos de la mochila.

- No importa, no importa... -Dice riendo y se muerde el labio, suspirando cuando comienza a secarse.

La mujer se maldice a sí misma en su mente por estúpida y luego traga saliva.

- ¿Te acompaño a casa? - Pregunta Howon antes de carraspear.

Ella niega muchas veces con la cabeza al ver la hora que es. Su madre podría estar allí. O su hermana, lo que sería peor.

- Ya estamos en el hotel de todas formas, quédate...

La pelirroja respira hondo tratando así de tranquilizarse y le mira de reojo. Si hubiese pasado... Al fin y al cabo era algo de esa lista.

Número 42. Que Jongsoo sea mi primer beso.

Dios mío, tenía veinte años y no había estado así con nadie. Quizás mientras ella le esperaba desde los diecisiete, él estaba besando a otras tantas muchas.

O peor.

Igual se las follaba.

Tamara hace una mueca tratando de callar a su cabeza y luego suspira al darse cuenta de que él estaba diciendo algo que no había llegado a escuchar.

- ¿Decías algo...?

- Que te llamaré... - Hoya besa la mejilla de la muchacha y luego le revuelve el pelo-. Buenas noches, Mara... -Se despide antes de entrar en el edificio.

- Buenas noches, Howon... -Murmura ella en un suspiro.

Last call. [INFINITE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora