—Hey —al escuchar esa voz ronca, supo en segundos a quién le pertenecía, al levantar la mirada, se encontró con una castaña que usaba una hoodie negra y gorra roja hacia atrás. Le regaló una sonrisa.
—¿A qué se debe tu visita por estos rumbos? —sonrió de vuelta.
—Me estaba preguntando unas cosas, ¿crees poder ayudarme en matemáticas?
—Claro, lo que necesites. Solo que hoy tengo práctica hasta las 4. Podríamos vernos en unas horas libres.
Antes de que Montes lograra responder ante la pregunta, las interrumpió un extraño carraspeo de alguien cercano.
—Kari, ¿te está molestando? —Sian se acercó de manera protectora, pasando su brazo izquierdo en el hombro de Karime, detrás de él estaba un chico moreno de cabello corte de hongo y una chica alta de cabello largo y negro, tenía los pómulos muy saltados: Ricardo y Araceli.
—No —se limitó a decir mientras se zafaba del agarre.
—¿Cómo? ¿Te llevas con esta jochis? —Ricardó apretó la boca al ver detenidamente a la chica más alta.
Gala estaba demasiado molesta y le daba una especie de incertidumbre si Karime la defendería o solo se burlaría como en otras ocasiones.
—Gala es mi amiga, les pido que la dejen en paz.
—Ay no hermana, ¿cómo que esta es tu amiga? —Ricardo hizo énfasis en amiga—. No sabía que hacías caridad.
La más alta rodó los ojos al escuchar todas esas tonterías, no tenía ganas de lidiar con esa clase de personas, no comprendía cómo la pelinegra estaba rodeada de ellos.
—Me voy, que no tengo ánimos de seguir escuchando pendejadas. Nos vemos Karime.
—Gatita, ¿de verdad esa machorra no te hizo nada? —Sian tomó de los hombros a la capitana de las animadoras
—En primera, no soy tu gatita, segunda, sabes perfectamente su nombre, no necesitas ser despectivo —se giró a mirar al chico moreno que estaba cerca del pelinegro—. No mames Ricardo, eres gay ¿y neta que te pones a ofender a una persona de tu comunidad?
—No Karimecita, es muy diferente, una cosa es ser afeminado gracioso y otra es ser una mujer muy tosca y corriente como ella.
—¿Saben qué? Me da vergüenza escuchar sus comentarios clasistas y homofóbicos.
—No comprendo el por qué de estarla defendiendo demasiado, Karime te recuerdo que hace años tú empezaste el rumor sobre que ella era lesbiana.
Para la sorpresa de todos los que estaban reunidos cerca del casillero, vieron como la pelinegra tomó su mochila y se fue en dirección de la chica más alta para alcanzarla.
—Lamento que los idiotas de mis "amigos" te molestaran —Karime la tomó por sorpresa del hombro para detenerla.
—Estoy acostumbrada a que digan esas pendejadas, la diferencia es que si no estuviera en este negocio contigo, ya les hubiera roto la cara.
Ambas comenzaron a caminar manteniendo el ritmo a la par.
—Se irán para atrás cuando vean lo del viernes —se detuvieron solo para observar al grupo de chicos que las miraban con incredulidad.
—¿Segura qué quieres hacerlo? Nunca has salido con una chica y estoy segura que todos se sorprenderán.
—La vida es un riesgo y la venganza contra ese perro teibolero recién va empezando.
—¿La señorita Karime Pindter? —un chico alto con overol gris y una playera verde interrumpió la parte final de la práctica que estaban teniendo las animadoras—. Buena tarde, nos pidieron entregarle este ramo de rosas. Esperamos que sea de su agrado. Solo firme aquí —al ver como la chica mencionada siguió las indicaciones de manera rápida, le regaló una sonrisa—, ¡excelente día!

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Tren de medianoche
FanfictionKarime Pindter tenía como meta seguir siendo la porrista más popular durante su ultimo año pero no contaba con que su estúpido novio la terminara para irse con su rival, desesperada por mantener su estatus, contratará a la mejor jugadora de fútbol d...